Tan Sólo Vecinos

Pijamada

Dos chicas, una castaña y una peliazul, se encontraban caminando por las calles de la ciudad, dirigidas solo por un papel que una llevaba en sus manos.

-¿Estas segura de que es por aquí, Hinata?-

-Si Tenten-san, según esto es por la calle de los cerezos- observaba a su alrededor.

-Bueno, esta es la calle pero, ¿cual es la casa?- preguntaba dudosa y observando los alrededores.

-Etto...- Miraba cada una de las casas y observaba el número también -Esa- señalo una.

-¿Estas segura que es esa?-

-Si, mira- le mostró el papel.

-Pues parece que si, vamos a tocar-

Tenten se acerco a la casa y dio varios golpes a la puerta, pero nadie contestaba.

-¿Que tal si mejor sonamos el timbré, Tenten-san?- Hinata miraba al botón que se encontraba junto a la puerta.

-A eso iba- la castaña hablaba nerviosa y timbro un par de veces.

Rápidamente alguien atendió, era una señora de cabellos rubios y ojos verde jade, aunque un poco mas opacos que los de Sakura.

-¿Quienes son ustedes?-

-Disculpe las molestias- Hinata se dirigía a la señora -Pero Sakura-san nos invito hoy a su casa a pasar la noche-

-Oh, por ahí hubieran empezado, pasen, pasen-

Las chicas entraron a la casa, aunque era desconocida para ambas, era muy acogedora.

-Sakura se encuentra arriba, ahora mismo le hablo-

La mujer salio de la habitación entrando mas a la casa, al poco rato regreso con dos chicas a su lado.

-Hina-chan, Tenten, que bueno que vinieron- Ino las saludo.

-Bien okasan, estaremos en mi habitación, no nos molestes- Sakura advirtió.

-Claro hija, que se diviertan-

Todas se dirigieron a la habitación de la pelirosa, era una gran habitación con paredes pintadas de rosa y una cómoda cama al centro.

-Que bonita habitación, Sakura-san- admiraba la Hyuga.

-Gracias, bueno por ahí esta el baño- señaló -pueden ponerse su pijama ahí-

Después de un rato, todas se pusieron su pijama, Ino llevaba una de un vestido verde menta que llevaba pequeños moños como decoración.

Tenten solo se puso una blusa de tirantes con un pantalón cómodo; Sakura llevaba uno bastante parecido al de Ino pero solo que era de color rosa pastel.

Y finalmente, Hinata, que traía puesto el que Neji le había regalado.

-Bien, empezamos con esto- apresuro Ino con alegría.

-¿Y que hacemos primero?- Tenten preguntaba.

-Les traje galletas y leche para que cenen- entraba la mamá de Sakura a la habitación -¡Oh! Que bonitas pijamas-

-Okasan, podrías dejarnos solas- se exaltaba la pelirosa.

La mujer salio de la habitación y las chicas empezaron a degustar los aperitivos que les había traído la señora Haruno.

-¿Que tal si jugamos verdad o reto?- propuso Ino metiendo una galleta a su boca seguida por un trago de leche.

-Que buena idea- felicitó Sakura.