Capítulo 16: Pedro

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Van: Ahora sí Pedro. Ha llegado tu turno. ¿Cuál será tu prueba? ¿Abrazar ositos de peluche?

Andrea: Cállate Van. Dios tenga en su gloria a Claudio. Era una buena persona.

Van: Ojalá que Pedro asesine a Ian para yo poder asesinarte a ti. Estúpida religiosa.

Andrea: No te metas con mi religión.

Ian: Claudio no merecía morir, nadie, pero ahora sólo quedamos tú y yo Andrea. Te deseo suerte en lo que Pedro ponga, la verdad me caes muy bien y no quiero que mueras.

Van: Te estás tardando Pedro. ¿Cuál es tu prueba?

Pedro: Ninguna Van.

Van: Ay, no me hagas reír. No creo que quieras quedarte aquí encerrado para siempre. ¿O sí?

Pedro: Siempre fuiste una persona despreciable Van. Te odio desde que no me dejaste ser feliz con Aly. Por lo menos me alegro de que ya me haya superado.

Van: Okey. Okey, pon la prueba de una maldita vez. Quiero ir al infierno y que el diablo se robe mi alma. Yo lo seré y todos me obedecerán.

Pedro: El diablo siempre toma el alma más maligna que pueda haber para representarse.

Van: Pues yo lo soy Pedro. Yo seré el diablo. Ahora pon la maldita prueba de una vez Pedro.

Pedro: Me temo que no lo haré.

Van: No puedes quedarte encerrado en este lugar para siempre Pedro.

Pedro: Y no lo haré Van, yo puedo ir al infierno y venir aquí cuantas veces quiera.

Van: ¿Qué estás diciendo estúpido?

Pedro: Ah, ¿recuerdas cuando asesiné a Dilvis? Eso cuenta como para que mi alma no estuviera vagando en pena, lo hice sufrir.

Van: Pero te añadieron al grupo y tu alma volvió a vagar en pena, así como la mía.

Pedro: Oh no. Asesiné a Dilvis antes de que este grupo se creara, por eso pude matarlo sin complicaciones, y así llegué al infierno. Ahí hice un pacto con el diablo para poder regresar al grupo y añadirte a ti, para poder hacerte pagar por todo. No creerás lo que me dijo. Eso convierte todas tus maldades en las mías. Lo que me hace una peor persona que tú. Porque tengo más poder.

Van: No puedes hablar en serio. Tienes que dejarme salir.

Pedro: Me temo que serás la única persona encerrada en este lugar, y para siempre.

Van: Mataré a alguien.

Pedro: No puedes, no es tu turno, es el mío.

Van: Pero tú ya asesinaste.

Pedro: Pero sigo aquí y hasta que no asesine, no seguirás tú. Podré irme al infierno si quiero Van, pero no puedes pasar por mí.

Van: Añadiré a más gente. A los muertos de nuevo y así todos volverán a estar aquí.

Pedro: Lo siento, no eres administradora del grupo.

Van: Crearé otro grupo.

Pedro: Esto no te permite estar en dos grupos a la vez. Van. Ya no tienes salida.

Andrea: ¿Y nosotros cuándo salimos Pedro?

Pedro: Mira Andrea, odio tu maldita religión y tus estúpidos rezos a Dios, pero no se preocupen. Tú e Ian han ganado este juego, yo también. Van es la única que lo ha perdido todo.

Ian: Esto es fantástico, al fin me siento libre, gané, burlé a la muerte. ¿En verdad Pedro? ¿Todo acabó? ¿Ya no más maldad?

Andrea: No me gusto lo que dijiste Pedro. Pero muchas gracias por todo. Gracias a Dios estamos a salvo.

Pedro: No digas eso. Gracias a mí están a salvo.

Ian: Así, sufre Van. Sufre maldita perra.

Van: ¡Cállense idiotas! Se van a morir algún día.

Pedro: Andrea, Ian. Felicidades, ahora sí pueden disfrutar de la vida.

Pedro eliminó a Andrea.

Pedro eliminó a Ian.

Pedro: Ay Van. Sólo quedamos tú y yo, como la primera vez en aquél otro grupo. ¿Recuerdas? La diferencia ahora, es que yo tengo el poder sobre ti.

Van: Explícamelo todo.

Pedro: Mi estadía en el infierno se basó en hacer pactos con el diablo, sabes que para poder hacer uno tienes que pasar por mucho sufrimiento. Hice pacto para regresar aquí, para asesinar a mis padres y que las almas de los chicos asesinados descansaran en paz. Hice pacto para hacerte pagar por todo Van y eso me convirtió en un ser demasiado malvado pero que puede cubrirlo a la perfección, cosa que el diablo también sabe hacer.

Van: Ya puedes largarte, acepto que ya eres peor que yo pero lárgate de una vez maldito. Vete a seguir haciendo pactos con el diablo.

Pedro: Eso quisiera Van, pero yo ya no puedo seguir haciendo pactos con el diablo.

Van: ¿Por qué no?

Pedro: Porque yo... Soy el diablo.

Fin.

La Venganza Del Grupo (#2EGM) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora