CAPITULO 4

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PRIMERO QUE NADA, una disculpa por tardar tanto en actualizar, ya estoy en clases y apenas me voy medio adaptando a esa tortura diaria y estuve sin internet.

SEGUNDO, gracias a quienes han comentado, votado, agregado a sus listas y demás, no pensé que les gustaría a tantos y eso me hace feliz. ♥

TERCERO, procurare actualizar cada fin de semana, lo más probable es que sea un fin si y uno no, dependiendo de mi carga de deberes.

Ahora si, sin más que decir por el momento...

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Al fin era viernes. Pocas veces se le había hecho tan largo pasar de jueves a viernes. Mina estaba lista, había llevado en su maleta de entrenamiento un cambio de ropa, su pijama y algunos accesorios.

Las clases, para su sorpresa, pasaron rápidamente y cuando menos acordó, ya se encontraba caminando hacia la salida, de manera lenta mientras esperaba por el mensaje o llamada de Chaeyoung.

"Te espero fuera, el chofer está por llegar. No tardes."

Leyó el mensaje apresurando el paso de manera inconsciente con forme esas palabras se formaban en la voz de su cabeza.

Tal y como dijo, en la salida se encontraba y al verla la saludo con la mano.

-¿Lista?

Asintió para seguir a la menor al interior del auto y acomodarse junto a ella en el asiento trasero.

El viaje fue Chae cantando a cada canción que ponía desde su celular a las bocinas del coche. Mina cantaba algunas partes que lograba reconocer o más bien se atrevía a cantar, su timidez funcionaba de manera extraña frente a la menor.

Cuando menos lo notó, se habían alejado del bullicio de la ciudad, se encontraban en una zona suburbana a las afueras, con casas grandes entre la arboleda y entradas extensas.

-¿Qué pasa?

Preguntó al ver la cara sin expresión de la mayor, que la miró de vuelta al escucharla.

-Nada, es solo que... Me impresionó, sabía que vivías en algún lugar especial.

-¿Especial? Para nada. Solo se ve extravagante, pero es normal.

Comentó con esa risita tan característica de ella.

Minutos después al fin llegaron a esa larga entrada que reveló al final la casa de la menor; la cual al bajar del coche, tomó de la mano a la mayor para correr al interior y no la soltó ahí, sino hasta que llegaron a la habitación de la chica.

-La casa es bastante aburrida, excepto por mi habitación.

Corrió una vez más, esta vez a lanzarse a la cama. Mina la observo sin perder esa sonrisa, tan maravillada con cada aspecto de la menor.

-Te creo. Las mejores cosas vienen en tamaños pequeños, o eso dicen por lo menos.

Chae la señaló dando la razón a sus palabras.

La anfitriona salió de la cama para tomar un par de pantuflas y entregar un par a la mayor.

-Ponte cómoda.

En lo que lo decía, se retiró los zapatos y comenzó a desabrocharse el uniforme. Antes esto Mina solo reaccionó a darse media vuelta, acuclillándose, pues usaba de excusa para no verla, para quitarse los zapatos de igual forma.

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