Capitulo 42. Perdoname

10 1 1
                                    


¿Porque de toda la gente, siempre fue él a quien le mostraba mi lado más vulnerable? -Ace...- dije sollozando y entonces simplemente me aferré a él que estaba hincado enfrente de mi -lo siento, lo siento tanto. Nunca quise decir nada de lo que dije ese día, pero, tenía miedo de que ya no quisieras estar cerca de mi, que te alejaras, que me odiaras, que te asustaras al ver la clase de persona que era en realidad- había guardado todo eso por 3 años, ya no podía seguir así -no merezco la vida que tengo, no merezco ser perdonada, yo... ¡quisiera estar muerta!- dije elevando la voz

-¡Aileen!- dijo elevando también su voz mientras me tomaba de los hombros -no quiero oírte hablar así de ti, yo... en ningún momento te odié-

-¿Que...?- dije confundida

-Sin importar lo que hiciera o el tiempo que pasaba, nunca pude olvidarte- dijo bajando la cabeza -a pesar de todo fuiste la primera persona con la que pude ser yo mismo, la única con la que me sentía normal; aún así, en ese tiempo sentía que todo lo que decían de ti era mi culpa y no sabía que hacer, sólo dejé que toda esa presión cayera sobre ti y por eso me me dolió cuando dijiste que ya no querías ser mi amiga, porque debí ayudarte en ese entonces y fallé- ya no quería que continuara así que negué con la cabeza y lo empujé para alejarme de el, encontrándonos ambos en el suelo -¿Aileen?-

-¡No lo hagas!- dije elevando la voz

-¿Que, hacer que?- preguntó confundido

-¡Deja de ser tan amable, me haces sentir peor!-

-¿¡De que estás hablando!?- preguntó elevando la voz también

-¿¡Cómo puedes actuar así!?- pregunté -¡te mentí, te dije cosas horribles, dije que no quería volver a verte!-

-¡Yo también te dije cosas horribles!- respondió -¡dije que tampoco quería volver a verte, y además te dejé encargarte sola de un problema que ocurrió por culpa mía!, ¿¡cómo puedes seguir pensando que soy alguien amable!?-

-¡Porque tú nunca le hiciste daño a nadie!- respondí -...yo si- se quedó sin hablar mirándome dudoso, después bajé la mirada -porque no pude controlarme Maddie salió herida, e Evie también- comencé a temblar -tenía miedo; no, incluso ahora tengo miedo, de volver a poner un pie en la pista, de volver a lastimar a alguien, de perder a toda la gente que me importa, no importa cuánto lo intente soy incapaz de proteger algo... sólo soy un demonio-

-¿Y un demonio sólo sabe causar daño?- me preguntó calmado, se puso de pie y luego me ayudó a levantarme -Aileen, no nos hemos visto en años, y creí que en el momento en que volviera a verte te gritaría y trazaría una línea entre nosotros; pero no fue así, justo ahora sólo quiero que nos olvidemos de ese día y vuelvas a ser mi amiga, ¿crees poder hacerlo?-

-Yo...- decía -no creo que podamos volver a esos días, pero... si creo que podemos empezar de nuevo-

-... Yo también- dijo sonriendo levemente -vamos, te acompañare a tu casa- entonces nos pusimos a caminar

-Por cierto... ¿cómo sabías que estaba aquí?- le pregunté

-¿Eh?, bueno pues, yo... yo estaba... estaba...- decía nervioso, hasta que soltó un suspiro -hah... te ví salir de la tienda, y cómo te notaba algo extraña puede... que te siguiera para ver si estabas bien- dijo apenado mientras pasaba la mano por su nuca -luego ví como caías de rodillas y volteabas a ver el piso, así que cuando gritaste me acerqué para ver que te pasaba-

-Ace...- no sabía si sentirme feliz o preocupada

-N-no es lo que crees, lo juro- dijo nervioso -sólo, creí qué te sentías mal, es todo-

Sombras del pasadoWhere stories live. Discover now