¡DEVUÉLVEME A MI NOVIO!

02.

La noche anterior no había podido dormir absolutamente nada porque debía terminar un trabajo que se entregaba el día de hoy, salí de mi casa sin desayunar y con unas ojeras más grandes que mis ganas de mantenerme despierto.

En cuanto llegue a la universidad lo primero que hice fue recorrer todo el pasillo hasta llegar a la cafetería, la cual a mi suerte, se encontraba abierta a tales horas.

Pedí café oscuro y me lo fui a beber en una de las mesitas que se encontraban en el lugar, pero cuando fui a girar sobre mi cuerpo me encontré con la sorpresa de que Lee Mark estaba detrás de mi observando la lista de precios de los alimentos.

— Oh, lo lamento tanto, ¿Se derramó? — Pregunté preocupado.

— No fue así, no tienes que preocuparte. — Dijo con una sonrisa.

Me retire de ese lugar y me senté para disfrutar de mi café, el cual se encontraba un tanto amargo.

— ¿Te molesta si me siento contigo? — Preguntó mirándome a los ojos.

Observe el lugar y definitivamente se encontraba desolado, por lo que terminé aceptando un tanto nervioso, porque vamos, ¡Es el ex de mi mejor amiga!, ¿Qué preguntas incómodas me haría?, y lo peor es, ¿Cómo tendría que contestarlas?

— Me imagino que fuiste la primera persona en enterarte. — Dijo en cuanto se sentó.

— ¿Qué?, oh, si si, así fue... Lo lamento mucho. — Ugh, odiaba rotundamente cuando me preguntaban sobre un asunto en el que yo soy tan solo un tercero.

— No tienes por qué, fue lo mejor, ahora sé que clase de persona es ella, igual a todas.

— ¿Disculpa? — No lo entendía para nada, además de que sus palabras fueron más para el mismo que para mi.

— No es nada, dime, ¿Qué haces aquí tan temprano? — Preguntó evadiendo el tema.

— No me percaté de que era tan temprano y bueno... — Respondí sincero.

— ¿Y esas ojeras?, ¿No pudiste dormir anoche?

— No... Dejé un trabajo atrasado y tuve que terminarlo rápidamente.

Él tan solo asintió y le dió un sorbo al jugo que había comprado.

— Creo que debo retirarme, las personas empezaran a llegar y seguro tu amiga llegara buscándote — Dijo refiriéndose a Yerim — Que tengas un buen día.

— Gracias, igualmente.

Y tal como dijo Mark, las personas no tardaron en aparecer, el silencio que abundaba fue destruido en cuestión de segundos, harto de escuchar chismes de personas que ni conocía, me levanté y fui a mi salón.

En el pasillo me encontré con unas chicas, las cuales se acercaron a mi preguntando sobre si era cierto que Yerim y Mark se habían separado, un poco incómodo tuve que responder que si, que era cierto, como respuesta recibí unos chillidos de felicidad, haciéndome recordar como había actuado Yerim al enterarse de la misma noticia, solo que lo que cambiaba era que ella no era la ex, si no la futura aspirante que conquistaría a Mark.

Lo cual obviamente logró y derrochó a la basura, entonces una rabia inmensa se apodero de mi cuerpo, las personas realmente podían llegar a ser malvadas y sin un poco de corazón.

¿Terminar con tu novio porque la tiene pequeña?, vamos, es improbable que Mark tenga un micropene de 5 cm, el muy bien sabía que Yerim podía soportar uno de mínimo 10 cm, ¿Qué tan grave podría ser el de Mark?

...

Frustrado por las ganas que cada vez iban de menor a mayor se dirigió al baño para poder expulsar el café que había bebido con anterioridad.

Y por casualidades de la vida Lee Mark se encontraba en el urinario haciendo lo que todo hombre va a hacer en ese lugar, silenciosamente se acercó y le dio una pequeña mirada.

— ¡Wow!, ¡Pero eso no es pequeño! — Exclamó Donghyuck — ¡Maldición!, soy un idiota...

Donghyuck como siempre pensando en voz alta, queriendo hacerse una bola chiquita y ser aplastado por cualquier persona, alterado se dirigió a la puerta.

— ¡Oye no!, no no no, debes detenerte. — Dijo Mark un tanto alterado.

— Lamento llegar de la nada y hacer un alboroto.

— Sé que sabes la razón por la que Yerim cortó conmigo y ahora quieres explicaciones.

— No, no deseo oír explicaciones, solo quiero irme a ver mis clases.

— Tienes que escucharme Donghyuck, no puedes hablar de esto con nadie, eso incluye a Yerim, puedes arruinar mis planes.

— ¿Qué?, ¿Qué planes?

— ¿Puedes esperarme en la salida en cuanto acabes clases?, te lo contaré todo, pero por favor, no se lo menciones a Yerim. — Pidió Mark a Donghyuck con tono de súplica.

— Oye, tranquilo, estaré ahí. — Contestó Donghyuck con una sonrisa.