Capítulo 26: Ambiciones

4.4K 438 151
                                    

Pov's Mabel


Nos escondimos detrás de una cascada, en una cueva húmeda. Se escuchaba el eco de las gotas de agua caer al húmedo suelo.


Marchosias se mantenía alerta, pero a la vez consternado y distante.

- No hay señales de él, creó que no nos siguió. Aun así, me gustaría que accedieran a quedarnos un momento por si aun sigue afuera- dijo Marchosias, sin dirigirnos la mirada. Veía hacia la cortina de agua, buscando alguna señal del demonio de ojos carmín.

- Claro, así tendremos tiempo de que alguien nos de explicaciones, ¿no crees, Marchosias?- dijo mi tío Ford con el ceño fruncido, cruzándose de brazos. Marchosias giró sobre sus talones, encarando a mi tío.

- No comprendo que tratas de decirme, Stanford


Ford río con amargura.

- ¿Crees que mis estudios no incluyeron clases básicas de francés, mandarín, japonés y ruso?- Marchosias torció el gesto. Parecía perder su compostura- Sé que conoces a ese maldito demonio del que acabamos de huir

- Pues es obvio que nos conozcamos, somos demonios. Es demasiado probable que nos hayamos visto alguna vez- respondió Marchosias.


- Puede ser, a menos que Marmando este mintiendo. ¿Qué significa eso de "ex amante"?



Todos vimos con sorpresa a Marchosias, quien apretó sus puños a tal grado de tornar sus nudillos blancos, algo un poco difícil de notar a causa de su pálida piel.

- No lo sé, en serio. Fuimos amigos hasta dónde yo entendía, pero deben de entender que los demonios no tienen la misma forma de comprender y expresar los sentimientos, y aún no los comprendo. Soy un demonio, eso es cierto, pero no tengo la misma naturaleza que la mayoría- Marchosias fue interrumpido por mi tío Ford, quien tenía una cara de fastidio.

- Eso ya lo sabemos. Todo eso de las naturalezas nos lo sabemos de memoria. Responde mi pregunta, demonio


Marchosias transformó su expresión a una dolida y desvió la mirada. 

- Te pido que no me recuerdes lo que soy cuando ya lo tengo en claro, Stanford. Y ya lo dije, no lo sé. No creo que el tritón esté mintiendo

- Y no lo hago, yo sólo dije lo que el demonio de ojos carmines me dijo- interrumpió Marmando, quien estaba recargado en una roca con medio cuerpo sumergido en la pequeña laguna que se formaba gracias al río.

- Probablemente hice algo, que desconozco, para haberlo hecho creer erróneamente que teníamos algo. Y seguramente, estará enloquecido de furia porque ha de pensar que sólo lo utilicé, algo que le molesta que le hagan- dijo, volviendo su mirada hacia la cortina de agua. 



Todos nos vimos entre nosotros. Ví la desconfianza en los ojos de mi tío Ford mientras veía de reojo a Marchosias, quien seguía concentrado en la cortina de agua. 


Mis tíos se mandaron una mirada cómplice, mientras que aferraban con fuerza sus armas.


- Yo si fuera ustedes, no lo haría- dijo Marmando- Él realmente los quiere proteger y no creo que mienta

Volví a dirigir mi mirada a Marchosias, quien seguía aún concentrado en su tarea de vigilancia. No puedo culparlo de traidor por el hecho de haber tenido una relación con uno de nuestros enemigos, ya que mi hermano está en esa situación y nunca nos hemos referido a él como un traidor...

•~Nada Ha Cambiado ~•~BillDip~• #PremiosGravity2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora