One Shots CNCO

❥ Richard Camacho

-¡Richard, baja ya, que se hace tarde!- Justo hoy que es el día de la boda de uno de sus amigos le da por demorarse una eternidad.

-Ya, ya.- Me contestó en lo que bajaba- ¿Por qué tienes tanto afán?

-Pues porque se casa mi mejor amiga.- Respondí obvia.-A parte para Christopher también es un día muy especial.

-Bien, simplemente súbete en el auto.- Y empezamos otra vez.

-Creí que por lo menos por hoy ibas a dejar esa actitud conmigo.- Respondí molesta.-Mira Yashel, hoy se casan dos amigos nuestros, así que como mínimo no me trates como una basura.-Mi voz se empezó a cortar.-Si vas a terminar conmigo, no lo hagas aún. No quiero que Ema me vea mal en su día.

Y así fue que lo deje callado. Últimamente la actitud Richard no me tiene para nada feliz, me ignora, cuando me acerco a abrazarlo se aleja, simplemente esta tomando unas actitudes conmigo que solo me dejan pensar que me esta engañando y va a terminar conmigo.

Puede que sea histérica, pero la relación que tenían mis padres cuando era pequeña hace que mi imaginación salga a volar y no me deje estar tranquila, sabiendo que yo estuve presente en las peleas entre ellos dos y los motivos de estas siempre me hacían llorar.

Ya en la ceremonia, todos los amigos cercanos y familiares estábamos a punto de llorar. Me encontraba junto a la mamá de Ema y ambas hablábamos por lo bajito lo felices que nos sentíamos por ella, siempre tenía problemas con el amor, que llegara alguien y la hiciera sentir así de enamorada, nos llenaba el corazón.

Cuando la ceremonia terminó, después de que esos dos se comieran la boca cómo si no hubiera un mañana, nos dirigimos al salón donde iba a ser la celebración.

-¡Ema!- La llamé e instantáneamente llegó a donde estaba.-Te amo mucho estúpida, sabes que cuentas conmigo para todo.-Nos abrazamos y hablamos un rato.

-Vamos, voy a tirar el ramo.- Me tomó de la mano y gritó para que las demás mujeres fuéramos al centro del lugar.

Se paró de espaldas y empezó con la cuenta regresiva.-Uno.-Empezaron a alejarse un poco las demás chicas y no entendía.- Dos.- Ema se volteó para mirarme a los ojos.-Y tres.- Dejó el ramo en mis manos.-Se feliz.- Me susurró esas dos palabras para dejarme totalmente confundida. Hizo que diera la vuelta para así mirar hacia las mesas. Seguía sin entender hasta el momento en el que Richard apareció junto a Zabdiel, que estaba tocando los acordes de una canción que no reconocí.

-Sunrise with you on my chest
No blinds in the place where I live
Daybreak open your eyes.

Empezó a acercarse más a mi con una sonrisa hermosa que estaba haciendo que mis piernas temblaran y mi respiración empezara a acelerarse, porque a pesar de haber pasado ya varios años desde que me enamore de él, sigue teniendo en mi el mismo efecto de siempre

-Cause this was only ever meant to be for one night
Still, we're changing our minds here
Be yours, be my dear.

Tomó mi mano y empezamos a bailar lentamente, sentía que no había nadie más a mi alrededor. Estaba un poco incómoda así que solté el ramo que tenía en una mano para aferrarme bien a Rich.

-So close with you on my lips
Touch noses, feeling your breath.

Acercó nuestras caras tal y como se expresaba la canción, sentíamos todo lo que el otro hacía.

-Push your heart and pull away, yeah
Be my summer in a winter day love
I can't see one thing wrong
Between the both of us
Be mine, be mine, yeah
Anytime, anytime.

A penas terminó esa estrofa, se separó de mi cuerpo dejándome así con un vacio.

Se arrodilló e hizo la pregunta que tanto anhele toda mi vida:

-Sé que no soy el hombre perfecto, ni mucho menos el mejor novio, pero en estos años que llevamos juntos, he aprendido realmente lo que es el amor. Esas ganas de protegerte de cualquier peligro, ese deseo de tenerte a mi lado todo el tiempo, esa sensación de vacío en mi cuando te alejas de mi por alguna pelea. Simplemente me he dado cuenta de que el amor para mi, es querer darlo todo por esa persona, es necesitar verla bien para así poderte sentir tranquilo, y todo eso, es lo que me has hecho sentir tú.- Cada palabra que decía, me hacía derramar un mar de lágrimas, porque de verdad amo a este hombre, no se que haría sin su presencia.-Así que amor mío, ¿Quieres casarte conmigo?

-Cada experiencia, situación que vivimos juntos, me han hecho sentir que sin ti no voy a ser feliz, porque a pesar de que dicen que no es necesario tener a alguien a tu lado para ser feliz, pero para mi la felicidad no existiría sin ti.- Hice que se parara y me mirara a los ojos.-No sería feliz sin ti, así que sí, quiero casarme contigo.- Lo primero que el hizo fue besarme, pero no era como los besos que siempre solemos compartir, este beso estaba cargado de muchos sentimientos cada vez más verdaderos, porque por fin, vamos a dar inicio a una nueva etapa de nuestra vida, totalmente diferente a lo que ya hemos vivido, gracias a que de ahora en más no solo seremos novios, sino también prometidos, y aunque no hace mucha diferencia ante los ojos de los demás, para mi significa que una de las fechas más memorables de mi vida se va a acercar.

-Gracias por aceptarme totalmente en tu vida.- Dijo en mi oído a penas nos separamos.-Te amo.

-También te amo, y sabes que no me alcanzaran las palabras para agradecerte por todo lo que hiciste por mí.