Capítulo 32

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(Pov Rose)

-Hola mamá- dijo con una alegre sonrisa desde la otra esquina de la habitación, antes de dar un trago a la taza con chocolate

Bueno, definitivamente esto no era nada de lo que esperaba, nadie espera conocer a sus hijos antes de que nazcan, eso seguro, incluso en un mundo tan loco como en el que yo vivo, diría que es imposible pero aquí estaba la prueba.

-Te estas tomando esto con demasiada calma- dijo la niña, mi hija, después de dejar la taza sobre el piso aun con una sonrisa juguetona en los labios - Normalmente sueles ser terriblemente paranoica con cualquier cosa que nos involucre a mí y a mis hermanos- ¿Hermanos? ¿De verdad había dicho hermanos?

-Si mamá- dijo con una pequeña risa - dije hermanos, en plural, con "S" y arroba para los dos géneros, si eso quieres-

-¿Por qué necesitas hablar conmigo?- pregunte cautelosa aun tratando de adaptarme a la idea de que estaba viendo a mi hija incluso antes de que ella naciera, a la idea de que tendría más hijos aparte de los que ya venían en camino y que mi hija parecía ser capaz de leer la mente, si alguien me hubiera dicho esto hace dos años apostaría a que le hubiera dado un puñetazo con el que hubiera visto las estrellas.

-No leo la mente, mamá, pero era bastante obvio por la cara que pusiste y sé que existe otro niño sangre pura aparte de mis hermanos y yo, solo que tú nunca nos dejaste acercarnos a él dijiste que era peligroso- dice con una triste sonrisa ladeada pero la chispa de diversión en sus ojos jamás desaparece.

-Si nunca los deje acercarse a él, entonces como sabes de él- dije tratando de evitar a toda costa mencionar el nombre de Declan

- Bueno, de donde vengo tú dices que no se sabe realmente el alcance de nuestras.... Uhm ¿Cómo decirlo?- pregunto jugando con sus manos – capacidades por así decirlo, tú dices que cuando necesitemos hacer algo sabremos hacerlo y bueno dentro de esas capacidades esta detectar a los que sean como nosotros, no necesitamos verlos, es como un conteo interno que nos dice cuántos de nosotros hay

-¿Y sus capacidades también les dicen si es un chico o una chica?- pregunte confundida por cómo funcionaban sus... ¿habilidades?

-¡oh no! Eso se te escapo a ti cuando te pregunte sobre ello- dijo con la sonrisa traviesa regresando a su rostro, que de alguna forma la hizo parecerse increíblemente a su padre

-Claro, no me dijiste tu nombre- dije recordando las veces en las que yo y Dimitri nos habíamos puesto a discutir sobre nombres a pesar de que aun faltaran algunos meses y quería saber si al final yo había ganado en algún nombre.

- No se supone que deba decirte muchas cosas porque puedo afectar al futuro- respondió con una pequeña sonrisa torcida para después sentarse frente a mí con las piernas cruzadas imitándome.

-¿Cuántos años tienes en realidad?-pregunte- No hablas como si tuvieras cinco años-

- Eso sí puedo decírtelo- dijo riendo- La verdad es que en realidad no los tengo, en mi mundo tengo cerca de dieciséis años pero era más fácil tomar esta forma en este mundo así no requiere tanta magia

-¿Entonces no luces así realmente?- pregunte confundida por todos las cosas que la magia involucraba

- No exactamente, esta soy yo cuando tenía cinco pero como ya te dije ya no tengo cinco, así que opte por tener esta forma porque involucra menos magia a la hora de viajar, es un tanto extraño la verdad no entiendo realmente lo que paso, sé que ocupaba un ancla de este lado y otra de dónde vengo, mi ancla aquí eres tú y mi ancla del otro lado son mis hermanos-

- La magia es extraña- digo mucho más confundida que antes

-Lose, pero no tengo mucho tiempo, resulta que hay algunas reglas en el tiempo a las que no puedo arriesgarme a que se cumplan- dijo mientras sacaba un pequeño reloj plateado de no sé dónde – ok tengo 5minutos- aviso volviendo a meterlo en alguna parte de su ropa- lo primero por lo que vine fue porque hay una profecía sobre nosotros, yo y mis hermanos bueno por tu cara creo que ya sabes de ella eso puede ahorrarnos tiempo

-Si crees que sé de qué se trata esta profecía estás equivocada, solo sé que hay una profecía pero no creí que te involucrara a ti o a tus hermanos, Lissa dijo que involucraba a un solo bebé y como ustedes son gemelos no creí...- no termine de hablar porque justo en el momento en el que dije el nombre de Lissa un gruñido escapa de sus labios

- Tienes que alejarte de ella- dijo en un gruñido y con tono autoritario como si fuera una niña a la que necesitaban tener vigilada

-¡Ey! no me hables así, yo soy la adulta aquí- dije tratando de levantarme pero la presión en mis hombros evito que pudiera moverme

-No te levantes o romperás la conexión y todo esto habrá valido para nada- no podía creer que una niña de cinco años estaba regañándome y dando me ordenes por no decir que esa niña era mi hija, ¿desde cuando los hijos regañan a sus padres?

-Tienes que alejarte de Vasilisa- dijo aun con ira en sus ojos podría no estar gruñendo pero ella seguía terriblemente enojada

-¿Por qué estás tan enojada con Lissa?- pregunte sin entender la razón de su ira- ella está tratando de protegernos, gracias a ella llegamos a Baia sin que se levantaran sospechas y sin que nos siguieran

-¡Si, claro!- grita tirando los brazos al aire- Ella nos mantendrá a salvo hasta que empiecen los ataques y luego se dará cuenta de que ocupa hacer algo para acabar a los Strigoi y querrá usarnos a mí y a mis hermanos y a cualquiera que sea como nosotros-

-Espera ¿eso es lo que hizo? ¿Usarlos? Ella no lo haría-digo en un susurro totalmente aterrada, ella no lo haría, no sería capaz, no usaría niños, por eso había retirado la ley de edad para proteger niños de ser asesinados

-¡Oh! ¿En serio lo crees?- dijo, viéndome como si estuviera loca, en ese momento se escuchó un pequeño pitido de un alarma

-¡Agh! No tengo tiempo para discutir, solo aléjate de ella, adiós mamá- fue lo último que dijo antes de regresar a la esquina donde estaba su taza y desaparecer

Definitivamente esto no iba a ser una vida fácil

Vampire Academy: esto aun no ha acabadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora