Capítulo 96 - Nostalgia (Séptima Parte)

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Wei WuXian se dio cuenta de que se había estado mintiendo a sí mismo cuando se había prometido "sólo hacer algunas preguntas y no hacer nada más" antes de que Lan WangJi se hubiera emborrachado.

El hecho de que una persona tan disciplinada armara un alboroto, golpeara a la gente y se metiera en líos después de estar borracho, significaba que Lan WangJi no controlaba sus acciones. Y, a pesar de que Wei WuXian lo sabía, aún así aprovechó la fácil manipulación, provocándolo a propósito y llevándolo a hacer lo que quería.

No importaba cuán puro de corazón o despojado de deseos terrenales fuera Lan WangJi, igual era un hombre. Habiendo sido provocado tan crudamente, ¿cómo habría podido mantener la calma? Justo el día anterior, Lan WangJi había sido acusado y humillado por Jiang Cheng por cosas como esta, y ahora mismo seguía estando preocupado por su hermano. Aún así Wei WuXian tuvo que arruinar las cosas de esta manera…

Lan Wangi no dijo ni una palabra más después de "Mn". Mientras tanto, los pensamientos en la cabeza de Wei WuXian ya se habían disparado.

Nunca, en dos vidas, Wei WuXian había aprendido cómo se escribía la palabra "avergonzado", pero ahora mismo lo entendía mejor que nadie. Sus labios aún estaban calientes e hinchados. La viscosidad en la parte inferior de su vientre y entre sus piernas lo hacía querer desaparecer por una grieta en el suelo. Deseaba morir en ese mismo instante.

La situación actual también confirmaba la peor posibilidad que había especulado. Lan WangJi era bueno con él, sí, pero... Probablemente no era el tipo de “bueno” que había estado esperando.

No dispuesto a poner a Lan WangJi en una situación más incómoda, Wei WuXian se apresuró a ponerse su propia camisas y pantalón. Dándose una bofetada en el lado de la cabeza mientras se vestía, dijo con su tono habitual, fingiendo despreocupación, "Estás despierto. Ah, ya es hora de que me despierte yo también.”

Girándose, Lan WangJi le lanzó una mirada. Wei WuXian no se atrevió a adivinar qué emociones se encontraban detrás de esos ojos. Con dedos temblorosos, se puso la bata sobre sí mismo. Al ver esto, Lan WangJi se estiró después de un momento de silencio, como si tratara de ayudarlo a limpiar los fluidos en su cuerpo.

Wei WuXian soltó de inmediato, "¡¡¡No!!!"

La mano de Lan WangJi se detuvo en medio del aire, y luego se retiró.

Wei WuXian exhaló de alivio, murmurando, "No tienes que ayudarme. Puedo hacerlo yo sólo. No tienes que tocarme.”

Al parecer, Lan WangJi era el tipo de persona que aún se preocuparía por arruinar la apariencia de la otra persona incluso después de que algo como esto hubiera ocurrido entre ellos. Sin embargo, Wei WuXian ya estaba demasiado lleno de vergüenza para permitir que Lan WangJi lo ayudara a limpiarse. Agarrando la camiseta, Wei WuXian se limpió sin cuidado. Dejando el paño a un lado, dijo, "Ah, eh, Lan Zhan, probablemente los dos hemos bebido demasiado esta noche. Lo siento mucho."

Lan WangJi no dijo nada.

Poniéndose las botas, Wei WuXian continuó, "Pero no tienes que sentirte demasiado avergonzado. Um, este tipo de cosas entre hombres, ocasionalmente, es bastante normal. Tú… Por favor, no te lo tomes en serio.”

Lan WangJi lo miró con calma y repitió, "¿Normal?"

Su voz sonaba excepcionalmente tranquila.

Wei WuXian no se atrevió a responder. Lan WangJi continuó, "¿No tomármelo en serio?"

Originalmente, Wei WuXian creyó que preferiría que Lan WangJi pensara de él como cruel y libertino que dejar que Lan WangJi conociera sus verdaderos sentimientos y hacer que las cosas entre ellos fueran demasiado incómodas para mantener su amistad. Ahora, sin embargo, Wei WuXian lamentó profundamente no haber pensado un poco más antes de decir algo tan tonto. Su voz era baja cuando dijo, "... Lo siento.”

De repente, Lan WangJi se puso de pie y Wei WuXian comenzó a entrar en pánico. En ese momento, la propietaria corrió escaleras arriba y llamó a su puerta, preguntando, “¡Jóvenes Maestros, Jóvenes Maestros! ¿Ya están durmiendo?”

Lan WangJi rompió el contacto visual y miró hacia otro lado. Wei WuXian se apresuró a ponerse la otra bota y dijo, “¡Todavía no! No, espere, estamos durmiendo. Estaré listo en un momento una vez que tome una camisa.”

