Keep me safely | Larry Stylinson

Capítulo 20

Harry

—¿Y cómo era yo antes?

Luego de unos minutos en silencio, Louis habla con voz rasposa. Me mira y luego se mueve, poniendo su cabeza sobre mi pecho y pasando una mano sobre mi estómago. En la habitación reina la paz y el amor. No hay más nada que nosotros. No hay pensamientos malos ni mentiras, sólo cariño.

—Hermoso, como ahora. Bueno, en realidad en este momento estás más lindo que nunca— le doy un breve beso en su pelo y él se ríe suavemente.

—En serio idiota, ya sabes a lo que me refiero.

—Eras una pequeña mierda. No podías dejar de ser un maldito todo el tiempo. Yo creo que hasta cuando dormías soñabas con molestar a la gente.

—No te creo, ¿tan así?— mientras habla traza círculos alrededor de mi ombligo con su dedo índice, lento y suave.

—Si... Pero me encantabas, no sé por qué. Yo odiaba y odio el futbol, pero las veces que te vi jugar fue increíble. Corrías detrás de la pelota sin parar, parecías hipnotizado. No existía nadie, sólo tú y la cosa redonda. Eras el capitán y todos en el equipo te amaban.

—Wow, no me extraña que sea mi deporte favorito... Me encantaría poder jugar algún día— levanta su cabeza y me mira con una sonrisa triste.

—Vas a caminar y jugar, ya te lo he dicho. Y tengo fe de que lo harás muy pronto.

—Es que no logro entender como pasaron tantos años y los avances fueron pocos... No es posible que en unos meses logre caminar.

—Todo es posible si te lo propones. No es cuestión de tiempo, es de las ganas que tienes de hacerlo. Antes eras un simple paciente y te trataban como un número. Ahora tu doctor te quiere mucho y te ayudará a que seas feliz.

Louis levanta su cuerpo y se mueve hacia mí, subiendo a mi pecho. Abro mis piernas y pongo las suyas en medio de las mías. Nuestros pies no se tocan, él es muy pequeño. Es cada segundo un poco más perfecto. Me sonríe y me da un corto beso en mis labios.

—Deja de repetir que me harás feliz— dice sonriendo mientras mira mis labios. Lo abrazo por la espalda y le doy un beso en la frente.

—¿Por qué? Quiero que lo sepas.

—Pero ya lo sé y te creo. En este momento soy feliz. Nunca fui tan feliz.

—Y te haré más feliz todavía— subo mis manos hacia su rostro y uno nuestras bocas. Responde gustoso y nuestro beso es lento. Lo corta y habla.

—Si alguien nos escuchara hablar vomitaría arco iris— ambos nos reímos, rueda sobre mí y se recuesta a mi lado.

—Estaba cómodo, ahora tengo frío.

—Perdón, pero debería irme. Liam debe pensar que morí en el camino o algo por el estilo— se sienta y mira la ropa que hay sobre el suelo. —Alcánzame mi ropa.

—No.

—Estoy desnudo, no voy a salir de la cama así.

—¿Por qué?— pregunto riéndome. Tomo la sábana que lo cubre y comienzo a tirar de ella. La agarra con fuerza y se tapa, poniendo cara de enojo.

—Basta Harry, me da vergüenza.

—¿Vergüenza? Me chupaste la pija pero te da vergüenza salir de la cama desnudo... Eres raro— tira de la sábana fuerte y destapa mi cuerpo. Sonrío y me observa de arriba a abajo. —¿Qué?