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La chica rubia en si era hermosa, su cuerpo pequeño y delicado logró llamar mí atención. Junto con la chica castaña las dos me miraron y solo me pasaron por alto, al parecer no les interesaba mucho mi presencia. Había supuesto que se dirigían al patio trasero.
-¡Rosie!- se escuchó la voz de una de las chicas gritar.
Me había levantado de mi lugar y me dirigía hacia las grandes puertas de la mansión de Louis, pero al parecer alguien tenía la misma idea que yo.
-Perdón, no te vi- dije al ver que la joven rubia iba a abrir la puerta antes que yo. Por cortesía le había abierto la puerta dándole paso primero a ella.
-Gracias...- dijo esperando mi respuesta mientras entraba por las grandes puertas.
-Clementine- respondí rápidamente entrando a la mansión después de que ella lo había hecho antes que yo.
-Gracias, Clementine- dijo quitando importancia a la pequeña conversación que teníamos. Una vez dentro escuché las pisadas ruidosas de alguien que venía hacia acá.
-Mira a quiénes tenemos aquí- dijo Louis llegando enfrente mío y de la chica rubia que aún no sabía su nombre.
-Hola Louis- dijo la joven rubia.
-Hola Violet, veo que ya viste a mi amiga Clem. No sé si esta basura se presentó, pero por si al caso ella es Clementine Everett. Repito, es mi amiga- dijo Louis pasando su brazo por mis hombros.
-¿Amiga? Juré que dirías que ella es tu novia- dijo la rubia. Louis se soltó a carcajadas, entendía por qué lo hizo. Inevitablemente se me escaparon unas pequeñas risas, la única que al parecer no entendía era la chica rubia que si no había escuchado mal su nombre era Violet.
-No, no, eso no sería posible ni en un millón de años. Tenemos nuestras razones por las cuáles no somos pareja, si esas razones no existieran quizá y solo así podría haber algo entre nosotros- era evidente que por mí condición y mis preferencias sexuales no éramos pareja, por suerte me gustan las chicas, pues sería algo… raro e incómodo ser pareja de un chico estando yo con mi condición.
-A veces pienso que eres gay Louis, no has tenido novia desde hace.. bueno, nunca has tenido- dijo la chica cruzándose de brazos. Yo sin embargo luchaba por no reírme pero era inútil. Al ver cómo Louis se había quedado callado decidí hablar.
-Louis, ¿No lo eres o si?- pregunté llamando la atención de ambos.
-No- negó rápidamente- Vengan acá arriba con los demás- dijo Louis dirigiéndose a las escaleras que estaban directamente frente a la puerta.
-Eso fue raro- dijo la chica rubia siguiendo a Louis quien había subido rápidamente las escaleras, o eso creía, pues se habían escuchado muy fuertes las pisadas.
Antes de subir completamente las escaleras había escuchado como abrieron la puerta y la misma chica castaña de antes aparecía por esta. Ella rápidamente subía los escalones hasta llegar al lado mío, pues la chica rubia me imaginaba que ya había subido las escaleras las cuales eran enormes.
-Hola- me dijo una vez que ya se encontraba al lado mío- ¿Eres amiga de Louis, cierto?- antes que hubiese podido decir algo al respecto ella habló antes- Soy Brody, Brody Burress- dijo extendiéndome la mano junto con una sonrisa en su rostro.
-Clementine Everett- dije estrechando la mano con ella a la vez que terminábamos de subir las escaleras para habernos encontrado con un pasillo de habitaciones. Obviamente habíamos abierto la puerta de la habitación de Louis encontrándonos con el grupo de chicos que estaban sentados en el piso escuchando a Louis quien hablaba animadamente.

………..

