¿Por Qué Me Odias?

No Me Gusta Lo Que Veo

Narra Verónica

El sonido del teléfono me despierta, observo y son cerca de las dos de la mañana, quién rayos llama a esta hora, trato de ignorarlo pero el sonido es persistente, así que no me queda más que responder y mandar a la mierda a quién sea que este llamando.

Verónica: hola- dije obviamente enojada-

XX: hola Verónica, lamento llamarte a esta hora pero es urgente- dice esa voz que reconozco de inmediato-

Verónica: Steve eres tú, paso algo malo? -

Steve: ella va dejarme Verónica, estoy seguro de eso, Victoria se irá- dice con la voz rota y yo no hago más que maldecir la estupidez de mi hija-

Verónica: pero qué dices, Victoria sería incapaz de dejarte, ella te ama Steve- miento-

Steve: estoy comenzando a dudarlo y eso me duele, lo último que quiero es un divorcio, pero no se como arreglar las cosas, por eso te llamo, necesito tu ayuda Verónica- dijo con desesperación-

Verónica: por supuesto que tendrás mi ayuda Steve, no te preocupes- dije firme- mira, mañana mismo estaré allá y podremos hablar con calma y veremos qué hacer de acuerdo-

Steve: de acuerdo, no sabes cuánto te lo agradezco Verónica-

Verónica: no tienes nada que agradecer querido, te llamo cuando lleguemos, esta bien? -

Steve: claro, los estaré esperando, dice ya más tranquilo-

Cuelgo el teléfono y me levanto deprisa hacía el vestidor, tomo mis maletas y las de mi esposo y las arrojo sobre la cama causando que este se despertara.

Henry: Verónica qué pasa, qué haces con nuestras maletas? - dijo todavía bostezando-

Verónica: pasa que la estúpida de tu hija no puede hacer nada bien- dije con frustración, mientras metía toda la ropa posible-

Henry: de qué hablas- dijo levantado- le paso algo a Victoria-

Verónica: le va pasar, si me entero que arruina su mejor oportunidad- digo con enojo- así que empaca, porque nos vamos a ver si puedo arreglar las cosas-

Se queda callado por unos segundos, hasta que suspira y sin decir nada comienza a empacar, término de arreglar mis cosas y agarro el teléfono para solicitar los pasajes y poder llegar lo antes posible, solo espero llegar antes de que Victoria arruine las cosas.

Verónica: será mejor que te apresures el taxi esta apunto de llegar y no quiero retrasarme- dije llevando mis maletas hasta la puerta-

Henry: ya estoy listo, no te preocupes- dice tomando las suyas y yendo tras de mí-

Pocos minutos después nos encontrábamos en camino al aeropuerto, la cabeza me iba explotar de enojo, no puedo creer que mi hija este a punto de tirar todo su futuro y el de la familia a la borda, casarse con Steve Graham es lo mejor que le pudo haber pasado y no pienso dejar que lo arruine por una estúpida aventura, porque si de algo estoy convencida, sé que hay alguien más metido en esto, una mujer precisamente y no lo voy a permitir.

Henry: Verónica, no crees que nuestra hija es lo suficientemente grande como para resolver sus problemas sola- dijo rompiendo el silencio que había cuando ya estábamos en el avión-

Verónica: no me vengas con esas idioteces Henry, tu hija esta a punto de acabar su matrimonio con el mejor hombre que pudo haber encontrado y eso es algo imposible de permitir- digo mirándolo seria-

Henry: y no te has puesto a pensar, que tal vez no es feliz, quizás no lo ama-

Verónica: ja ja ja no me hagas reír por favor, tú sabes muy bien que estos son negocios, el amor no tiene nada que ver- dije enojada- Claramente Victoria salió a ti, por eso comete error tras error, pero aquí estoy yo para arreglarlo- dije y me volque terminando la absurda conversación-

Después de unas horas llegamos a nuestros destino, aunque preferí quedarme en un hotel, primero necesitaba hablar con Steve para después decidir que hacer con mi hija.

Verónica: llamare a Steve para decirle que estamos aquí, tú si quieres descansa un poco- no me contesto y entro al baño, no le di importancia, no tenía tiempo para lidiar con sus berrinches, tenía algo más importante de lo que me debía encargar-

Llame a mi yerno y él se encargo de explicarme todo lo que había pasado, desde las peleas por volver a trabajar, hasta la negación de Victoria por tener hijos, yo trate de tranquilizarlo, en todo momento además de expresar mi felicidad por tener nietos ya que eso mejoraría todo, al unir ambos apellidos definitivamente subiría el status de la familia y mi hija no lo iba a arruinar, me despedí diciéndole que mañana nos veríamos en la empresa para hablar como solucionarlo.

El día llego y muy temprano Henry y yo llegamos a la empresa, donde nos encontramos a un muy angustiado Steve que nos dijo que Victoria estaba en camino para hablar con él, así que lo calme y le dije que me lo dejará todo en mis manos.

Cuando Victoria llego, obviamente quedo sorprendida al vernos allí, pero más sorprendida quede yo después de que hablamos y me quedo bastante claro que se trataba de una mujer, pero como se lo dije, voy a descubrir quién es y cuando lo haga, no habrá nadie quién me impida destruirla.

Steve: Victoria no te ha contado- dice sonriendo- su relación cambio totalmente ahora son amigas y hasta pasan mucho tiempo juntas-

Las palabras de Steve me hicieron pensar, no creo, pero por la cara que puso Victoria tendré confirmar mis sospechas, así que luego que saliera del restaurante echando fuego, me fui detrás de ella con la intensión de salir de dudas, aunque antes tuve que decirle a Steve que me dejara hacerlo, ya que el también quería salir, lo deje con mi esposo y tome un taxi para seguir a mi hija.

El camino duro casi treinta minutos, cuando observe que el auto de Victoria se estacionaba en un edificios de departamentos, le dije al taxista que se estacionara a un lado y baje siguiéndola de cerca hasta los ascensores lo que me impidió seguirla, espere y vi en piso bajo y subi después, me quede en el pasillo a esperar para ver de dónde salía y después de lo que sería casi una hora la vi salir de un departamento, acompañada por nada y nada menos que por Charlotte la hija menor de Steve, definitivamente esto confirmaban mis dudas y no me gustaba para nada lo que estaba viendo.