Oscuros Secretos (50 días #2)

Capítulo 17.

—¡Quiero que viva! —grité molesta. —Yo también estoy harta, no entiendo que ganabas con hacer el maldito juego, maldita sea, ojalá en verdad estuvieras muerto Manuel.

Estaba tan asustada, pero en verdad necesitaba decírselo.

—¡Por Dios, Ana! El juego lo hice por diversión y por dinero, recuerda todo el dinero que me trajiste con los retos —Manuel sonrió y se acercó a mí.

Yo solo retrocedí un poco, mis corazón latía muy fuerte.

—Manuel date prisa —dijo Ariana presionando a Manuel.

—No me gusta que me presionen, Ariana —mencionó Manuel molesto. —Vamos, Ana.

No tuve opción, accedí ir con ellos, aunque tuviera mucho miedo.

Valeria rápido se acercó a Lizbeth, ella aún seguía inconsciente.

—¡Lizbeth, despierta! —exclamó Valeria moviendo a Lizbeth.

Manuel abrió la puerta, no puedo creerlo, después de todo lo que pase en el reto, él me matará.

Salimos del dormitorio, comenzamos a caminar por el largo pasillo, no sé lo que me espera.

—¡Regresemos! —gritó Henry deteniéndose en seco.

Rápido abrí mis ojos como platos, el director venía acompañado de unos policías.

Manuel me tomó de la mano y me jaló, nuevamente llegamos hasta mi dormitorio.

—¿Qué pasa? —preguntó Valeria en la habitación.

—¿Fuiste tú? preguntó Manuel molesto y se dirigió hasta Valeria.

Valeria nos miró confundida y comenzó a negar, pues no tenia idea de a lo que Manuel se refería.

—¿Que? No sé de qué estás hablando.

—¡Vienen hacia acá! —gritó Ariana cerrando la puerta de golpe.

—¡Maldita, perra! —gritó Manuel y empujó a Valeria, ella rápido cayó al suelo.

—¡Ana te juro que no sé de qué está hablando!

Caminé hasta ella y me puse frente a Manuel.

—¡Ella no hizo nada! Si ellos vienen por ti es porque ya te descubrieron maldito.

Miré a Pablo, él solo no sabía qué hacer, como siempre, él solo está del lado ganador.

—¡Abran la puerta! —gritaron desde afuera de la habitación dando unos pequeños golpes.

Estaba muy nerviosa, miré a Manuel, él estaba igual, su cara expresaba temor.

—¿Hay alguien?

—Manuel, alguien tiene que hacer algo —Carlos también estaba muy asustado.

—Ok, todos actúen normal, aquí no pasa nada fuera de lo normal —ordenó Manuel fingiendo estar tranquilo.

Ariana se dirigió a la puerta y la abrió, el director y dos policías entraron al dormitorio.

—¿Que hacen todos ustedes aquí? —preguntó el director mirándonos a todos.

—Estábamos repasando las líneas para una obra —mencionó Pablo sonriendo.

Los policías se dirigieron a mi mesita de noche, la abrieron y empezaron a buscar.

—¿Qué están haciendo? —pregunté confundida.

—Señorita, Ana, estamos haciendo una revisión, últimamente han pasado hechos muy extraños en la escuela, no se lo tome personal, solo es una revisión de rutina.