Capítulo 19: "En las nubes"

39.6K 1.5K 120
                                    

Capítulo 19: “En las nubes”

-Entonces… ¿me estás diciendo que me has raptado?


-Puede decirse que sí, pero no en contra de tu voluntad. Sólo te lo he ocultado porque quería que fuera una grata sorpresa- sonrió feliz-. Todo tiene una explicación-concluyó acariciando de nuevo mi muslo.


Ese sencillo gesto encendía todos mis sentidos; y hacía surgir una llama interior de amor y deseo que sólo aparecía cuando su piel se ponía en contacto con la mía.


-¿Sí? y… ¿cuál es si puede saberse?- le pregunté divertida, intentando ignorar los pensamientos escandalosos que me provocaba el roce de su mano contra la parte superior de mi pierna.


-He raptado a mi esposa, que resulta ser además la mujer de vida. Así que creo que tengo derecho a hacerlo-admitió sin dejar de acariciarme.


-¿Por qué te fuiste anoche con Alexia y me dejaste sola en la fiesta?- gruñí, retirando su mano de mi muslo. No sólo lo hice porque estaba molesta, sino porque sus caricias me perdían y no sabía de lo que era capaz de hacer. El autocontrol no existía cuando Lysander estaba cerca.


Seguía realmente enfadada con él, o más bien dolida. A pesar de lo atento que había sido conmigo y de la sorpresa que me había dado al llevarme de Luna de miel, tenía que admitir que para pasar un buen fin de semana necesitaba aclarar varias cosas, incluido lo de la nota.


-¿Tan celosa te pusiste? Me encanta verte así…en ese estado demuestras cuánto me amas- me dijo llevando sus dedos a mi nariz y la tocó de forma juguetona y añadió unas palabras-. Pero eso también tiene una explicación. Alexia me estaba ayudando a organizar la Luna de miel, el supuesto empresario con el que me tenía que reunir no era más que el organizador de esta escapada romántica.


¿Alexia? ¿Conspirando a mi favor? No podía ser cierto, esa mujer me odiaba, se veía tan enamorada de Lysander. Al saber que Alexia tuvo que ver en la organización de aquel viaje, me hizo pensar que tal vez algo malo podría ocurrir en esa playa. Desconfiaba de esa pelirroja totalmente.


La cabeza me daba vueltas de tanta confusión. No pude evitar que mis manos se dirigieran a mi cabeza y la presionaran para eliminar la fuerte punzada que surgió de repente. Gemí por la fuerza de la punzada que hizo que me mareara un poco.


-¿Estás bien?- preguntó Lysander con tono de preocupación.


-Sí. Sólo padezco de un fuerte dolor de cabeza, pero creo que podré sobrevivir- le sonreí con sarcasmo.


-Confío en que cuando veas la playa ese terrible dolor de cabeza desaparezca, yo pondré de mi parte para que así sea.


¿Me estaba tentando? Se me había insinuado. ¿Qué pretendía hacer en la playa para que se me quitara el dolor? No quería pensarlo, pero no tenía la capacidad suficiente de dominar mi mente y los pensamientos pecaminosos que en ella aparecían.

---

Cuando el helicóptero aterrizó en lo que parecía una pista privada, me quedé aliviada. Confiaba en los conocimientos de Lysander, pero no confiaba en mí; por un lado se encontraba mi tendencia a sufrir accidentes y por otro mi fuerte deseo hacia aquel griego. No podía estar mucho tiempo con él a solas en un sitio tan reducido como era el helicóptero, ya que su aroma y su respiración inundaban todo el interior y amenazaban con tentarme a cada segundo. Más bien no me amenazaban con tentarme, simplemente me tentaban.

Quisiera poder amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora