Mi Prohibición

capitulo 4:

Anonadada

¿Boxeaba? Camine hacia una esquina donde podía divisarlo, pepe le entregaba sus guantes pero antes le ponía una especie de polvo blanco, vendas y luego venían los guantes, Destroyer se sacó la polera y Casi necesito aire… era Fuerte…Fuerte y potente ¡pero que estoy diciendo! me sonroje de inmediato ante mis pensamientos y menos mal que luego se colocó una pero sin mangas. Acto seguido se dedicó a golpear el saco que estaba frente a él, sudado y cansado Destroyer seguía, fue cuando me percate que en toda su espalda tenía un tatuaje… un ángel, un ángel negro y con ello una pequeña cicatriz, Era tan misterioso… ¿Por qué Lo habrán llamado Destroyer?... el no parece ser un ángel negro…es demasiado hermoso para serlo…

Cuando acabo se sacó los guantes y sentándose en una silla bebió agua, de repente mi celular sonó, mire la pantalla y era Ryder, preferí contestar antes de que me fuera peor

-¡DONDE MIERDA ESTAS! DONDE TE LLEVO ESE HIJO DE PUTA

Iba contestar pero alguien me arrebato mi celular, al girarme vi al Ángel negro con el ceño fruncido

-Cuida tus palabras cuando te refieres a mi Ryder –dijo secamente- está bien, si … y aun no la follo –me miro- por ahora

Y miles de mariposas me atravesaron ¿acababa de decir follar?

-toma –Me tendió el celular-

-¿Por qué has respondido por mí?

-por qué se me ha dado la gana

-pues no lo hagas más –lo mire -  

Se acercó amenazantemente a mí, y mi piel se erizo…

-¿tienes miedo?

No respondí

-contéstame

-no

Destroyer abrió los ojos sorprendido ¿Por qué? Y antes de que pudiera decirle algo pepe se nos acerca

-muñequita a sido un gusto verte

-el gusto fue para mí –sonreí-

-Behemoth recuerda la pelea de mañana

-no te preocupes pepe… ahora ve adormir

Pepe asintió, me dio un beso en la mejilla para luego abrazar a behemoth este le correspondió encantado y cuando lo hizo mi corazón se estrujo… Sin duda El Ángel negro tenía sentimientos… Pepe nos dejó a solas

-vamos –Se dio media vuelta y yo lo seguí atrás

Tenía tantas preguntas sobre él… había algo que me llamaba mucho la atención

-¿te han comido la lengua? –sonrió-

Mire a su lado, se veía terriblemente tentador conduciendo

-¿tienes un campeonato?

Destroyer carcajeo

-No

-entonces, ¿como boxeas?

-haber pequeña lora

-no me digas lora –me queje y solo conseguí que el riera-

-si lo quieres llamar como boxeo –se encogió de hombros- da igual, lo mío es callejero

-¿callejero? –el asintió-

-hacemos apuestas…

-¿así te ganas la vida? ¿Golpeando a los demás por dinero? 

-A veces tenemos que dañar a los demás para vivir –finalizo-