Sólo cuando Wei WuXian terminó de vestirse correctamente, Lan WangJi se acercó para abrir la puerta. Wei WuXian preguntó, "¿Qué pasa?"

De pie en el pasillo, la dueña sonrió y dijo, "Lamento molestar su descanso a estas horas de la noche, espero que no les importe, pero no tuve otra opción. Hace un momento, el huésped de debajo de su habitación se quejaba de que goteaba agua en su habitación. Estaba preocupada de que hubiera una fuga en su habitación, así que quería venir a echar un vistazo..." Asomando la cabeza hacia la habitación, exclamó, sorprendida, "¿Q-Q-Q-Qué pasó aquí?"

Rascándose la barbilla, Wei WuXian dijo, "Yo debería ser quien se disculpe. Lo siento mucho, señora. Bebí demasiado antes y estaba fuera de control. Quería bañarme y luego rompí la bañera cuando me alteré demasiado. Realmente lo siento. Le pagaré.” Sólo recordó después de haber hablado que estaba en la más absoluta pobreza. Lan WangJi era el único que había cubierto todos sus gastos a lo largo de todo su viaje. Cuando se trataba de pagar por los daños, la responsabilidad aún recaería sobre Lan WangJi.

Aunque la propietaria decía una y otra vez "está bien" y “no se preocupen”, su expresión era bastante dolorosa. Al entrar a la habitación, preguntó, "¿Pero cómo se filtró el agua?... Ahora apenas se puede poner un pie aquí dentro..." Inclinándose, recogió algunos cojines del suelo y exclamó nuevamente, "¡¿Por qué hay un agujero aquí?!”

Era el agujero que Lan WangJi había hecho con Bichen. Poniendo la mano en su cabello desarreglado, Wei WuXian sólo pudo continuar diciendo, "Ah, eso también fue mi culpa. Estaba jugando con la espada antes y la estaba tirando, y... "

Ni siquiera terminó su oración antes de que Lan WangJi recogiera la bolsa de monedas del suelo y dejara caer algunas piezas de plata sobre la mesa. La expresión de la propietaria se relajó al instante. Aún así, se aferró al lugar sobre su corazón y no pudo evitar agregar, "Joven Maestro, no es que le esté diciendo lo que debe hacer, pero una espada es una cosa muy peligrosa. ¿Cómo puedes tirarla por diversión? Hacer un agujero en la alfombra y el piso no es gran cosa. ¿Y si hubiese herido a alguien?”

Wei WuXian estuvo de acuerdo, "Sí, sí, tiene razón, señora.”

Tomando el dinero, la propietaria dijo, "Entonces eso está resuelto. Ya es bastante tarde, así que, ¿por qué no descansan primero? Buscaré otra habitación para ustedes y la arreglaré mañana por la mañana.”

Wei WuXian respondió, "Claro, gracias, perdón por los problemas... ¡Espere! ¿Podríamos tener dos habitaciones?”

La propietaria se sorprendió, “¿Por qué necesitan dos habitaciones ahora?"

Wei WuXian no se atrevió a mirar a Lan WangJi. Rrespondió en voz baja, "... Siempre me pongo bastante salvaje cuando me emborracho. Ha visto cómo puedo ser, rompiendo cosas y jugando con espadas. Temo poder lastimar a otras personas.”

La propietaria estuvo de acuerdo, "¡Eso es cierto!"

Y después fue a buscar dos habitaciones para ellos. Una vez que se resolvieron los nuevos arreglos, volvió a bajar las escaleras sosteniendo los dobladillos de su vestido en sus manos. Después de darle las gracias, Wei WuXian abrió la puerta de su habitación. Al volverse, vio a Lan WangJi, de pie en medio del corredor con la cabeza baja, sosteniendo a Bichen con una mano y la cinta de la frente con la otra en silencio.

Wei WuXian había planeado ir a su habitación para esconderse de inmediato, pero la imagen de Lan WangJi hizo que sus pies se volvieran pesados. Después de un momento de reflexión, dijo con cuidado y seriedad, "Lan Zhan. Siento mucho lo que pasó esta noche.”

Un momento de silencio más tarde, Lan WangJi respondió en voz baja, "No es necesario que me digas esa palabra.”

Después de que se aseguró correctamente la cinta en su frente, Lan WangJi fue una vez más el HanGuang-Jun apropiado y disciplinado de siempre. Con un ligero asentimiento de su cabeza, dijo, “Descansa bien. Discutiremos los planes para el Templo de Guanyin y Lanling mañana.”

Al escuchar esto, el corazón de Wei WuXian se aligeró una fracción. Por lo menos, todavía había algo esperando para ser discutido mañana. Sonriendo, Wei WuXian dijo, "Mmm. Igual para ti. Descansa bien, vamos a comentar más mañana.”

Amor Eterno IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora