Santi Corrió a los brazos de Bárbara.
Bárbara: mi príncipe hermoso, como estás? Ahhh te he extrañado mucho mi vida.
Eduardo: porque no contestas a mis llamadas?
Bárbara: no quería hablar contigo.
Eduardo: que te pasa?
Bárbara: que me pasa? Que lo he pensado muy bien y ya no quiero seguir contigo, estoy harta de tus mentiras.
Eduardo: jamás te mentiría, estoy en proceso de divorcio, pronto seré un hombre libre.
Bárbara: no te creo, sigues amando a Fernanda, y yo sólo fui una aventura pasajera para ti, tuviste en mi lo que Fernanda ya no te daba.
Eduardo: yo te amo a ti, hace mucho deje de amarla.
Bárbara: vete! No quiero verte, ni quiero volver a saber nada de ti, nunca!
Eduardo: eres muy injusta.
Eduardo tomo a santi de la mano y con sus ojos llenos de lágrimas asintió y acepto aquella decisión.
Eduardo se fue con Santiago, Bárbara empezò a llorar desconsoladamente.
Bárbara: lo perdí!,lo perdì para siempre!!
Eduardo llevó de regreso a la hacienda a Santi y se fue a su hotel, estaba desconcertado, no entendía porque Bárbara le había dicho eso, sabía que ella lo amaba, pero no entendía el porqué de su desconfianza.
Durante la siguiente semana Bárbara y Eduardo no volvieron a Cruzarse en Lactos, cada uno estaba a cargo de sus respectivos trabajos, Bárbara continuaba con los malestares por su embarazo, trataba de que eso no afectara su desempeño en el trabajo, y que nadie se diera cuenta, al mismo tiempo Antonio se encargaba de buscarle un lugar para vivir en San Pedro.
Una Tarde a Sebastian se le ocurrió la brillante idea de visitar a Bárbara en Lactos para invitarla a cenar.
Sebastian: anda, ven conmigo, te prometo que no tardaremos, tu elijes el restaurante, estoy dispuesto a seguir tus caprichos.
Bárbara:estas seguro?, puedo ser algo exigente.
Sebastian: tu nada más ordena.
Bárbara: bien, pero tendrás que esperarme unos minutos mientras termino estos pendientes.
Sebastian: esta bien.
Eduardo: Florecita, la señora Bárbara esta en su oficina?
Flor: si, Eduardo, pero está ocupada, vino un señor y llevan un buen rato adentro.
Eduardo: un cliente?
Flor: no lo creo, nunca lo había visto, quieres que le deje algún recado?
Eduardo: no, gracias, yo mismo hablo con ella.
Mientras Bárbara terminaba su trabaja, Sebastian no paraba de hablare y hacerle chistes.
Bárbara: de verdad que eres muy divertido.
Sebastian: te ves tan hermosa cuando sonríes.
Bárbara: por que me miras así?
Sebastian: es que te imagino en unos meses, cuando ya tengas tu pancita
Bárbara: si! Ya no podré caminar.
Sebastian: pero te verás igual de preciosa.
Sebastian se acercó a Bárbara...
Sebastian: sé que ahora tu prioridad son tus hijos, pero quiero que sepas que estoy dispuesto a esperar el tiempo que sea necesario por ti.
Bárbara: quiero que nuestra amistad perduré muchos años, no esperes que mis sentimientos cambien.
Sebastian: jamás perderé las esperanzas.
Bárbara: eres muy noble, te quiero mucho.
Sebastian: y yo te amo.
Sebastian besó a Bárbara, ella no opuso resistencia, Eduardo entró sin tocar la puerta.
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MAÑANA ES PARA SIEMPRE II, El regreso de Bárbara.
RomanceCuando una mujer tiene el corazón de piedra es porque este se endureció a causa de mucho sufrimiento en su pasado, así pasó con Rebeca Sánchez que bajo el nombre de "Bárbara Greco" lastimó a muchas personas por encargo de una tercera; pero esa venga...