Capítulo 1

243K 11.5K 5.9K
                                    


Un disparo se escuchó a lo lejos.

Fumaba un cigarrillo mientras esperaba a mi padre, el cual estaba dentro de la bodega.

El salió acompañado de sus guardaespaldas, se subió a la camioneta de lado de él copiloto y yo arranque. Por el espejo retrovisor vi que nuestros guardaespaldas nos seguían en sus respectivas camionetas.

—A descansar hijo — dijo bostezando mi padre — fue mucha acción por hoy — dijo irónico.

Yo solo asentí.

Entramos por el camino de trerraceria que nos conducía a la gran mansión Riazza.

Bajamos de la camioneta y nos adentramos a nuestra "casa"

Una gran pintura hecha a mano adornaba la sala, una pintura de Tiara Riazza, mi madre.

Hijo te veo en un rato para cenar — dijo mi padre palmeando mi hombro.

—Está bien, ¿Kyan y Jilom vendrán a cenar? — pregunté.

—Al parecer si, están en busca de la pandilla que los atacó recuerda, tal vez lleguen un poco tarde — asentí.

A mis hermanos los habían atacado hace pocos días mientras iban a una de las tantas misiones, los emboscaron, afortunadamente no pasó a mayores.

Subí rápidamente a mi habitación y me recosté en mi cómoda cama.

Miraba hacia el techo.

Hace cinco años que había pasado la tragedia, esa tragedia en donde había perdido a mi adorada madre y en donde había perdido por completo mi vida, literal.

Tiara Riazza, era la mujer de mi vida, ella era lo que más quería en la vida.

Y me la arrebataron, y a mi, a mí me marcaron de por vida.

Semanas después esos malditos ya habían pagado por todo. Y no precisamente con carcel.

Unos golpes interrumpieron mis pensamientos, la puerta se abrió ligeramente y se asomó Heidy, la ama de llaves.

—Joven Elian, su padre y sus hermanos lo esperan para cenar — dijo con tono bajo.

—En un momento bajo — dije serio.

Ella asintió y cerró la puerta con cuidado.

—Ya los tenemos en la mira, al parecer se esconden en el barrio latino — decía Kyan mientras se llevaba una cucharada de pasta a la boca.

—No sé porque ustedes tienen que andar por esos barrios — dijo mi padre mirando a mis hermanos — saben que es peligroso, para eso están nuestros hombres —

—Necesitamos saber quiénes nos querían matar padre, no podemos dejarlo así como así — dijo Jilom.

—Queremos tenerlos frente a frente y matarlos con nuestras propias manos — habló Kyan.

—Yo voy con ustedes, cuenten conmigo — dije mientras tomaba un trago de cerveza

—Elian — dijo mi padre con tono acusador, yo solo me encogí de hombros.

SCARSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora