46. Solo es la verdad

508 52 1
                                    

"Voy caminando por un callejón muy obscuro, de pronto veo a "La Rata" comienza a gritarme que yo lo maté, que yo soy su asesina, que jamás me perdonará, que soy una chica que le gusta que maten a los demás..."

Despierto toda agitada, sudando y mi corazón a mil por hora

-Solo fue una pesadilla -me digo a mi misma -Tranquilízate Amaya, tranquilízate

Me meto a bañar y tomo un short y una blusa verde, con mis tenis verdes, mi cabello suelto y bajo a desayunar.

-Buenos días -les digo entrando al comedor

-Buenos días -contestan todos, y por todos me refiero a mi papá, Daira, Anita, Sebastián, mi mamá y Kevin

Me siento en mi silla y Anita me da un plato con mi desayuno

-Gracias Anita

-No hay de que

Todos comemos en silencio hasta que mi madre comienza a hablar
-¿Cómo te fue en la universidad hijo?, con lo que paso ya no pudiste platicar

Siento como me empiezo a enojar

-Muy bien, tengo todas las materias arriba del 90

-Ese es mi niño -le dice mi mamá muy orgullosa

-¿Y tu Amaya como vas?

-Que te importa -le digo con mucha tranquilidad -Si nunca te importo, ¿por qué ahora si?

-Siempre me has importado

-No es verdad, al menos nadie de esta habitación te creé

-Amaya -me dice mi papá- Guarda silencio

-¿Por qué? ¿por qué digo la verdad?, Se que a nadie le gusta que les digan sus verdades, pero a mi me encanta decirlas

-Amaya basta -dice mi papá más alto

-Tú eres la peor persona que eh conocido -señalo a mi mamá -¿Sabes por qué?, porque fuiste, eres y serás la peor madre y esposa del mundo -se quedan todos congelados y apunto a Kevin -Tú eres el hombre más despreciable y malagradecido que eh conocido en toda mi vida, mi padre te dió todo y tú se lo pagaste acostandote con su esposa para después casarte con ella -siguen todos congelados -Tú -apunto a mi hermano -Tú siempre fuiste el hijo deseado y yo la hija que estorbaba -volteo y miro a mi papá -Y tu papá, eres el hombre más generoso que conozco, porque aceptaste a tu ex y a su pareja en tu casa, otra persona ni siquiera le dirigiria la palabra -cuando término me doy cuenta de que estoy llorando y ya estoy parada de mi silla, comienzo a caminar y salgo de mi casa, y empiezo a correr, corro y corro. Cruzo la calle corriendo y sigo sin detenerme, hasta que ya no puedo más y choco con alguien

-¿Amaya?

Yo estoy llorando y estoy muy agotada de tanto correr como para ver quien es

-Tranquila, ven vamos, te ayudo a pararte

El chico me ayuda a ponerme de pie y me lleva hasta una banca donde cierro los ojos y comienzo a respirar, sin embargo, sigo llorando

-¿Necesitas algo?

Abro mis ojos y veo quién es y es nada más y nada menos que Seth, con su cara de angustia

-¿Me das un abrazo?

Seth me abraza sin contestar mi pregunta y duramos así un buen tiempo hasta que dejo de llorar y mis respiraciones están normales
-¿Qué te pasó? -me pregunta preocupado

-Me pelie

-¿Qué?, ¿Con quién?

-Con mi mamá y su esposo  

Dos Opciones, Una DecisiónWhere stories live. Discover now