Justicia Joven: Doomed

"Capas volar y capas caer"

||Central City
||20 de agosto 4:08 PM

El desastre era impresionante.

—La zona de desastre se extiende por varias manzanas, hasta ahora no ha habido señales del alcalde de Central City, pero seguimos esperando noticias —habló el reportero desde un helicóptero. Su camarógrafo apuntó debajo de ellos. La ciudad estaba destrozada y en llamas.

—Haz un resumen de la situación, por favor, David —le dijeron desde el estudio de noticias. El lo escuchó en su audífono. El helicóptero dió una vuelta.

—Si, Carl, en la tarde de este día llegó la superheroína que conocemos como Señorita Marciana, acompañada por un hombre que creíamos era Superman, y atacaron la ciudad. La Liga de la Justicia rápidamente se desplegó, pero poco pudieron hacer, para nuestra sorpresa. Ambos provocaron gran destrucción, llegaron incluso a derrotar a la Liga entera. Los detalles son borrosos, Carl, pero tengo una pregunta: ¿que ha pasado con los superheroes reales? Porque lo único que vi hoy, fueron capas volar y capas caer —no parpadeó en lo que habló—. Me despido desde la zona de desastre: David Robinson.

Karen levantó la cara al cielo y vió al helicóptero pasar. Caminó entre los escombros y encontró otro cuerpo. La mano de Vibe caía inherte. Lo tomó y llevó hasta la nave de Batman.

—Creo que es el último —dijo depositando el cuerpo en una camilla. Junto a él, una rubia coleta destacada bastante ahora que los ojos de Artemisa estaban cerrados.

Junto a ella, el cuerpo de Cassie se hallaba.

—¿Que les habrá pasado? —preguntó Flecha Verde.

El Equipo llegó junto a ellos también.

—M'gann les hizo algo —dijo Impulso.

—M'gann está provocando más problemas cada día.

Escarabajo Azul rió.

—Todos provocamos problemas todos los días. Somos superheroes.

La Mujer Maravilla se sonrió.

Subieron a la nave, los 8 cuerpos (puesto que 2 estaban en el Monte Justicia), La Liga y los miembros del equipo que seguían despiertos: Bumble Bee, Escarabajo Azul, Impulso, Robin, Rocket y Chico Bestia.

Batman levantó en vuelo la nave. Karen se sentó en el asiento del copiloto. Nadie hablaba con nadie.

Superman se limitó a apretar los puños. La Mujer Maravilla lo miraba desaprobando su comportamiento. Hal Jordan volaba fuera de la nave. Flash suspiraba mirando los cuerpos de Wally y Bart. La ciudad comenzó a hacerse más pequeña.

—¿Que es eso? —preguntó Karen apuntando hacia las calles de Central City. Un conjunto de camiones comenzaron a entrar a la ciudad. Eran seis camiones con palas gigantescas.

—Son el equipo de limpieza de La Liga —dijo Batman tecleando cosas en la computadora.

—¿La Liga tiene servicio de limpieza? —preguntó Robin.

Batman negó con la cabeza.

—Es una empresa independiente, filial de Wayne Enterprises, que hace favores de limpieza a La Liga a cambio de otros favores.

—¿Que clase de favores? —preguntó Karen.

No contestó. La Mujer Maravilla rió.

—La clase de favores que lo avergüenzan —les dijo amargamente. Batman la miró feo.

Chico Bestia siguió sentado mirando fuera. Canario Negro se sentó junto a él.

—Ahora no, por favor, no necesito tus platicas todavía.