Lo único que quiero son bebés

117K 8.9K 4.8K
                                    




Hola gente, éste es sólo un anuncio de... ¡No, mentira! Es un capítulo nuevo, aparte del de ayer. ¡Sorpresa! 😊

¡Espero que les guste! Y como siempre, ¡gracias por apoyar!

PD: Que el título no les haga pensar mal 😏


------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------


Luego de ver que Ethan me mintió, mi humor se fue para el suelo. Una cosa era tener la duda de sus intenciones respecto a mi casa, y otra, el hecho de que él me ocultara que hizo algo malo.

¿Por qué no pudo simplemente decime la verdad? Ah, claro. Porque sabía que lo iba a mandar al diablo.

Pero eso no justifica que me haya mentido. Entonces involuntariamente, me mantuve en silencio lo que quedó del recorrido.

—¿Qué pasa? —me preguntó al cabo de unos buenos minutos sin que emita sonido.

—Nada —contesté cortante.

Él me observó.

—Tienes esa mirada de que hice algo mal. Como me miras cuando Cindy se me acerca o cuando le hablo mal a mi papá.

No pude evitar reír por dentro. Me conocía tan bien.

Sin embargo, decirle que actuó mal sólo llevaría a que me dijera la verdad bajo presión, y eso no me serviría de nada.

—Si hiciste algo malo, deberías saberlo. ¿No lo crees? Y si no hiciste nada, no tienes por qué estar con remordimiento.

—No estoy con remordimiento, tú me miras como si debería estarlo.

Rodé los ojos.

—Sólo sigamos —ordené.

—Ya terminamos la casa, ahora nos queda el jardín trasero —explicó, guiándome de nuevo a la planta baja, hasta un enorme ventanal que permitía una maravillosa vista del exterior. Abrió las grandes puertas de vidrio y salimos.

Si el interior había sido maravilloso, el exterior no tenía definición que le hiciera justicia.

Lo adornaba una piscina que parecía de hotel de cinco estrellas. Pequeños caminos de piedra se extendían hacia una cancha de Tenis y otra de fútbol. Había flores por doquier y estatuas decorativas. Las luces apostadas en el suelo y en algunos faroles le daban un aspecto de jardín mágico. Me pregunté si sería aún más bello cuando le tocara el sol.

—Claro que tendremos que tapar la piscina —interrumpió mis pensamientos—. No queremos que los niños se caigan.

—No se caerán.

—Jackie, no podemos arriesgarnos a que les suceda algo...

—Ethan —lo detuve—. No se caerán porque no habrá ningún niño. Estuve pensándolo... y quiero bebés.

Sus ojos se abrieron con sorpresa y algo más, que me costó reconocer.

—¿Bebés? —preguntó. Lo vi tragar saliva y hasta creo que le dio escalofríos.

Asentí, con una sonrisa. —Así como oyes.

Él frunció el ceño.

—Hay muchos otros grupos que podrían necesitar ayuda.

Casa NO en venta (completa✔)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora