#3: Sufrir, por separado

3.8K 466 260
                                    

Maratón 1/?

«Un año más tarde...»

Jugué con mis dedos nerviosamente y miré por la ventana, un tanto aburrido por el ambiente de tensión de aquel automóvil.

Ya había pasado lo más difícil de mi año. Había tenido más sesiones de fotos, varias revistas tenían mi rostro en sus portadas. Tenía novio, era guapo y famoso, lo que se esperaba de un modelo como yo ¿no? Y en último y desagradable lugar: había desfilado en traje de baño.

Qué vergüenza pasé ese día. Agradecía mentalmente que en ese entonces todavía no tenía novio, eso habría sido bastante incómodo.

Bueno, dudaba que hubiera sido más incómodo del cómo íbamos en ese auto. Mi novio iba a mi lado, mirando por la ventana, suspirando reiteradamente y, básicamente, evitándome hasta desfallecer.

Aunque yo iba en igual situación que él, o peor.

Su nombre era Mark Tuan. Era un lindo nombre, para un lindo chico. Pero qué fastidio me resultaba pasar tiempo con él algunas veces. No era precisamente el chico de ensueño, pero era mi novio después de todo.

Aunque prefería casarme con un simio antes que pasar un segundo más con él.

Mark era jodidamente... ¿aburrido? Ni siquiera sabía cómo expresar lo que pensaba acerca de él, no lo conocía lo suficiente todavía. Claro, llevábamos unos cuantos meses saliendo pero la mayoría del tiempo yo estaba en mi trabajo y él en el suyo.

Ugh, mi vida de modelo llegaba a apestar a veces. ¡No conocía ni a mi propio novio!

—Ya estamos por llegar —dijo Mark volteando a verme y posando una de sus manos en mi hombro.

No jodan, ese gesto lo usó mi abuelo para conquistar a mi abuela o algo. No besos, no abrazos, no gestos de ternura; parecíamos simplemente pantalla o algo por el estilo.

Aunque básicamente eso éramos. Pantalla, propaganda, publicidad, como quieran llamarlo.

—¿Estás nervioso? —me preguntó él esbozando una pequeña sonrisa.

Me encogí de hombros.

—No mu... —iba a responder cuando él me interrumpió.

—Yo estoy un tanto nervioso, es una entrevista para ambos, ¿qué diremos? Ugh, recuerda fingir amor por mí un momento —dijo con las palabras atropelladas, volteando a ver nuevamente por la ventana y dejándome no por primera vez con la palabra en la boca.

Él nunca escuchaba. Nunca. ¡NUNCA! Me sacaba de quicio la mayoría de las veces, la última vez que él y yo fuimos felices fue...

Empecé a contar mentalmente todos los meses que pasamos juntos.

Sí, cuando nos conocimos. Fue el día más hermoso de mi vida, él era mi último paso para ser un modelo famosísimo.

El día siguiente fue cuando me empecé a lamentar de haberlo conocido. Mundo cruel que me hace sufrir con un chico creído, arrogante, fastidioso, serio... Lo odiaba.

Pero era mi novio y lo amaba.

Qué irónico era eso.

—Llegamos —dijo él con una sonrisa en el rostro, para después bajar del auto y...

Pero claro, él era la clase de chico que nunca le abriría la puerta a su novio, ni puerta del carro ni puerta de entrada principal ni nada.

Era tan poco preocupado, no era romántico, era vacío. Eso. Vacío, nada, un holograma tenía más sentimientos que él, una planta era más dulce que él.

volando alto (VCEN2) •• n.jDonde viven las historias. Descúbrelo ahora