Al final terminé quedándome más tiempo del que tenía planeado, resultaba que los amigos de Louis eran muy agradables y fácilmente había podido conversar con ellos.
Los días pasaron rápidamente y cada vez quedaba menos tiempo para mandar una solicitud de inscripción a una universidad, ya tenía claro en cuál sería, ni más ni menos que Savannah State University, la misma en la que había estudiado Louis en ese entonces.
Tres días después..
-¡Clementine!- había escuchado los gritos de Louis que me llamaba desde el segundo piso.
-¡Ya voy!- dije, pues estaba desayunando.
-¡Ven ya!- tuve que dejar de desayunar por ir con el estúpido de Louis.
Me levanté de la silla del comedor y me había dirigido a las escaleras. Cuando subí y había abierto la puerta de su habitación encontré a un Louis en pijama sentado en su cama enfrente de una portátil con una sonrisa de idiota.
-¿Qué pasa, tarado? Por tú culpa dejé mi desayuno- dije con cierta molestia en mi voz.
-¡Te aceptaron en la universidad!- dijo levantando la mirada del portátil hacia mí con una sonrisa mostrando sus dientes.
-Es imposible- dije acercándome a él para sentarme a un lado suyo- Louis, será mejor que dejes tus bromas de un lado porque….- mis palabras se habían apagado al momento en que Louis había girado la portátil a mi vista dejándome ver que si, era cierto, me habían aceptado- Imposible… Louis, me aceptaron, ¡Estoy inscrita!- dije con emoción zarandeándolo un poco.
-Si, estas inscrita, que emoción- dijo con la más mínima emoción en su voz- Ahora también tendré que soportarte en la escuela- dijo cruzándose de brazos con un puchero.
-Idiota- dije golpeándolo en el brazo, golpe el cual me regresó y había comenzado una pequeña guerra.

Pov’s Violet.
Estaba recostada en mi cama mientras veía la portátil, hasta que había una notificación en la parte baja de la derecha de la pantalla. La abrí y resultó que era un correo, donde claramente decía que mi solicitud de inscripción era aceptada. Inevitablemente había saltado de la alegría. Solo quedaba esperar a que pasara el tiempo.

2 semanas después..

-¡Violet! ¡Es hora de irnos!- gritó Brody.
Me había dirigido a la puerta dónde Brody me esperaba impacientemente.
-No puede ser, es el primer día y ya llegamos tarde- dijo Brody quejándose, mientras se dirigía al auto. Una vez que las dos estábamos dentro arrancó.
-Tranquilízate Brody, no llegaremos tarde. ¿Tu madre también es así…? ¿Delgada y nerviosa?- dije con una pequeña sonrisa. La vi dudar un poco.
-Mmm… sí- dijo con una ligerísima sonrisa.

A los pocos minutos ya estábamos en la escuela, y si, habíamos llegado tarde, pero por suerte nos habían dejado entrar a la primera clase que era de Inglés, por suerte esta clase me tocaba con Brody.
-Tenemos una alumna nueva el día de hoy. Señorita preséntese por favor- me había indicado la maestra.
-Bueno.. Mi nombre es Violet Adlon, y yo…- mis ojos miraban a todos en la clase, pero se habían centrado en una chica en especial. Ese día me había quedado atónita al verla, lo único que me pregunté fue el por qué de mi reacción. Ella estaba muy concentrada en un libro, parecía que no me notaba.
Rápidamente había sacado esos pensamientos de mi cabeza al momento en que ella levantó su vista hacía mí, también porque la maestra esperaba que yo continuara.
-Lo entendemos, Violet, quizá estás nerviosa. Anda, puedes sentarte- dijo mientras caminaba hacia su escritorio. Me dirigí a la banca que estaba vacía a un lado de Brody, esta se ubicaba al lado derecho del salón, junto una ventana.

