LOU | Larry Stylinson

Capítulo 10

¿Algún día diría otra cosa qué no sea "Lou"?

Eso se preguntaba todos los días.

A pesar de que quizá... ahora le gustaba un poco decir sólo Lou, porque sólo así podía referirse a Louis y eso le encantaba. Parecía un tonto por pensar tanto en Louis pero era la única persona que sólo le daba igual que él dijera sólo Lou. Le hablaba como si fuera lo más normal cuando algunas personas se fijan tanto en aquél "defecto".

Sin embargo Louis a veces quería ayudarlo. Quería que él dijera "amor". Preferiría que su segunda palabra sea Louis. Sólo debía agregarle la "I" y "S". Y desde la última vez que se vio con Louis, lo único que hacia era practicar para decir "Louis". Le encantaría ver la reacción del castaño cuando lo aprendiera si es que lo hacía.

No sabía cuándo volvería a ver a Louis porque la última vez fue cuando fueron a la cafetería. Hace tres días, y luego él dijo que iba a llamar.

O algo así.

Harry entendió. Pero no podía dejar de pensar en Louis y se le hacía algo molesto y a la vez lindo. Como Harry era una persona de pocas palabras, literalmente, a veces se quedaba pensando demasiado.

Pensaba en Louis, y sin querer se le podía formar una pequeña sonrisa. Podía ser descubierto fácilmente por su papá y mamá.

Como ahora.

—¿Por qué sonríes? —preguntó su mamá—. ¿Eh, cariño? ¿Estás de humor hoy?

Él se encontraba comiendo una torta de chocolate en el sofá. Y su papá a su lado leyendo el periódico, y volteó a mirarlo algo curioso.

Anne estaba acomodando algunas cosas en un mueble. Y justamente se fijó en Harry que había sonreído. ¿Podía sonreír en paz? Creo que no. Pensar en Louis iba a hacer un delito en cualquier momento de la vida.

Negó con la cabeza y comió una pedazo de su torta de chocolate.

—Ay... el niño tiene sus propios secretos —dice Anne y sonrió divertida.

—Parece que sí, Anne.

—¿Puedo adivinar por qué sonríes de esa manera, Harry? —preguntó su mamá.

Harry la miró y sin dudar, negó con la cabeza.

Ella frunció el ceño y lo miró con suspicacia.

—Eres malo.

Des se inclinó a su oído y le musitó:

—Yo sé por quién sonríes.

Harry alejó su oído de él y lo miró con los ojos más abiertos de lo normal. Quería decirle que se callara pero lo único que salió fue:

—Lou.

—Sí. En él —dice su papá divertido.

Negó con la cabeza porque no quiso decir eso pero como era lo único que decía. Era frustrante.

Así que lo ignoró y se levantó para ir a su habitación.

—¡Oh vamos, Harry! No te enojes. Ven —llamó su papá y rió—. ¿Harry? ¡Ven, hijo!

No iba a bajar nuevamente. No. Sus padres eran algo pesados y no quería estar allí.

Y su cumpleaños estaba muy cerca y no quería imaginar los regalos que tendría de parte de ellos. Es probable que su mamá le regale otro par de calzoncillos.

Su mejor regalo sería... definitivamente estar con Louis. No de estar amorosamente... sólo le gustaría estar a su lado porque Louis le hacía reír a veces con su torpeza.