CINCUENTA Y UNO✨ (Vestigio 2)

938 111 19
                                        

Taehyung

*Dos años atrás*

Había terminado de coger. No me había gustado del todo, pero lo que importaba era el dinero, y tenía que enfocarme en el trabajo sucio.
Tenía la dirección que la mujer me dio. «No recuerdo exactamente el nombre»
Su razón era agresión, aunque decía que solo era verbal, necesitaba que alguien pusiera a su marido en su lugar.

La casa está en los suburbios más jodidos de Corea. Yo vivía ahí de pequeño. Recuerdo cuando mi madre me llevaba al jardín de niños, mientras mi papá trabajaba y no llegaba a casa todo el fin de semana.
Estoy fuera de la casa. No pienso entrar como un estúpido. Le mando un mensaje a la mujer para que pueda venir a abrirme y escabullirme hasta llegar al cabrón ese.
Me dice que entre por atrás, porque su esposo podría golpearla peor si me veía entrar por la puerta principal, pensaría que lo está engañando, lo cual, es verdad.

Cuando abre, se ve que está temblando, y tiene una cara de horror.

—Espera aquí —me susurra cuando cierra la puerta detrás mía.
Se va medio corriendo, y recorro un poco la casa, hasta que me pongo alerta cuando escucho gritos.

—¡CARAJO! ¡AQUÍ SE HACE LO QUE YO DIGA! —Joder. Es una voz demasiado gruesa, incluso más que la mía. No me importa, y me voy acercando al salón, pues de ahí provienen los gritos.
Entro poco a poco y veo a un hombre fortachón tomando del pelo a la mujer. Con una cara de odio, y una cara de un maldito patán. Mi pecho sube y baja rápidamente del enojo.

No me puedo controlar, es demasiado para mi tener que ver de nuevo esto. No lo vivía desde que era más pequeño.
El hombre nota mi presencia, y pronto azota a su mujer en el sofá con fuerza.

—¿Quién eres tú? ¡¿Qué haces en mi maldita casa?! —Grita corriendo a mi, tomándome del cuello de mi camisa y me atrayéndome a él. No contesto, y mantengo una mirada vibrante y soñolienta—. ¡Te estoy hablando pedazo de imbécil! —Justo cuando termina de hablar, me suelta un puñetazo en la mejilla con fuerza. Logra tirarme al suelo. La mujer grita asustada mientras su marido se vuelve a abalanzar a mi y pone sus dos manos en mi cuello.

Voy perdiendo el aire, y me estoy preguntando qué carajos estoy haciendo. Cierro y abro los ojos ya un poco mareado.
Golpeo sus huevos con mi rodilla y me levanto cuando él agoniza en el suelo. Paso mi mano por mi nariz quitando la sangre, y voy hacia la mujer para ayudarla a pararse poco a poco.
Está tan asustada, que sé que quiere hundirse en mis brazos. No la culpo, busca consuelo que este cabrón nunca ha podido darle.

—Vete, yo termino con él —le digo intentando convencerla.
El hombre hace un movimiento extraño cuando está bien. Saca algo debajo del sofá. Hasta parece estúpido. Es un estúpido.
Un arma, una pistola es la que nos apunta a la mujer y a mi. Tengo miedo, estoy lleno de miedo, pero algo me dice que tengo que sacar a esta mujer del infierno que vive a diario.

—No sé quién carajos eres, pero si no te vas de mi casa te voy a...

—¿Matar? ¿Eso harás cobarde? ¡Dispara cabrón! ¡No tienes huevos para hacerlo! Por eso te metes con una mujer. Suelta eso y hay que resolver esto como se debe —al fin le grito tratando de intimidarlo, pero lo único que consigo es una sonrisa suya pensando que soy un mocoso estúpido. Siento como si todo lo que estoy diciendo fuera para mi padre, el pendejo que se aprovechaba de una mujer increíble cuando era más pequeño.
Cuando lo pienso, siento más ira y cada vez más quiero terminar con este hombre.
Nunca antes me habían apuntando con una pistola, y ahora no sé qué hacer, si hago un movimiento brusco me matará, bueno, seguro va a disparar.

taekook; sweet skin (달콤한 피부) ✨ EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora