No Soy Una Chica Normal (Peter Parker Y Tu)

TENEMOS - UN - PROBLEMA

Pocos segundos pasaron, cuando por fin decidí abrir los ojos. La imagen borrosa poco a poco se fue aclarando y por fin la pude ver.

Natasha Norman.

Natasha Norman estaba delante mío con cara de terror y probablemente sorpresa y claro, la mía no iba a ser diferente.

Ladeé mis ojos y pude ver al Señor Stark viéndonos atentos y asustado, con un taco en su mano derecha, parecía que no se esperaba esto.

...

Después de la sorpresa que los tres nos llevamos, Natasha salió sin más y el silencio invadió la habitación por completo.

-¿Cómo pasó?- Stark preguntó acercándose a mí y tocándome el hombro.

《NATASHA NORMAN》

Demonios, si que el mundo me lleva por la culata. Al ver a Peter enfrente mío y darme cuenta que todo este tiempo he estado junto a mi enamorado el pánico me invadió. ¿Qué se supone que iba a hacer? Le dije todo lo que hice con el y realmente espero que no sea lo suficientemente inteligente como para saber que estaba hablando de él.

Estaba en la cocina tragando mis problemas. Literalmente.

Pude escuchar como la puerta de la cocina y luego de la nevera se abrían volteé de reojo y ví una sombra acercarse a mí, seguí mis instintos y me volteé completamente dando un buen derechazo al sujeto.

-¿Qué mierda?- Parker se encontraba en el suelo tocando su nariz que se desangraba.

-¡Parker! Lo-Lo siento, no sabía que eras tú. Yo t-te voy a trer hielo- nerviosa levanté a Peter del suelo colocando su brazo detrás de mi cuello llevándolo a una silla.

-No te preocupes, fue mi culpa por no hablar- habló por fin Peter agarrando el hielo que le había dado, colocandolo en su nariz roja.

-¿C-Cómo no me dí cuenta?- le pregunté.

-¿Qué cosa?- volvió a cuestionar.

-De que eras Spider-Man- lo miré. -Era tan obvio...-

-Bueno, no te diste cuenta hasta que me viste.- me respondió él más tranquilo.

-Cuando te encontré atrás de la preparatoria, Estabas esperando a Stark, ¿no?- y es que ahora que lo relacionaba todo, tenía sentido.

-Efectivamente- asentía él.

-¿Cómo es que no estás tan sorprendido como yo?- le dije incrédula, el tenía un aura relajada mientras yo temblaba y sentía que tarde o temprano mojaría mi traje.

-No es para tanto- volvió a decir.

-¿¡No es para tanto?!- pregunté en un tono más fuerte.

-¿Por qué es tan importante para tí, Nat?- preguntó este parándose de la silla donde estaba dejando el hielo a un lado y comenzando a acercarse a mí.

-P-porque...- no sabía que decir.

-¿Es porque te gusto?- Soltó de repente Parker acercándose más a mí, no me esperaba tal cosa de él, pero era verdad, era por eso.

-¿Tan alimentado tienes tu ego?- trataba de sonar más tranquila y mantener mi humor como siempre.

-Oh vamos Norman...- En este punto tenía sus manos a los lados de la mesa en donde me encontraba sentada, su rostro estaba más cerca que nunca del mío, cosa que hacía a mi corazón estallar.

-Aléjate- Dije casi en susurro, su cercanía me debilitaba mucho. Miré a su rostro y pude ver el leve sonrojo que tenia en sus mejillas, miréa sus ojos y estos miraban a mis labios, desvié la mirada a los suyos, los relamió mandándome una corriente por toda la espalda. Ahora, sin pena ni remordimiento alguno corté la distancia en un beso, un beso que tomó de sorpresa a ambos, al parecer aquel acto no molestó a Peter ya que segundos después abrió levemente sus labios, sin perder paso coloqué mi mano atrás de su cuello intensificando el beso.

Terminé el beso y al separarme el rostro de Peter había intensificado el sonrojo provocandome una leve sonrisa, se mira jodidamente tierno.

-Vaya- Exclamó después de un rato Peter.

-Nada mal Spidey- le dije con humor.

-No dejarás de llamarme así, ¿Cierto?- dijo. -Y lo sé, nadie se resiste a Peter Parker.

-Lo dice el que admira a Liz Allan cada receso con Ned y ni siquiera se atreve a dirigirle la palabra- Hablé. -Y no, no voy a dejar de llamarte así- respondí con Gracia.

-¡Chicos!- interrumpió Stark, llamando la atención de ambos.-Tenemos un problema...