[Ansatsu Kyoshitsu] El amor puede matar {Karma x Nagisa}

Hora de Karma

❥ PRIMERO QUE TOOOODO. ¡LO SIENTO MUCHÍSIMO, SIENTO DE VERDAD LA TARDANZA! Han sido como tres meses, en los que apenas he pisado mi Wattpad. ¿La razón? No me encontraba con inspiración alguna, no para escribir, claro. Vuelvo a repetir que estoy muy arrepentida, por ello voy a tratar de volver. Para compensar la gran falta de capítulos hasta ahora, iré escribiendo adelantando un poco los hechos, ya saben que me gusta poner ''relleno'' básicamente para que la historia tenga más. . . Historia y no solo ''Karma y Nagisa tiene una noche apasionada y fin'' -que la habrá pero ehié-. ¿Sería malo repetir que lo siento mucho? Mejor me callo y continúo con esto, perdón si he perdido un poco el hilo de la trama, pero han sido meses de pausa. ¡Los amo, y gracias de antemano por leer!

-----------------------------------------

Después de la llegada de aquel extraño profesor, nuestra vida escolar pasó a ser de todo menos normal. No, no dejamos de ser estudiantes, si no que ahora además y como trabajo extra, debíamos actuar como asesinos. Durante varios días mi mente no procesaba bien la información de todo, ¿por qué justamente nosotros, los últimos en toda esta escuela? Simplemente, terminaba suspirando y diciéndome a mí mismo;

Bueno, a alguien le tenía que tocar.

Quizá era obra del destino del que tanto se habla.

Nuestro profesor, el cual no nos quiso decir su verdadero nombre, terminó siendo bautizado como Korosensei. Se le ocurrió a Kayano, viene de korosenai que es imposible de matar, y sensei que creo que no hace falta ni que lo explique.

Las horas de clase se basaban en intentos de asesinatos que terminaban fallando, una y otra vez. La campana sonaba al terminar las clases, y al día siguiente, volvía la misma rutina. Hiciésemos lo que hiciésemos, parecía que estábamos en un bucle que jamás iba a detenerse.

¿Intentos suicidas? ¿Ataques con muchas pistolas? Nada de eso podía con él. Siempre nos repetía que debíamos ser más originales, ¿pero cómo serlo. . .? No teníamos ni idea de cómo asesinar.

- Estoy en casa. . . - Mi voz cansada salió de mi garganta, como si se tratase de mi último respiro. Mi madre, que estaba en la cocina, pareció ni escucharla. Quizá era mejor, así podía subir directamente a mi habitación.

Dejé la mochila a un lado, y me tiré a la cama como si fuese un barco salvavidas o algo por el estilo.

- . . . No he hablado con Karma desde la explosión. - Levanté un poco la cabeza, para ver entre mis ojos entrecerrados uno de los bolsillos abiertos de mi mochila de clase: de ella sobresalían un cuchillo verde, y mi propio celular. - Me pregunto si estará bien. He estado tan ocupado con lo del asesinato, que casi no he tenido tiempo de llamarle. -

Lentamente me incorporé para alcanzar el celular, y sentarme en el suelo, apoyando mi cuerpo en la cama como un respaldo. No tenía ningún mensaje, ni tampoco ninguna llamada perdida. ¿Estuvo él también ocupado? Sin pensarlo más, busqué su número entre mis contactos y lo llamé.

El número al que intentar contactar, está apagado o fuera de cobertura. Por favor, deje su mensaje después de la señal. Era la única voz que se escuchó a través de la línea, una voz femenina procedente del buzón. Cuando se escuchó el pitido, simplemente dije;

- Ah, Karma-kun. . . Soy Nagisa, ha pasado algún tiempo desde que no hablamos, y me preguntaba si estabas bien. Han pasado cosas muy extrañas en este nuevo curso, tengo mucho que contarte, tengo nuevos amigos, la verdad, estoy más cómodo en esta clase por muy loco que suene, quizás los perdedores, estamos mejor entre perdedores. Oh, también tenemos un nuevo profesor que. . . E-Eh. . . - Recordé entonces que era información confidencial, mejor debía cambiar de tema. Mis mejillas enrojecieron un poco. Sonaba de lo más desesperado lo que iba a decir a continuación. - . . . Te extraño mucho, es lo más importante. - Dije con una voz melancólica.