Por un alma equivocada (GaaTen)

Tema de conversación

Horas y horas de árbol en árbol siguiendo los pasos del Kazekage, Tenten pensó en su alta condición al haber aguantado tanto tiempo el ritmo del chico.

Cuando por fin pararon se instalaron en el bosque, Gaara traía consigo una tienda de campaña que invocó de un pergamino, Tenten encendió una fogata y trajo agua de un río cercano, sentada observó el fuego que iluminaba su rostro, las llamas estaban inquietas mientras le alimentaban de la leña se mantendría prendida por lo menos una o dos horas.

Miró al Kazekage aún con la máscara y disfraz puesto, Tenten no estaba segura que era lo que él miraba parecía que lo hacía la fogata igual que ella.

La castaña tomó su mochila y sacó un paquete y lo desenvolvió rápidamente dos bolas de arroz se vieron de inmediato, se levantó y le entrego una al Kazekage, él sólo la observó sin tomarla.

—No le prometo que sea lo más delicioso que ha probado pero si le calmará su hambre por un tiempo— Tenten le sonrió amistosamente.

El chico tomó la comida entre sus manos y Tenten volvió a sentarse en su lugar entre el fogata y el chico, le dió el primer mordisco apaciguando el hambre que tenía, dió gracias que había practicado mucho antes y no sabían tan horribles como las primeras veces en las que el arroz que quemó, sin embargo estas pasarían como una comida provisional durante un viaje claro en lo que encontraban algo después para comer.

Tenten miró rápidamente con curiosidad como el chico seguia sosteniendo la bola de arroz en sus manos, su máscara estaba baja, como si observará atentamente cada grano de arroz.

—¿Sucede algo?— sonrió incómoda y nerviosa— no le obligaré a comerla si no quiere.

—Si la comeré, te lo agradezco— la máscara volteó hacia ella e inclinó un poco su cabeza definiendo lo que acababa de decir como un agradecimiento sincero, Tenten observó cómo el chico levantó la máscara pero sólo descubrió la parte de su boca y comió lentamente, Gaara parecía tan pasivo pero no relajado por completo.

La chica notó como su mente había quedado en blanco, una conversación normal con el Kazekage dependía que ella pensará mucho en lo que diría, usualmente eso era lo contrario a lo que le pasaba con las personas más cercanas a ella o por lo menos pertenecientes a Konoha.

A Tenten no le gustaba el silencio, siempre sentía la necesidad de hablar aunque estuviera con una persona que no conocía del todo, sentía que era su deber, le importaba mucho que no creyeran que era alguien aburrida.

—¿Hasta dónde queda nuestro destino Kazekage?— inmediatamente tomó la misión cómo tema de conversación.

Después de masticar el chico habló.

—No puedo decírtelo con exactitud, lo siento— fue lo único que mencionó y siguió comiendo con la misma tranquilidad.

Tenten no encontró otro comentario más que hacer observó el fuego de nuevo tan inquieto como ella misma, a veces le daba la impresión que molestaba a las personas al hablar tanto.

No todos eran iguales a Lee, Tenten podía tener una conversación sin terminar con él, era un libro abierto como ella, cada oración llevaban a una contestación.

Recordó como de los tres Neji era el más callado, con el tiempo fue abriéndose más a ellos, tal vez lo habían seducido por su manera inquieta de hablar de los dos, se había adaptado a ellos, así era Neji.

Miró hacía el cielo estrellado mientras comía el último trozo de arroz, la altura de los árboles le dejaba ver con perfección el cuerpo estelar.

"Apuesto a que nos separa ese manto de estrellas, la diferencia es que tú puedes divertirte nadando en el y yo no, pff que envidia tengo..." pensó en una de sus tantas ideas qué tenía últimamente sobre cómo imaginarse el cielo donde el Hyuga estaba.

Cuando volteó de nuevo sintiendo cierta mirada, la máscara había regresado a su lugar el chico había terminado de comer su aperitivo.

Observó de nuevo aquella máscara qué le era familiar, bajó la mirada apenada.

—Kazekage...usted ¿hasta cuándo vestirá de esa manera?— le preguntó, cada vez que miraba aquella máscara sentía un poco de presión en el pecho, realmente le incomodaba el hecho de que parecía Neji por momentos en su mente hace muchos años atrás.

—Cuando represente menos peligro, saliendo del país del fuego.

Por como habían pasado las horas en el viaje Tenten sabía que no faltaba mucho, suspiró aliviada.

Notó que el Kazekage se levantó y le dió la espalda.

—Descansa dentro de la tienda, yo haré guardia— le dijo secamente.
Tenten abrió los ojos soprendida y negó con la cabeza.

—Kazekage usted necesita descansar más que yo, vino desde Suna hace apenas unas horas, no está en condiciones— advirtió preocupada.

—No es necesaria tu preocupación, soy diferente a tí, puedo soportar más de lo que tú lo haces.

La castaña abrió los ojos, no sabía cómo interpretar aquello, bajó la mirada enojada, la estaba subestimado, ¿pero no era eso por lo que la había elegido?, un perfíl bajo y sin una habilidad en especial, tal vez él no quería un ninja capaz de luchar junto a él, sólo era la compañía para no esparcir rumores lo que él buscaba.

Se levantó aún con la mirada hacia abajo.

Se metió en la tienda sin dudar un segundo más.