No Quiero Perderte ☆GONUH☆ TERMINADA

26_Día difícil

~narra Luh~

Voy a la máquina expendedora y saco unos dulces. Esto me animará un poco.

Me devuelvo a paso lento, la verdad no tengo muchas ganas de volver a la habitación y ver a mi mejor amigo tan mal.

--Te invito un café-- dice Sara, deteniéndome en la puerta.

--No quiero ahora, pero gracias-- respondo cabizbajo.

--¿Crees que te voy a dejar así de deprimido? Ven, que en realidad la comida de los hospitales no es tan mala-- ella me toma del brazo y me jala hacia la cafetería.

Me siento en una de las mesas mientras Sara compra dos tazas de café con leche.

En la espera, me distraigo viendo el sol por la ventana. La luz de éste ilumina las hermosas calles del lugar, es una bella ciudad en la que vive esta spidercerdo.

--Es un día perfecto para estar ahí afuera-- menciono en cuanto Sara se sienta frente a mí.

--Deberías dejar de pensar en ese tipo de cosas, te hacen daño y lo sabes-- dice con seriedad.

--Solo trato de animarme viendo lo unico bueno de este día-- digo con tristeza, y al parecer esto le molesta a mi compañera.

--Tío, hasta a mí me pones mal-- rueda los ojos con amargura-- ¿Por qué no haces lo mismo que yo? Dejar que todo fluya como debería y tener esperanza en que el Gonis estará bien-- dice para luego tomar un sorbo de su bebida.

--Es que sé que no estará bien, nunca más estará como antes-- digo con frustación.

--Eres muy negativo.

--Y tú demasiado positiva. Entiende de una vez lo que pasa, Gona no se pondrá bien.

Me cruzo de brazos y desvío la mirada hacia la ventana. Realmente no tengo ganas de hablar de esto.

Estoy consciente que lo que ella quiere es hacerme sentir mejor, pero hablar de este tema es muy difícil, pues las ganas de llorar vuelven.

--Luh, sabes que te quiero. ¿Verdad?-- dice Sara, con voz decaída.

--Sí... lo sé.

--Entonces deberías comprender que lo que quiero es que te sientas mejor, y lo único que puedo hacer es traerte a tomar un café y hablar, pero tú no cooperas en nada.

--Perdón, es que no puedo más-- digo bajando la cabeza para ocultar mis ojos húmedos.

--Quieres mucho a Gona. ¿No es así?-- pregunta mirandome fijamente.

--Mucho-- respondo con voz quebrada.

--Y por eso te sientes así de mal. Pero entiende que cuando él despierte, no podemos mostrarle nuestra tristeza, lo haremos sentir peor... Además recuerda que vamos a ocultarle lo de la carta. ¿Crees que no se dará cuenta de que algo anda mal si tú te preocupas de ese modo?

Yo asiento, en realidad tiene la razón, como siempre.

--Yo también me siento mal al ver a Gona así, odio esto y odio que no podamos hacer nada al respecto.

Mientras habla, noto como sus ojos se llenan de lágrimas. Debo detenerla antes de que se ponga a llorar.

--Sara. ¿Por qué mejor no vamos a dar una vuelta por el hospital? Creo que vendría bien-- propongo sin ganas.

--¿Y ver a los enfermos? No creo que sea lo mejor en este momento-- rie con ironía.

--Lo digo por si querias ver alguna enfermera que te guste y eso, ya sabes-- la miro con una sonrisa un poco fingida.