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Ashton

No esperaba eso, no esperaba esa declaración y menos quedarme callado cual idiota.

Amaranta al ver que yo no respondía ni con algo positivo ni con algo negativo solo se levantó y siguió el camino al departamento mientras que yo como idiota me quedé sentado aún shockeado.

Llego al departamento y no la veo en la sala así que voy a su puerta y me debato entre tocar o solo entrar. Decido tocar.

—Mara. —Llamo al tocar la puerta. Silencio. —Linda. —Vuelvo a llamar.

—Pasa bobo.—Dice del otro lado. Ella siempre tan linda.

Entro y está tirada boca abajo en su cama. Hago lo que suelo hacer cuando está así y me le tiro encima.

—Quita gordo.

—No estoy gordo. —Ruedo los ojos ya que siempre me lo dice, se que es en broma. —Solo estoy... llenito de amor, si. —Digo y ella ríe. Me gusta su risa.

—Tu amor pesa.

—Entonces es mucho amor el que tengo para dar.

—Creo que yo no tengo amor entonces. —Comenta pensativa provocando que ría.

—Boba.

Le doy un beso en la mejilla y me acuesto al lado de ella de la misma forma en cómo está. La miro y ella igual a mi.

Amaranta estira su mano y empieza a picar con su dedo mi mejilla.

—Tu igual me gustas, linda.

Ella deja de picar mi mejilla y ahora su mano solo queda sobre esta mientras ella solo me mira sorprendida, creo que no se lo esperaba.

Poco a poco va apareciendo una linda sonrisa en su cara y ahora su mano acaricia mi mejilla de forma delicada.

—Eres lento.

—Querrás decir lindo.

—No, me refiero a que eres lento. —Afirma moviendo su cabeza y sonríe divertida.

Puede que sí sea solo un poquito lento, vamos no esperaba gustarle, quizás si esperaba gustarle pero no pensé que si fuera a suceder. Ella es tan ella y yo tan yo.

No sé, solo pensé que le gustaría el modelito.

—¿Estás seguro? —Pregunta y quita la mano de mi cara para luego voltearse boca arriba.

—¿Seguro de que?

—De que te gusto, no quiero que lo digas por compromiso o por temor a dañar la amistad. —Explica sin mirarme.

Me muevo y me pongo encima de ella colocando mis brazos a cada lado de su cabeza y la miro.

—Estoy muy seguro, todo lo que dije el otro día sobre saber cuándo te gusta alguien lo dije pensando en ti, porque así me siento cuando estoy contigo, porque contigo puedo ser el verdadero yo sin temer a que me juzgues, porque me siento cómodo contigo y cuando no estás siento que me falta una parte de mi.

》Porque siempre quiero verte feliz y sonriendo, quiero verte cuando cantas y bailas así no lo hagas bien, quiero ver cómo haces pereza, tu cabello despeinado por la mañana, cuando haces tus tiernos pucheros, cuando sacudes tu cabello queriendo parecer egocéntrica.

》Estoy muy seguro de que me gustas y me gusta todo de ti Amaranta. —Termino de decir sin despegar la mirada de la de ella, siento nervios en este momento pero por fin le dije lo que siento.

Amaranta sonríe de forma dulce y con sus manos coge mi cara y me besa de una forma tierna que no me demoro en seguir.

El chico del ascensor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora