La Obsesión del Tritón

Capitulo 20 Un soplo en una tormenta.

 ―Lirio...

―Créeme ―Bebo del liquido de mi botella, volviendo a ser aprensiva, volviendo a cerrar esa loca esperanza en el fondo del mar ―Él... ―No sé ni qué decir, comienzo a sentirme incapaz de mentir cuando se trata de él ―El señor Procedes es alguien muy distinto a mí, no me siento para nada cómoda con la situación ―Mi amiga me observa con sospecha ―Somos muy diferentes.

Ella suelta un profundo suspiro antes de beber el resto de su cerveza.

―El amor y sus misterios ―También termino mi cerveza cuya botella es de color azul, está que me embriaga rápido, esta que es la tercera de la noche ―Encontrar a la persona correcta nunca es fácil ―Con la mirada perdida en su nueva cerveza continua hablando ―Unas veces nos equivocamos, otras a pesar de que lo tenemos en frente huimos, nos asusta tanto amar que cometemos errores y aprendemos, todos aprendemos, por las buenas o por las malas lo hacemos ―Entrecierro la mirada al verla tan triste ―Se siente como si llegaras al otro lado del arcoíris, es algo así como un mundo donde sólo existen los claveles ―Ella ama los claveles ―Pero otros momentos ―Sonríe con tristeza y bebe de nuevo, me quedo viéndola porque sé que está mal, algo pasó entre ella y Diego que la tiene así ―Se convierte en un infierno que no te deja comer, que te impide pensar ―Intenta sonreír pero no lo logra ―Te pierdes a sí misma y lo único que quieres es amarlo, verlo al llegar a casa, enseñarle que la vida es un milagro, cada día es un milagro, un paraíso a su lado.

―Angélica ―Me acerco a ella ―¿Qué sucede? ―Niega con la cabeza confirmando mis sospechas ―Dime.

―El imbécil del Dario me besó ―Escupe dejando fluir las lágrimas ―Me esta molestando desde hace semanas ―Dario es su ex-novio ―Le dije a Diego lo que estaba pasando y él lo encaro pero Dario no dejó de molestarme y hace unas horas me lo encontré afuera del Restaurante, insistió en hablar conmigo, accedí sin moverme de las escaleras y de la nada me jalo, te juro que no hay nada más, yo lo cachetee con tanta fuerza que me duele mi mano ―En medio del llanto me enseña su mano izquierda, roja y algo hinchada ―Te lo juro Lirio, no tengo nada que ver con él ―Luce desesperada ―Intenté hablar con Diego cuando lo vi, él vio todo eso.

―Oh Dios...

―Diego le dio una paliza a Dario, Pablo tuvo que separarlos, Diego al ver a mi hermano no dijo nada, se quedo ahí, callado, sin dejar de verme, lucia tan herido, tan... ¿Decepcionado? ―Vuelve a llorar ― Sin más se fue ―Rompe en llanto ―Ni siquiera me dejo explicarle

―Tranquila ―La envuelvo entre mis brazos tratando de consolarla ―Todo estará bien ―Prometo ―Diego te ama...

―Y yo a él ―Se aleja y poco, sorbe su nariz ―Muchísimo ¡Por Dios! Hasta un ciego se daría cuenta.

―¿Quieres que hable con él? ―Niega con la cabeza ―Angy...

―Le envié nuestra ubicación ―Explica bajándose la cerveza en una sentada ―Si viene te juro que no lo soltaré jamás...

―¿Y si no viene? ―Seca sus lágrimas, vuelve la mirada a la botella ahora vacía y suspira.

―Si no viene intentaré hablar con él... si no me escucha y me culpa por esto, yo...

―Conozco a Diego ―Logro captar su atención ―Sé que esta muy molesto ―Ella baja la cabeza ―No contigo ―Añado al verla tan decaída ―Él te conoce, sabe quien eres y te ama ―La insto a verme ―Amiga, él te ama y si esta molesto es por no haber llegado antes, por haber permitido que Dario siguiera molestándote.

―Lo sé pero es que... de haber sabido que el muy basura quería besarme te juro que lo habría alejado en el acto, pero no tuve tiempo ni siquiera de reaccionar...