Te salvaría otra vez - Evak + Chrisak (SKAM)

Cáp. 9

No dejaba de dar vueltas en la cama. Even y Chris estaban ya en casa, las heridas no habían sido muy graves, algunas costillas fracturadas, la nariz rota... En fin, parecían heridas de una pelea de barrio. Sabía que yo había provocado esa pelea, la culpa era mía, no tenía que haber hablado con Even, ¿o sí? Estaba hecho un lío.

Miraba la pantalla del móvil cada minuto con la esperanza de que alguno de los dos me dijese algo. Solo tenía mensajes de grupos y de gente morbosa preguntándome cómo estaba. La única conversación interesante que tenía era con Eva y ahora no me contestaba. Antes de irse en la ambulancia, Chris me dijo que se había vuelto a liar con Eva. Obviamente tenía que saber si eso era cierto, pero Eva me lo negaba. Según ella no tenían nada desde hacía mucho tiempo, además ella estaba con Noora, no necesitaba a Chris para nada. ¿Qué sentido tenía entonces lo que Chris me había dicho?

-Toc, toc. -Levanté la cabeza y vi a Eskild apoyado en el marco de la puerta mirándome. Sabía que estaba preocupado. 

-Pasa.

-¿Cómo estás? 

Se sentó en la cama y me miró como si fuera un perrito indefenso al que hay que proteger constantemente. Trajo consigo chocolate  y algunas chuches, estaba esperando la versión completa de lo ocurrido y yo necesitaba hablar con alguien.

-Estoy. 

Empecé a contarle todo lo que había pasado, cómo Chris se abalanzó sobre Even, cómo Even respondió, lo inútil que me sentí allí.

-¿Tú qué sientes? O sea, ¿qué te pasa con Even? ¿Le quieres? 

Qué curioso, parece que Eskild siempre da donde más duele.

-No lo sé, sé que cada vez que le veo quiero besarle y desaparecer con él, pero Chris...

-Chris es tu punto débil, lo sé.

-Chris es más que eso, él me salvó cuando nadie más fue capaz, yo no sabía lo que era el amor hasta que apareció en mi vida.

-¿Y crees que te salvaría otra vez si supiese lo que ha pasado con Even?

Agaché la cabeza y cerré los ojos. Chris ya me había perdonado una vez, además, no era tonto, sabía perfectamente que entre Even y yo había algo, por eso se había puesto hecho una fiera cuando nos vio en el baño.

-No sé, Eskild, no sé. Chris es mi novio, le quiero, quiero pasar tiempo con él y que todo vaya fluyendo, pero Even despierta cosas que Chris no es capaz de despertar. Durante mucho tiempo estuve esperando a que me mirase como yo le miraba y nunca lo hizo, se dedicaba a follarse a todas las tías que pillaba y lo hacía delante de mí sin ningún reparo. Yo le he respetado siempre pero no puedes intentar arreglar algo que ya está roto.

-Las cosas se pueden arreglar, estar roto no significa no tener solución.

-Ya, pero hay que saber arreglar, y no creo que Chris sea capaz de enmendar todo lo que hizo.

-Subestimas el poder y la inteligencia de Chris, Isak. Creo que él te quiere mucho pero no ha sabido gestionar sus emociones y te ha hecho daño, pero creo que de verdad te quiere.

-Entonces, ¿por qué me dijo que se había liado con Eva?

Seguimos con la conversación durante al menos una hora. Eskild no paraba de decirme que confiara en Chris pero yo no estaba tan seguro ya. Era muy injusto por mi parte acusar a Chris de algo que yo mismo había hecho, pero no sabía cómo actuar. Yo quería estar con Chris, quería que tuviésemos algo bonito pero las cosas que estaban pasando no ayudaban para nada...

Mi móvil empezó a sonar y lo cogí corriendo. Era un mensaje de Even.

Siento mucho lo que ha pasado hoy, ha sido culpa mía, no debí acercarme a ti. He estado todo el día buscando las palabras adecuadas para pedirte perdón pero no las he encontrado... Isak, siento algo por ti y verdaderamente creo que te mereces todo lo bueno del mundo. Cada vez que te miro se me para el tiempo y solo quiero besarte. Sé que todo ha sido muy raro y confuso, así que voy a pedirte una cosa y si no te parece bien, desapareceré de tu vida, y esta vez será de verdad. Ven al sitio donde nos vimos la primera vez y empezaremos de cero, sin nadie que nos moleste ni nos pregunte, sin Sonja y sin Chris, sin mentiras y sin arrepentimientos. Te estaré esperando allí a las 21:21, la hora en la que nos dimos nuestro primer beso, ¿lo recuerdas? Decidas lo que decidas quiero que sepas que lo que he sentido por ti ha sido lo más puro que he sentido nunca, me has hecho libre y nunca voy a olvidarlo. Tú me salvaste y yo te salvaré las veces que haga falta.

Cerré los ojos y solo recé para que la decisión que iba a tomar a continuación fuese la correcta.