Capítulo 26

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Capítulo 26

POV'S BETH

Abro los ojos y veo la sonriente cara de Evan.

¿Se puede ser más feliz que cuando te levantas con el chico que quieres a tu lado?

Evan se inclinó hacía a mí y me dio uno de esos fantásticos besos que me dejan con las piernas temblando y el estómago del revés.

Si, se puede ser más feliz.

- Buenos días mi niña.

- Buenos días bebé.- Evan gruñó.

- Cuantas veces te diré que no me llames así

- Pero me gusta.- dije con una inocente sonrisa.

Evan se quedó un rato pensativo y yo me fui a la cocina a hacer el desayuno.

Mientras hacía el desayuno unos fuertes brazos me cogieron por detrás y me levantaron del suelo e hicieron que girara en el aire.

- Evan, bájame. No seas idiota.- dije riéndome.

- ¿Evan?- dijo Mickey

- Mierda.- dije bajito.

Me giré para enfrentarme con mi primo y su cara era de la más pura decepción.

Joder, tenía que habérselo contado desde el principio y no que esperase a descubrirlo. Pero no sabía que iba a allegar tan pronto coño. Soy una idiota, Evan me lo dijo. Era un error ocultarlo. Voy a perder la confianza con mi primo.

Todos esos pensamientos surgieron en mi cabeza mientras mis ojos se aguaban.

Odiaba ser tan sensible.

- Dime que Evan no está aquí y que solo te has confundido.- dijo Mickey enfadado.

Y como si mi suerte no fuera poca ya, Evan apareció por la puerta en boxers y con una sonrisa de oreja a oreja que se congeló al ver la situación.

Mickey giró la cabeza y al verlo así vestido (o desvestido) se abalanzó sobre el con el puño en alto.

- Hijo de puta te has acostado con mi prima. A la familia de los amigos no se toca.

- Tío, ella ya es mayor para que tú seas su guardián.

Mickey no contestó y le asestó un puñetazo en la mandíbula haciendo que Evan cayera y yo gritara.

- Mickey para, le vas a hacer daño.- dije al ver que Evan no trataba de defenderse.

Separé como pude a Mickey de Evan y le intente tranquilizar pero me miraba con los ojos llenos de traición y las lágrimas se me dispararon.

A veces me gustaría ser como Valen, ella nunca llora.

- Vale tío, me lo merezco. Pero he sido yo el que ha insistido en esto, ella no tiene nada que ver. No le hagas llorar.- dijo Evan mirándome.

- ENCIMA LA HAS OBLIGADO.- dijo mi primo viéndolo todo más rojo aun.

- NO, lo que Evan quiere decir... es-s que...

- Me has fallado, ''prima''.- dijo sin mirarme, se giró y salió por la puerta dando un portazo.

Y mis lágrimas volvieron a salir, más fuertemente.

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