Acosada por 4 idiotas

#20 ¿Quieres apostar?

-¡Deja de reírte Harry ¡-grite desesperada, el solo reía como un loco y me miraba divertido.

Yo de divertido no le veo ni una pisca, estamos encerrados, me duele mi maldito pie, me duele la cabeza juro que no debí de haber bebido tanto, mi garganta quema, la oscuridad me aterra y quiero salir de aquí y ¿Qué hace Harry? reír, solo eso, se ríe como tonto ni siquiera sabe porque y esta acostado en suelo del baño, está más ebrio de lo que creí.

-¡Mi estómago¡- dijo entre risas, rodé los ojos e intente abrir la puerta de nuevo.

-¡Estamos encerrados ¡-grite- ¡abran ¡

Calor, era lo único que tenía en exceso, el baño era muy pequeño y cada vez que aumentaba más y más casi al punto de no poder respirar. Harry seguía riendo.

-¡Harry ya cállate que robas oxigeno ¡-grite.

- Habla la que lleva media hora gritando para poder salir- dijo, no le di importancia, suspire y me senté en suelo cansada.

-Vamos no puede ser tan malo estar encerrados en el baño- dijo Harry lo mire incrédula.

-Y dime ¿Qué tiene de bueno?- pregunte y Harry sonrió.

-Yo sé cómo hacer que te diviertas pero sé que me dirás que no-dijo con una sonrisa traviesa.

-Sabes tú perversión me está preocupando - dije sin importancia.

A pesar de la oscuridad podía ver perfectamente su rostro por la luz de la luna que entraba por una pequeña ventana.

-¿Qué? ¿Por qué? Yo pensaba que jugáramos con agua -hizo una pausa-la pervertida eres tú.

Negué con la cabeza y Harry sonrió, inconscientemente también sonreí, Harry me miraba y yo lo miraba pero no era incomodo era algo ¿normal? Tal vez Harry a veces se pase de asqueroso pervertido pero pienso que lo hace molestando porque si no es así realmente me daría miedo.

-No tienes por qué estar de ese lado- fruncí en ceño, yo estaba sentada contra una de las paredes del baño al lado de la puerta y el en frente de mi contra la pared del frente- puedes venir a mi lado yo no voy a hacer nada-dijo inocente.

Entrecerré los ojos, no sabía si creerle estando con Harry no sabes lo que vaya a pasar como quedarse encerrado en el baño de un bar, por ejemplo. Sonrió y comencé a arrastrarme por en suelo hasta estar a su lado, me cruce de piernas y el me miraba pero yo no lo hacía.

-Deja de mirarme que es incómodo- dije y el sin pensarlo dos veces quito mis manos de mis piernas desnudas y acomodo su cabeza sobre estas, acurrucándose como un bebé.

-Si a delante -dije sarcástica y él me sonrió.

Sus rizos rozaban mi pierna cada vez que se movía, por instinto toque sus rizos ya que me parecía divertido hacerlo, comencé a acariciar sus rizos más seguido, su cabello era muy suave incluso era mejor que el de una chica y mucho mejor que el mío.

Harry comenzó a cerrar sus ojos, creo que tocarle el cabello hace que se duerma rápido.

-Ey no te duermas-susurre.

-Es tu culpa- dijo aun con sus ojos cerrados.

Suspire y seguí jugando con sus rizos, Harry se acomodaba cada segundo de forma diferente era como una lombriz sobre mis piernas.

-Si sigues haciéndome eso te juro que me voy a dormir- dijo y reí.

-¿No te cuesta respira?- pregunte, abrió sus ojos y negó.

-¿Eres asmática?- pregunto como si fuera adivino.

- Aja.

-Probablemente sea eso-asentí- cuando estaba en la escuela hice un experimento- hizo una pausa- se trataba de cómo hacer cuando una persona asmática le cuesta respirar y no tiene su inhalador.