Los Gemelos y Yo **COMPLETA**

Cumpleaños Parte 2

—cuando Hannah perdió la virginidad.... Naahh eso era un chiste— todos carcajearon y yo estoy segura que me puse roja, son unas malditas

—ya enserio que tipo de toallas femeninas le gustan a Hannah—

«que diablos vuelvan a la pregunta de la virginidad»

—Hannah?

—sin alas?— dije al reírme primero, quien demonios hizo estas preguntas

—gemelo Blanco da un paso al frente,— «mi sonrisa se hizo evidente, quería que Ethan ganara»

—que parte del cuerpo le gusta que le besen a Hannah

—da tu respuesta Hannah

—espalda— conteste

—gemelo blanco un paso mas

—que seña o cicatriz tiene Hannah en su cuerpo

—tiempo Gemelos, muéstrennos,— pausa— Hannah, dinos tu respuesta

—tengo un lunar en forma de Luna en el pie

—gemelo Blanco un paso mas al frente

—ultima pregunta redoble de tambores—

«que nervios»

—porque Hannah se unió al equipo de porristas

«que contesto, a eso, Dios no lo se, bien me uni por Ethan, el tenia bajo el animo porque Aiden brillaba en futbol, temía mucho no brillar tanto como Aiden, pero le dije que si lo hacia me tendría en cada partido, Aiden grito «no podrías ser porrista, eres muy fea» asi que aposté que si lo lograría, hay Dios que digo, Espero contestes bien Gemelo Blanco

—Hannah dinos tu respuesta

—por Ethan—

—gemelo blanco eres el ganador, tienes derecho de besar a esta hermosa chica te lo mereces

Sentí sus labios en los míos, sus manos estaban puestas delicadamente en mi cuello, esperen un momento estos son los besos de Aiden,

Me quite la venda, y Lisa dijo —sabíamos que ganarías Ethan, son tal para cual, hacen la pareja perfecta—

«le dijo Ethan, no pueden engañarme, lo vi, mis ojos estaban mas cuerdos ahora, Aiden, estoy segura que es el» lo tome de la mano y lo lleve arriba, todos aplaudían, y gritaban, era obvio lo que pensaban malditos morbosos.

Cerré la puerta pero en cuanto gire para maldecir a Aiden el ya me tenia de la cintura y me cargaba abrazada con sus labios en los míos, yo lo golpeé hasta que me bajo al suelo

—que demonios Aiden—

—como lo supiste

—¿porque haces esto?

—lo siento Hannah, sabia que yo ganaría, no permitiría que te traten como una zorra

—donde esta Ethan

—el acepto el juego, sabe que perdió, no le queda mas que retirarse

—están locos, quieren jugar, busquen otro jugador Aiden yo ya me canse

—Hannah, regresa

Se interpuso en mi camino, no me dejaba salir

—no lo entiendes Hannah, yo te amo

Me quede sorprendida

—dame una oportunidad Hannah— dijo, sus ojos eran serios, casi nunca lo veo así

—déjame pasar Aiden

Se acerco y me beso de nuevo, esta vez fue diferente, esta vez sentí que mi cuerpo se estremeció por completo, su beso fue cálido, tierno, el pego su frente a la mía y dijo —te amo Hannah

Volvió a besarme, y separándose milímetros de mi susurro —enserio te amo—

Lo bese apasionadamente, a ambos nos faltaba el aire, lo rodeó con mis brazos y bajamos al suelo entre beso y beso, lo detengo —tengo mucho que pensar Aiden

—Hannah...

Me levanto y salgo rápidamente, vi que traían el pastel, Ethan me detiene en el camino —qué pasa Hannah

—porque demonios no fuiste tu— grite, me solté de el y me fui directo a mi casa

Esa noche me encerré y quite la llave escondida debajo de la alfombra solo los gemelos conocían su ubicación, subí a mi cama, grite hasta mas no poder, y mi cabeza daba vueltas y vueltas.

Me desperté, estaba a la mitad de la cama y una pequeña idea se me ocurrió Escribí una carta a cada uno, si que me tarde en hacerlo.

pensé en quemarlas, cuando baje por el encendedor de mi papá vi a mi madre entrar en la casa, lucia algo desesperada, pregunte

—¿qué pasa mamá?—