Preserved Roses [EDITANDO] [Yoonmin🍑윤민]

🌒C A P Í T U L O 6

Capítulo 6: El jardín de las rosas

Después de haber tocado un par de canciones, Jimin aplaudió muy bajito.

—Gracias, Yoon-YoonGi.

—No hay de que, Jimin.

Deje mi guitarra a un lado, la directora había salido hace unos 3 minutos para contestar una llamada importante; así que estábamos solos los dos en el salón de música, no iba a seguir tocando porque note que Jimin empezaba a sentir molestias en sus oídos.

Debería investigar sobre su trastorno, para estar preparado de no cometer algún error.

Valoro mi vida.

Me acerque a la ventana para ver el cielo, debo admitir que el clima lluvioso de Inglaterra me gustaba, por donde vivía hacía mucho calor y no soy capaz de soportarlo, así que este clima frío y húmedo era bastante bueno para mí.

Hasta daban ganas de salir y ser bañado por la lluvia, pero no quería enfermarme, no cuando estoy tan lejos de mi hogar.

—Yoon-YoonGi... ¿P-p-por qué c-cantas y t-tocas la g-g-guitarra?

Lo mire, no me había dado cuenta de que se había acercado a mí.

—Oh, cuando cumplí 8 años me llevaron al concierto de un artista indie, desde ahí me gustó mucho la música y el canto, a los meses me inscribieron a clases de guitarra.

Asintió levemente mientras jugaba con sus manitas.

—C-cantas muy l-l-lindo.

Sentí mis mejillas ponerse rojas ante su cumplido, una sonrisa quiso salir de mí, pero mire hacía la ventana como una forma de que no lo notará, aunque claro, Jimin nunca me veía a la cara.

—Gracias —respondí nervioso—. ¿A ti te gusta algo?

Dio un brinquito de felicidad.

—M-me g-gustan los libros de t-tiburones y o-orcas —explico feliz—, las t-tortugas, los d-d-delfines y t-también la Belluga. ¿S-sabías que l-las belugas v-viven de 35 a 50 años y q-que son la e-especie más p-pequeña de las b-ballenas?

Me sorprendí por la información que me estaba dando.

—No lo sabía.

—T-t-también las belugas v-v-viven en aguas de l-las costas d-del océano Ártico, p-pero migran c-cuando se c-congela el a-a-agua.

Me recargue en la pared para así escucharlo con atención.

—S-son a-a-animales que cazan, p-por eso pueden e-estar en a-agua dulce y a-agua s-salada.

La puerta del salón fue abierta provocando que Jimin guardara silencio, la directora entro con una sonrisa apenada.

—Perdón, ya debemos irnos, Jimin si sigue hablando no parará hasta que te diga la información completa de los tiburones.

—No se preocupe, me gusta escucharlo —conteste rápidamente.

La directora me miro sorprendida ante ello; supongo que es usual que nadie quiera escuchar a Jimin, pero en mi caso se me hacía agradable oír su voz, más con ese toque de emoción que me estaba mostrando momentos antes.

Me dio las gracias por ello, aunque insistió en llevarse a Jimin, ya que debían salir; no me negué y deje que se fueran, pero el castaño solo abulto sus labios y se acercó a su madre, le dije que no se preocupara que mañana podía oírlo hablar sobre lo que quisiera mientras estábamos en el salón de música.