—¿Por qué, Sherlock? —cuestionó el doctor mientras se llevaba una papa frita a la boca.
—¿Qué cosa? —contestó el mencionado, tomando una papa frita también.
—¿Por qué esperar hasta ahora para decírmelo?
—Porque quería que fueras feliz.
Un médico militar y el único detective consultor se encontraban juntos en el sofá, siendo separados únicamente por una pequeñita de cabellos rubios y un tazón de papitas.
Aquella tarde el más alto había confesado sus sentimientos al doctor, aprovechando que la hija de éste se encontraba dormida y que ambos compartían un plato de botana. Los sentimientos, antes tan despreciados por el pelinegro, habían sido correspondidos por su compañero desde hacía mucho tiempo.
—Sherlock, fui feliz y lo soy, pero pudiste haberlo dicho antes, ¿por qué...
—Porque el verdadero amor espera, John —interrumpió la pregunta—. Si no te lo dije antes fue porque no quería hacerte sufrir aún más, y si lo hubiese confesado antes, no tendrías a este pequeño costal de risitas —dijo señalando a Rosie.
—¡Pero pudiste darme alguna pista!
—Te di muchas, y como no las captabas opté por esperar.
—Esperaste a fingir tu muerte, a regresar de ella, a que me casara, a que tuviera una hija... ¡Por Dios!
"Te golpeé, te insulté, me enojé contigo, e incluso así esperaste y seguiste mirándome de la misma manera".
—John, ni siquiera tú podrías cambiar eso. Supongo que a esto le llaman amor.
—Y amor verdadero. Porque el amor verdadero lo soporta todo y el amor verdadero espera —comentó poéticamente el rubio.
—Y sobrevive de papas fritas —finalizó el rizado, tomando un bocado más para luego posar su mano sobre la de su amado y a su vez sobre el hombro de la que ahora era hija de ambos.
ESTÁS LEYENDO
Johnlock Drabbles
FanfictionEllos resuelven crímenes; el doctor escribe en su blog de ello, el detective olvida sus pantalones y yo hago relatos cortos de este par.