-Violet, ¿Estás bien? Vi los procesadores en tu cabeza- dijo riéndose un poco.
-Ja ja, que chistosita- dije riendo sarcásticamente. Había dejado mi mochila a la izquierda de mis pies.
-Entonces, ¿Qué te pasó? Todos nos quedamos extrañados- dijo con curiosidad en sus ojos.
-Brody, mira allá, a la esquina del lado izquierdo del salón- esta volteó, pero se volvió hacia mí encogiéndose de hombros.
-Nada Vi. Solo está Fairbancks, la hermana de Greg- dijo con una expresión de desagrado.
-Idiota, la parte de atrás del salón- esta volteó nuevamente y se había quedado sorprendida.
-¿Es la chica del otro día?- preguntó ella.
-Eso creo, ¿Qué hace aquí?- pregunté viendo hacia la morena.
-¿Estudiando?- dijo Brody mirándome a mi.
-No pregunté para que me dieras la respuesta idiota, sino la correcta- dije regañándola un poco.
-Nunca la había visto aquí, creo que también es nueva- dijo mirando a la chica.
-¿Será por Louis?- dije volteando a ver a la morena otra vez.
-No creo, nos dejó muy en claro a todos que es solo su amiga. De hecho bastante- dijo sacando de la mochila el libro de Inglés que nos había pedido la maestra ese día.
-Si, a veces creo que Louis es gay, no ha tenido novia desde… bueno nunca de hecho- dije imitando las acciones de mi compañera que estaba a mi lado derecho.
-Anda que tú tampoco has presentado a un novio, siempre dices que nunca te sientes "completa" con cada chico que sales- dijo burlonamente abriendo el libro en la página asignada.
-Es la verdad, ya llegará el indicado- dije apenada, abriendo el libro.
-Lo que digas Vi. No puedes negar lo inevitable, no solo por lo que paso hace un tiempo- dijo prestando completamente su atención ahora a la maestra.
-Brody, no…- decidí callarme y mejor poner atención a la maestra, no quería tocar ese tema.

Pov's Clementine.
No podía ser ella, ¿Era ella? Si, definitivamente si, era la chica del otro día que me vi obligada a conocer por Louis. Aunque siempre puede haber alguien parecido, ¿No? Quizá no era ella y era otra chica.
A quien engaño, era ella, pero, ¿Por qué le daba tanta importancia? Si era sólo una chica.

La clase de Inglés era muy aburrida, por suerte ya seguía la siguiente, la cual era Física. No entendía mucho esa materia, nunca me había gustado tampoco, pero tenía que asistir.
Comencé a guardar mis cosas en la mochila para colgarla sobre mis hombros. Salí del salón hacia el de Física, cuando llegué volví a dirigirme hacia la parte trasera del salón. Dejé mi mochila en el suelo a la izquierda de mis pies, volteé hacia el frente donde el maestro ya se encontraba escribiendo algo en la pizarra, pero mis ojos se dirigieron hacia la puerta a la derecha del salón por donde entró la misma chica rubia de antes. Demonios, ¿Me tocarían todas las clases con ella? Esperaba que no. Que idiota era. Justamente ella se dirigía hacia mí, oh no. Por suerte se había sentado dos filas a mi derecha, exactamente en la última banca, donde tenía vista directa a mí. ¿Se habría dado cuenta de mí? No creo, ¿O si?

El maestro estaba explicando el trabajo que iba a dejar mientras él asistía a una reunión de maestros, pero yo no había entendido absolutamente nada. En poco tiempo el maestro había salido del salón dejándonos hacer ese trabajo, parecía simple, pero era muy complejo, por lo menos para mí.
-Mierda..- susurré al bajar mi mirada a ver al libro, no entendía mucho, ¿No había puesto la suficiente atención? ¿O el maestro no lo había explicado lo suficientemente bien? Quizá eran las dos, pero ese no era mi problema en ese entonces, sino era que yo no entendía un carajo y el maestro no estaba en el salón, tampoco planeaba ir a buscarlo. Todos los pensamientos en mi mente se desvanecieron al momento en el que yo había sentido que alguien llegaba a la banca de mi derecha, pues estaba vacía.

-Hola..- escuché una dulce voz que me saludaba tímidamente, volteé y ahí se encontraba ella.
-Hola..- saludé de regreso, mierda, este era uno de los días que yo había sentido eternos en esa época.

Si hay algún error que me follen, de igual modo escribo mierda.

No Me ImportaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora