La Rosa Negra de Konoha

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Narrador yo

Uchiha Akeno saltaba de tejado en tejado, en busca de su compañera de equipo y de combate, Tsuchi Kin, la que hacía dos años y medio, se unió a Konoha gracias a Uzumaki Naruto, que la salvo de la muerte.

La azabache, iba realmente molesta. No le gustaba que la interrumpieran cuando estaba haciendo algo importante y justo cuando estaba con su esposo, había comenzado ese ataque sorpresa. Sin duda, el rival con el que se enfrentará, sería el que se llevará los puño y gran parte de su cabreo, que solo aumentaba con el paso del tiempo. Quería volver junto a Naruto, pero sabía que ese combate entre su esposo y el espadachín de negro, sería largo y complicado.

Por todos lados se podía ver enfrentamientos entre los aliados de la Godaime Hokage y los de Raíz, los que contaban con la superioridad numérica y con algún que otro gran oponente, como era el caso de ese chico llamado Xiang Yoshi que se estaba enfrentando a Uzumaki Naruto.

El sonido del metal, y hizo que la Uchiha saltara en una voltereta hacia atrás, esquivando la barra de metal que se incrusto en el tejado, dejando un gran agujero en este, para sorpresa de la chica de ojos negros.

Dicha arma, empezó a encoger hasta que solo tenía un metro de largo, cosa que sorprendió a la kunoichi.

???:espero que te guste mi arma, Uchiha.

Una mujer de cabellera salvaje de color verde, ojos verde bosque y piel bronceada, tenía la vara dando vueltas en su mano. Tenia unos pechos copa DD y vestía igual que Xiang, pero sin gabardina alguna y la camiseta de tirantes realzaban sus pechos.

La Uchiha llevo los dedos de su mano derecha a la chokuto (¿es así la espada de los ANBU?), rozando el mango de esta.

Akeno:no se quien rayos eres, pero tengo cosas que hacer, así que aparte.

La mujer sonrió salvaje, paseando su lengua por sus labios, como si frente a ella estuviera su presa.

Agarra la vara, y tras una orden está se alargó rápidamente tanto, que a la Uchiha casi no le da tiempo a apartar su cabeza de la trayectoria.

???:mi arma puede alargarse todo lo que yo desee, querida. Además, está hecha de un acero que permite transmitir chakra por esta–la vara se envolvió en rayos–. Creo que será muy divertido esto, querida. Mi nombre es Fuhuma Nanami.

Dicho esto, la mujer de cabellera verde, se lanzo contra la azabache, mientras su cara volvía a su forma normal, y le lanzaba un golpe descendente con esta; golpe que Akeno detuvo con su chokuto, levantando chispas.

Akeno:tch, eres rápida–salta hacia atrás, alejándose de su nueva rival y la que se llevará su furia–. Pero no me puedo permitir perder.

Desaparece de la vista de Nanami, que se mantiene tranquila, y el choque de aceros se vuelve a oír.

La aliada de Raíz, ha detenido el tajo de la azabache con su vara, y ahora están frente a frente, mirándose a los ojos. Los de la Uchiha se convierten en el Sharingan de tres tomoes, cosa que hace sonreír a Fuhuma Nanami.

Nanami:Sharingan, ¿eh? No eres la única, preciosa–los ojos de la mujer, toman la forma del Sharingan, con el mismo nivel de madurez–. Ahora esto, será más divertido.

Akeno soltó una maldición mientras se separaba. No se esperaba que esa chica tuviera el Sharingan, y menos que fuera de tres tomoes.

Nanami no dejo descansar a la azabache y se lanzo contra esta, con su vara envuelta en Raiton.

El choque de aceros y las chispas, se empezaron a ver por los tejados. Las dos lanzaban golpes con la intención de dañar a su rival, pero todos eran bloqueados o desviados por su rival, sin que siquiera llegará a rozar a alguna de las chicas.

Akeno estaba sorprendida. Esa chica era realmente rápida. Si no fuera por su Sharingan, ya habría recibido más de un golpe.

Akeno (pensando):tch, tal vez tenga que usar el Mangekyo. Esta chica es demasiado rápida como para tomarla a la ligera.

Volvieron a quedar frente a frente, Sharingan contra Sharingan y sus respectivas armas, besándose.

La Uchiha, empezó a hacer sellos de una mano, y empezó a hinchar el pecho.

Akeno:Katon: Jutsu Gran Bola de Fuego.

Expulsó una enorme bola hecha de fuego anaranjado, que dio de lleno a la peliverde; pero esta resultó ser un clon de Raiton y se vio obligada a girar rápidamente para bloquear el golpe de la vara imbuida en Raiton, que estaba a centímetros de darle en la cabeza.

Nanami:buenos reflejos, Uchiha. Sin duda eres una buena usuaria de esos ojos, como yo–se separó, y empezó a hacer una secuencia de sellos–. Raiton: Dragón Eléctrico.

Un dragón hechos de rayos, empezó a formarse detrás de la peliverde, para luego salir disparado hacia Akeno, que veía esto con molestia.

Una gran explosión surgió en el lugar cuando el dragón llegó a su destino, creando una gran nube de polvo y humo.

Nanami observo detenidamente el lugar de la explosión, con su vara lista para ser usada.

???:Fuuton: Bola de Aire Comprimido.

Solo le dio tiene a esquivar dos de las tres bolas de aire. La tercera, golpeo el pecho de la chica lanzándola hacia la casa que había sido destruida por el jutsu de la mujer. Esta dio una voltereta, y cayó de pie, acariciándose la zona del impacto, lo que levanto un leve rubor en el rostro de la azabache.

Nanami:no esperaba menos de la Rosa Negra de Konoha–hizo una secuencia de sellos y un pergamino apareció. Lo estiro en el suelo, y coloco la palma de la mano sobre este, invocando una segunda vara, pero esta con pinchos–. Las rosas tienen espinas, pero tú pareces no poseer esa defensa–las dos varas son envueltas en Raiton–. Es tu final.

Los ojos de Akeno se cerraron durante tres segundos, para luego abrirse y mostrar el Mangekyo Sharingan, que es igual al de su hermano Obito.

Akeno:lo mismo digo.

La hoja de la chokuto, se envuelve con fuego, pero este no era de un Katon normal, si no del Amaterasu. Las llamas negras, envuelven la hoja por completo.

Se abalanzan la una con la otra, chocando sus respectivas armas creando estallidos de fuego y rayo que parecen verse por toda la aldea.

Las dos kunoichis, una leal a Konoha y la otra leal a Raíz, lanzaban tajos que harían verse ridículos a los siete Shinobigatana.

En un descuido de la Uchiha, Fuhuma Nanami aprovecho para incrustar la barra en el pecho de la azabache; pero la sangre nunca llegó. Su cuerpo se había vuelto intangible.

Nanami:¡pero que!

Akeno aprovecha la sorpresa en su rival y con una mirada fría, atraviesa el corazón de la chica. Su cuerpo se consume en llamas negras, no dejando nada más que cenizas.

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Hasta aquí este hermoso capítulo.
Espero y os guste.

Nos vemos en el próximo capítulo 😊 ttebayo 😄

Uzumaki Naruto: El Jinchuriki PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora