12 ángeles, 1 problema

¿será Korn?

- no vuelvan a entrar! - le ordeno Vados a Whis y Cognac mientras los sacaba de las orejas y cerraba la puerta de golpe.

- es muy complicada - comentó Cognac.

- traté de advertirte - le confesó Whis - pero por lo menos tenemos la pista... ¿no?

- por supuesto! - respondió - aquí está.

- según mi lista mental - Whis cerró los ojos - el siguiente es Korn.

- ¿enserio piensas entrar ahí? - le preguntó Cognac preocupado.

- ¿por qué la pregunta? - responde Whis.

- mira lo que pasó con Vados, imagino que si él se entera de que entramos a su habitación va a matarnos.

- no se si te has dado cuenta... pero no somos mortales hermano - atinó Whis.

- es un decir - dijo Cognac - pero sabes que si se le ocurre pelear con nosotros la diferencia de poder es bastante alta.

- simplemente hay que tener cuidado - aclaró Whis.

Los hermanos caminaron hasta el cuarto de Korn, casualmente estaba casi frente a la sala, así que debían tener mucho cuidado.

Cuando entraron se sorprendieron, todo estaba bastante ordenado a excepción de un par de calcetines tirados en la cama. 

- que raro - susurró Whis - seguramente alguien además de nosotros estuvo aquí.

- Korn tontito - respondió Cognac.

- Cognac - reclamó Whis - tienes que abrir tu mente... si yo fuera Korn no dejaría nada fuera de su lugar.

- pero como no lo eres tu cuarto parece un establo - comentó.

- hay que pretender que soy Korn por un momento - ordenó Whis - y tú serás Marcarita.

- ¿por qué yo? - protestó Cognac - a ti te queda mejor el papel de mujer!

- oh Marcarita... ¿pero qué haces aquí? - preguntó Whis haciendo la voz ronca y una mirada seria.

- yo...yo - respondió Cognac actuando como una chica - yo solo quería decirte que...

- ¿qué Marcarita? - respondió Whis - de antemano te advierto que si vienes a hacer una tontería puedes largarte ya!

- pero - respondió Cognac - yo vine porque quería dejarte algo muy claro...

- escucha Marcarita - Whis se sentó en la silla del escritorio - solo por que tu Dios Destructor sea un payaso, no significa que tú debes ser uno. Por favor compórtate!

- ¿y bien? - Cognac frunció el ceño - ¿me vas a dejar hablar Korn Flakes?

Whis comenzó a reír.

- así no se puede Whis! - le regañó - se supone que Korn se enfada por los apodos que le pone Marcarita.

- hice lo mejor que pude pero... ¿Korn Flakes? - preguntó Whis.

- es cereal sin azúcar, sería un buen apodo para él.

- Korn es raro - admitió Whis - yo no podría vivir sin comer carne y...

- espera Whis - le calló Cognac - estamos olvidando nuestro verdadero propósito... debemos buscar pistas!

- tienes toda la razón - respondió este - pero... no sé si él tenga los báculos... es decir, fue uno de los que no se había percatado al inicio.

- yo desconfiaría de él... es muy sospechoso - dijo Cognac recostándose sobre la cama de Korn y olfateando la almohada. - oh! huele a él! - dijo haciendo una patética imitación de la voz de Marcarita.

De la nada Whis dijo:

- ¿qué es eso que hay bajo la almohada?

- ¿qué? - preguntó Cognac introduciendo su mano y sacando el objeto - es un retrato de Marcarita! - exclamó este riendo.

- hay Cognac! - dijo Whis riendo también - vamos a perder a Korn...

- llévate el retrato - le ordenó Cognac - será una pista muy interesante...

Cuando salieron del cuarto se dirigían al siguiente en la lista, pero en el camino iban riendo como locos.

- oh Korn! - exclamó Cognac actuando como su hermana - no sabía que... 

La risa los dominó profundamente y hacían un gran escándalo.

- ¿qué estarán haciendo esos 2? - se preguntó Martinu. - sea lo que sea... jamás van a encontrar los báculos - rió. 

continuará...