Capitulo 99

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Seguro me echaste de menos, y como no, si siempre fui tu perro fiel, hice cuanto me pediste y que gane? Un viaje a la cárcel, si antes no pude hacerte pagar por tus acciones en mi contra ahora si.

Bárbara: eres un imbécil!!

Lucio:  mi señora Bárbara, ahora este pedazo de inepto te tiene en sus manos y me vas a pagar una a una todas las que me has hecho.

Lucio se acercó a ella con una navaja en la mano tratando de asustarla, Bárbara trato de no demostrarle miedo.

Bárbara: y que vas a hacer? Me vas a matar?

Lucio: la muerte no seria tu mejor castigo, vas a sufrir las humillaciones que yo padecí, te veré rogándome de rodillas.

Bárbara: primero muerta, que arrodillarme ante ti.

Lucio: ya lo veremos, y señora Fernanda disculpe por haberla traído pero no hubo de otra no podía dejar testigos.

Fernanda: Lucio, déjanos ir, prometemos no decirle a nadie, ni a la policía, esto será un secreto entre nosotros.

Lucio: lo siento señora Fernanda pero no puedo complacerla, mi señora Bárbara va a pagar todo lo que ha hecho.

Bárbara: dime que vas a a hacer?

Lucio: siempre te tuve ganas, fuiste de visita conyugal con Damián cuando estaba en la cárcel y a mi ni cariñitos me hiciste.

Fernanda: Tu hiciste eso Bárbara?

Bárbara:  Cuando Damian secuestro a Aurora fui a verlo, no para lo que sé que estás pensando, sólo quería negociar y recuperar a mi hija.

Fernanda: en ese entonces todos pensaban que tu la habías secuestrado.

Bárbara: pero estaban en un error, hice lo que pude por recuperarla.

Lucio: no me digas que tienes instinto maternal? Tu no quieres a nadie.

Bárbara: tu que sabes.

Lucio: lo único que sé, es que eres el ser más perverso que he conocido en mi vida.

Fernanda: te repito, déjanos  ir.

Lucio: no! Hasta que acabe con ella.

Bárbara: si eso es lo que quieres, suelta a Fernanda ella no tiene que ver en esto.

Fernanda vio a Bárbara muy extrañada.

Lucio: No Bárbara, las dos se quedarán aquí, encerradas, es hora de dormir, buenas noches.

Lucio les apagó la luz, Bárbara y Fernanda seguían amarradas y aunque Bárbara trataba de ser fuerte una lágrima se escapó de sus ojos de tan sólo pensar en sus dos pequeños hijos.

Fernanda: porqué le pediste a Lucio que me dejara en libertad?

Bárbara: porque tu no tienes nada que ver en esto, no te odio Fernanda ni deseo lo peor para ti,  si tu papá se entera le puede hacer mucho daño.

Fernanda: lo que más quiero es que se recupere del infarto, quisiera estar con él.

Bárbara: entonces trata de escapar.

Fernanda: y dejarte aquí sola?

Bárbara: yo sabré salir de esta, necesitas estar con tu papá.

Fernanda: y tu con tus hijos, están muy pequeños y te necesitan y Eduardo también.

Bárbara: hace unas horas me aseguraste que él no me amaba.

Fernanda: lo dije por rabia y celos.

Bárbara: Perdóname Fernanda por haberme metido en tu matrimonio con Eduardo.

Fernanda:si yo no lo hubiera dejado de lado no se habría fijado en ti, lo perdí por tonta.

Bárbara: no digas eso, el destino se empeño en separarlos, me imagino que después de todo no era tu verdadero amor.

Era Extraño, pero Bárbara y Fernanda parecía hablar como si tuvieran una relación cordial, el secuestro las había acercado un poco y no podían atacarse por que para salir vivas debían unir fuerzas.

La noche fue bastante larga, lograron conciliar el sueño a pesar del horrendo lugar donde estaban.

A la mañana siguiente La policía estaba en su búsqueda, su secuestro era noticia nacional, Eduardo estaba  desesperado, temía lo peor, antes de salir a buscar se despidió de sus hijos que dormirán en sus respectivas cunas.

Eduardo: los amo, lucharé por traer de nuevo a su mamá con nosotros.

Antonio: ya la policía nos espera Eduardo.

Eduardo: beso a sus hijos y se fue, Aurora quedo a cargo de los bebés en la casa a espera de noticias de su mamá, Santiago también acompaño a Eduardo y Antonio.

Bárbara y Fernanda despertaron...

Bárbara: me duele todo.

Fernanda: a mi también, tu crees que Lucio se atreva a regresar?

Bárbara:  seguro no tarda...

Lucio: buenos días, ni modo de preguntarles como durmieron por que seguro no muy bien, les traje algo de comer.

Bárbara tiro con los pies que seguían atados el desayuno, Lucio la levanto.

Lucio: Mira Bárbara trate de llevar todo por las buena y si no se puede ni modo, ahora me vas a conocer.

Lucio tenia toda la intensión de abusar de Bárbara  cuando uno de sus cómplices llego a decirle que el secuestro era noticia en el país y ofrecían una recompensa enorme a quien diera con el paradero de Bárbara y Fernanda.

Lucio: esto podría ser un gran negocio, pero antes de regresarte Bárbara vas a ser mía, muchachos llévense a Fernanda mientras Bárbara y yo la pasamos bien.

Fernanda:que le vas a hacer?

Lucio: nada malo, te aseguro que ella la va a pasar muy bien.

Los hombres se llevaron a Fernanda, Bárbara estaba aterrorizada, la mirada de Lucio era escalofriante, quería abusar de ella, la desato y se lanzó sobre ella.

Bárbara: suéltame asqueroso.

Lucio: esto te va gustar.

MAÑANA ES PARA SIEMPRE II, El regreso de Bárbara.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora