La hermana de Lavezzi (Lio Messi y tu)

Capitulo 5: Una noticia inesperada

Apenas abrió sus ojos, Emma dirigió la mirada al reloj de su mesita de luz, las 5:00 A.M, todavía era temprano, pero una vez que se despertaba no podía volver a dormirse, por eso decidió ponerse su bata y bajar a desayunar algo. Desde las escaleras pudo escuchar el ruido de la pava que chillaba, sorprendida apresuro su paso hacia la cocina, le asombraba que su hermano estuviera levantado a esas horas.

Pocho: ¡Ay! – su quejido se debio a que se volcó su café por el susto

Emma: ¿Tan fea soy que te asustaste?

Pocho: Si una persona se te aparece en medio de la nada cuando pensas que estas solo, por más linda que sea ¿cómo reaccionarias?

Emma: Supongo que me asustaría

Pocho: Exacto, a propósito, ¿qué haces despierta a esta hora?

Emma: No podía dormir, supongo que lo de anoche me dejo inquieta

Pocho: No tenes que pensar en eso, no vale la pena- Emma solo asintió- ¿queres desayunar?

Emma: Bueno, ¿te puedo hacer una pregunta?

Pocho: ¿Solo una?

Emma: ¿Por qué los empleados no están todo el día en tu casa?

Pocho: Porque dentro de todo soy limpio y organizado, por lo tanto no necesito que alguien este limpiando la casa las 24:00hs del día, me puedo cocinar yo solo y tampoco me gusta pensar que dependo de alguien, si puedo arreglármelas por mi cuenta y ser totalmente dependiente mejor. Los únicos que trabajan todo el día en casa son Raúl y los de seguridad.

Emma: ¿Pero no te sentís…

Pocho: ¿Solo?-Emma asintió – No tengo mucho tiempo para sentirme solo porque tengo: entrenamiento, los chicos prácticamente viven acá, ahora estoy viviendo con vos, trato de organizarme siempre para dedicarle tiempo a Yanina…- le comento mientras le llevaba una taza de café 

Emma: ¿Quién?

Pocho: Mi novia, ¿no te conté?

Emma: No –respondió en un tono bastante cortante como para provenir de ella

Pocho: ¿Estas celosa?

Emma: ¿Por qué iba estarlo?

Pocho: Mi hermanita esta celosa- decía mientras la abrazaba y Emma intentaba soltarse

Emma: No molestes

Pocho: Okey me calmo, ¿tenes pensado hacer algo hoy?

Emma: Nada en especial, ¿por?

Pocho: Porque ahora iba a entrenar, ¿queres venir?

Emma: Bueno

Cuando llegaron al campo de entrenamiento, Emma no pudo evitar sentir que una paz inmensa la invadía sin previo aviso. El olor a césped recién cortado, el suave viento que le sacudía el pelo y el Sol que recién se asomaba. Era uno de esos momentos en el que solo se deseaba que nunca se acabaran. Ella tenia la cualidad de apreciar cualquier momento hermoso por más simple que fuera. 

Emma: Pocho no hay nadie 

Pocho: ya se, justamente por eso vengo a esta hora

Emma: ¿Por?

Pocho: Pasa que por momentos me gusta entrenar yo solo, para perfeccionar fallas y todo eso, además está la ventaja de que cuando llega el resto del equipo estoy preparado

Emma: ¿Podemos jugar como cuando éramos chicos?

Pocho: ¿?

Emma: Vos me tiras la pelota y yo la atajo