Capítulo 37: Sermón

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Cobarde. Esa era la palabra que describía a Sana, al menos por ese momento.
Después de ser tan valiente al besar a Tzuyu, salió corriendo de la habitación en cuanto se separó de ella. La menor se quedó confundida, no solo por el hecho de que Sana la había besado sino porque aquel era su primer beso; un beso robado.

Mina estaba apunto de usar él baño pero Sana la había tomado del brazo antes de que entrará.

— ¿Qué pasa? — preguntó la menor al notar a su compañera exaltada.

— B-besé a Tzuyu — le contestó.

Mina la miro sorprendida, pero antes de que le dijera algo su compañera había entrado al baño. Sana había escuchado pasos acercarse a ellas, tuvo miedo de que se tratara de Tzuyu y decidió esconderse en el baño.

— Sana unnie — la llamó Mina, aunque la mayor no fue capaz de escucharla. — , Tzuyu no esta aquí. — Mina volvió a intentarlo pero tampoco logro ser escuchada.

La japonesa menor suspiró antes de caminar lejos del baño, sabía que Sana tardaría en salir.

Jihyo se encontraba en la cocina junto a Nayeon, la menor le mostraba las sobras de los jugos que estaban en él refrigerador mientras le hablaba con molestia en la voz.

— ¡Basta, no seas así! — se quejó con voz de bebé. — Sabes que no me los puedo acabar.

— Lo entiendo, pero debes al menos botar tus sobras. — Aunque intentaba que su voz sonará enojada no podía lograrlo. En realidad no podía ser dura con Nayeon, no podía enojarse con su novia.

— Lo olvido — se excusó. — , lo siento, soy torpe lo sabes.

— No lo eres, no digas eso — le contestó enseguida Jihyo. La menor había rodeado con sus brazos a su novia, había olvidado el tema por el cual la regañaba.

— Jihyo, debes ser más dura con ella. El refrigerador siempre esta sucio por su culpa. — Jeongyeon había llegado a la cocina junto a la pareja.

Nayeon miró mal a la recién llegada, no solo porque había interrumpido un momento con su novia sino que el comentario que hizo la molesto.

— Sabes que es la verdad — le dijo al notar la mirada de la mayor.

— Jeongyeon unnie tiene razón — Jihyo suspiró antes de soltar a Nayeon. — , todas tenemos que mantener la casa limpia y eso implica el refrigerador.

Nayeon miro con un puchero a su novia.

— Sino botas tus sobras tendrás que limpiar el refrigerador tu sola. — Jeongyeon había comentado. Nayeon le hizo una señal para que se quedará en silencio, sin embargo Jihyo estuvo de acuerdo con el comentario de Jeongyeon.

— No es la primera vez que te lo digo o alguien más te dice, así que si lo vuelves hacer tendrás que limpiar tu sola. — Jihyo había salido de la cocina después de ese comentario.

— Bota tus sobras no es la gran cosa. — Jeongyeon le hablo cuando estuvieron solas.

Nayeon se cruzo de brazos.

— Incluso pones a mi novia en mi contra — se quejó.

— No la puse en tu contra, estabas tomando ventaja sobre ella.

Nayeon se quedó en silencio, de cierta forma Jeongyeon tenía razón aunque Nayeon no lo llamaba tomar ventaja simplemente era no recibir un 'regaño'.

— No quería que Jihyo se enojara conmigo, soy demasiado tonta a veces y no quiero ser una tonta con ella.

— ¿A veces? — bromeó Jeongyeon aunque al ver que la mayor no cambió de expresión se disculpo.

Quédate conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora