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Capítulo 35: "¡QUÉ TE CALLES!"

Siento que nadie lee las notas que dejo al final. Así que la pondré acá arriba.

Voten y comenten, en serio me gustaría leer mas comentarios, que comentaran cualquier cosa me haría super feliz, también si les gusta la historia compartanla con sus amigas.

Cuenta la leyenda que cada vez que no votas ni comentas un libro es quemado.

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Ahora si, disfruta de este capítulo.

Capítulo 35.

No he querido hablar con nadie, tampoco he salido de la habitación en lo que lleva del fin de semana. La comida llega a mi puerta, pero ahí se queda hasta que alguien venga por ella.

Kyle a tomado el sofá de la sala como suyo, y le agradezco eso, pero igual lo odio.

Las pocas veces que he salido de la habitación él baja su mirada o simplemente se va del lugar.

¡Yo no estoy loca!
Me he repetido eso cada segundo que pasa, pero cada vez me lo creo menos.

La mayoría del tiempo lloro, y no se porque demonios. Me siento sola, pero lo irónico aquí es que yo alejo a las personas.

Domingo en la noche y ya estoy harta de estar aquí encerrada. Tomo un baño rápido y me visto con lo primero que encuentro. Me amarro el cabello en una coleta y salgo al pasillo.

Me detengo en seco al oír la voz de Alex.

Me asomo lo mas discreto que puedo. Y ahí está ella con su poca ropa y cabello perfecto sobre Kyle en el sofá.

Siento ira y un gran nudo en mi garganta cuando se sienta a horcajadas sobre él y lo besa con pasión. Espero y espero a que él la aparte pero... eso nunca llega.

Me miro, me veo horrible con mi camiseta enorme y mis vaqueros gastados. Giro sobre mis talones y entro rápido a la habitación.

Me tiro en la cama y me repito que si llego a derramar una jodida lagrima me apuñalaré con mi lápiz de ojos.

Mi maleta descansa en el suelo abierta y con la ropa derramada por los lados. No caeré en depresión por ese imbécil.

Me levanto de un salto y me desvisto rápido. En mi ropa interior me arrodillo junto a la maleta y busco lo mas sexy que encuentre.

Encuentro una falda alta de paletones negra que me queda bastante corta y un croptop color vino que resalta mis pechos, pinto mis labios a juego y me pongo un poco de rimel.

Salgo al pasillo tambaleándome en mis tacones. No sé porqué demonios hago esto.

Mis manos se calientan, culpo a la ira que brota de mi al llegar al salón.

Me aclaro la garganta. Y ellos se separan un poco.

- Voy a salir. - evito mirarlo a los ojos.

- Me importa una mierda. - espeta molesto. Tal vez porqué interrumpí su sección de besos con lengua.
Vuelve a besar a Alex. Miro hacia otro lado.

Se hace un nudo en mi garganta.
¿Qué le pasa? Él no es así! Me importa una mierda Kyle en este momento.

Alex me mira y me da una sonrisa. Ya tiene lo que quería. Mantengo su mirada y lo único que reflejan sus ojos son mentiras, engaños y traiciones, no entiendo como pueden confiar en ella.

Me quedo de pie como estúpida, sin saber que hacer ni a donde ir, ni siquiera conozco esta ciudad, joder.

- ¿Necesitas algo? - pregunta Kyle aún molesto. - ¿O te quedarás ahí toda la noche mirándonos como idiota?
Lo miro mal, hay algo muy extraño en él.