𝗧𝗛𝗘 𝗟𝗔𝗦𝗧 𝗦𝗨𝗠𝗠𝗘𝗥┃RIVERDALE.

O7; ❛ LIES. ❜

CAPÍTULO SIETE;
❛ MENTIRAS. ❜

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Tuvieron que esperar varios minutos a las afueras del hogar Andrews, en aquella noche de neblina. En un ambiente tenso que llegaba a dar escalofríos. Hasta que una figura esbelta se aproximó por los arbustos, sólo enseñando a Archie Andrews llegando desde entre sombras hasta enseñar su cabello como fuego que parecía una antorcha en medio de la oscuridad de la noche. El mismo que suspiró al compás del viento al reconocer aquellas tres jóvenes en las afueras de su morada.

⏤Por favor, paren ya con esta absurda cacería de brujas.⏤

No se molestó ni siquiera en dar un saludo, e intentó pasar de Betty, pero ella misma parecía muy decidida en su acción, dejando la palma de su mano sobre su pecho cálido, detuvo su huida para empezar a hablar.

⏤No es una cacería de brujas, y mucho menos, absurda. Sólo, escucha lo que tengo para decir, por favor.⏤ Archie se resignó, y se encogió de hombros, con las manos hundidas en los bolsillos de su chaqueta escolar, escuchó lo que tenía para decir. Quizás, de esa forma su amiga se daría por vencida, e iría a su hogar a descansar como una persona normal.  ⏤Entramos a su auto, y...⏤

⏤¿¡Ustedes qué!?⏤ de verdad, estaba aturdido por ese mismo comportamiento. El entrecejo se remarcó en su frente, detonando el enfado que sentía. ⏤Eso es usurpación a la privacidad.⏤

⏤Fue para bien, encontramos un arma.⏤ Veronica hizo su primera aparición en la escena.

⏤Y una licencia de conducir con el nombre de Jennifer Gibson.⏤ Betty concluyó la información de su amiga. ⏤Si mintió sobre su propio nombre, ¿en qué más lo ha hecho?⏤ provocó pequeños pasos más cerca de su amigo, ahora usando un tono más bajo para que nadie ajeno al tema de conversación pudiera oir. A pesar de que el vecindario estuviera desierto, con aquel viento fresco que te hacía querer quedar en casa durante toda la noche, junto con la noticia de un asesino suelto que sólo aumentaba ese deseo de sentir la seguridad en casa. ⏤¿Que tal si ha tenido que ver con la muerte de Jason Blossom?⏤ esa fue la gota que colmó el vaso, Archie explotó frente sus lindos ojos de océano.

⏤¡Por el amor de Dios, Betty! ¿Escuchas lo que dices? ¡Esto ha llegado demasiado lejos! ¡Deja de jugar a ser Nancy Drew, y ya superame de una vez!⏤ su grito fue tan fuerte que algunos pájaros se desbordaron de las copas de los árboles de dónde se resguardaban del frío, y tan espeluznante, que Betty tuvo que retroceder varios pasos ante esa faceta por parte de su amigo. Después de tantos años de amistad, jamás lo había visto tan enfadado, y no estaba dispuesta a continuar admirando esa parte de él, que se giró en sus talones para marcharse en una dirección contraria, hasta desaparecer en la oscuridad junto con sollozos que acompañaban a los grillos. Como era de esperarse, Veronica fue tras su amiga, sintiéndose mal por la misma.

Después de todo, Betty simplemente quería ayudar, y quizá no era la mejor manera, pero al menos, trataba.

Y en ese momento, sólo fueron Madison, y Archie bajó la penumbra de la noche, con la única iluminación de un vago farol sobre sus cabezas, y otra más lejana desde el porche del hogar del pelirrojo. Ella no era capaz de iniciar plática, así que él tomó la iniciativa, dominado por el enojo. ⏤Y tú, Madison, creí que eras la única normal en todo esto. Creí que me apoyabas.⏤

La carcajada sin gracia de la rubia no se hizo esperar, y por primera vez, usó su voz suave que se tornó dura por la impotencia que crecía dentro suyo.

⏤¿Normal? Oh, Archie. La palabra "normal", es un pleno antónimo de todo lo que está pasando contigo. Y si, te apoyo, por eso mismo quiero ayudarte con ésto.⏤ se aproximó con mucho cuidado de no rendirse ante su mirada castaña. ⏤¿Te diste cuenta de cómo trataste a Betty? Por una mujer qué, te amolda a su gusto, por que sabe que eres un crío, y te tiene entre sus arrugadas manos. ¿Que esperas? ¿Cumplir la mayoría de edad, y huir con ella hacía el amanecer? Repito, eres un crío.⏤

En eso, se percató de la manera en la que sus ojos marrones se hundían en gotas que amenazaban con huir en cualquier instante, y Madison tuvo que reprimir las ganas de envolver su fornido cuerpo en sus delgados brazos. Pero, ella también había colmado su poca paciencia, y también explotó. Ya cansada de tener que dibujar en papel para que Archie entendiera la situación, y actuó como debió desde un principio. La verdad dolía, en el fondo del alma.

⏤Tú, sólo piensa en esta noche, en cómo trataste a Betty, y en la cantidad de oportunidades que se están yendo de las manos por algo sin futuro.⏤ no había más que decir y Madison se marchó hacía su hogar, con el corazón colgando entre sus manos temblorosas.

Dejó a Archie varado en plena noche escalofriante. Con los sentimientos tan disipados, como sus pensamientos. Su mente no dejó de repetir aquella imagen que captó en el evento, El Sabor de Riverdale. Y se trataba de la mismísima muchacha de cabello dorado que ahora mismo le daba la espalda, otra vez, marchándose de él. Esa noche, cuando las luces de colores pintaban su piel pálida, junto con su cabello rubio, mientras esa sonrisa destellante desbordaba sus labios rojos, carnosos, y la canción que compusieron juntos en un fondo casi inexistente, pues nada más parecía estar cuando se trataba de ella. De Madison Cooper.