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Luego de ese ataque de duendecillos Harry se fue junto a su equipo de Gryffindor quien entrenaría más temprano. Alaska junto con sus dos amigos se dirigieron hacia fuera para leer algunos libros.

— Harry me ha mencionado que deberá quedarse con él luego de su entrenamiento — Dijo Alaska.

— Que envidia — Respondió Hermione soltando un suspiro.

— Estás loca? Ese profesor no debería estar aquí, sus tontos libros y su rostro podrían irse bien lejos — Reprochó Ron —. Tuve que oír a mi madre hablar sobre él cuando saco sus libros y ahora está aquí, la desgracia me persigue.

Decidieron seguir con sus libros hasta que Ron menciono al equipo de Quidditch, pero su sonrisa se borró cuando vio a los de Slytherin dirigirse hacia el campo de juego.

— Habrá problemas — Menciono Ron haciendo que las dos niñas lo siguieran.

Wood había apartado el campo de juegos para ellos ese día pero el equipo de Slytherin también lo hicieron con la autorización de Snape ya que debían entrenar a su nuevo buscador.

— Ya encontraste buscador? Y quién es? — Pregunto Oliver.

Entre medio de las serpientes salió nada más y nada menos que Draco junto con su sonrisa arrogante mientras veía a Harry.

— Malfoy? — Pregunto sorprendido Harry.

Los de Gryffindor lo tomaron como una broma pero Harry no, sabía que siempre quería arruinarle sus cosas y debía cuidarse la espalda porque a Malfoy no le importaría hacer trampa si fuese necesario para ganar.
Y no solo eso, también su padre compro el último modelo en escobas para todo el equipo.

— En el equipo de Gryffindor nadie debe comprar su puesto, lo ganan con su talento — Dijo Hermione a lo que Alaska sonrió orgullosa de su amiga.

Draco la fulminó con la mirada y se acercó para responder con arrogancia y maldad como él sabía hacer.

— Nadie pidió tu opinión sangre sucia — Dijo Draco.

Ron intento defender a su amiga hechizando a Draco pero el hechizo fue directo al pelirrojo ya que su varita se había roto a causa de su entrada triunfal a su primer día de clases. Weasley salió expulsado y de inmediato sus tres amigos fueron por él.

— Ron estas bien? — Pregunto Alaska pero se retracto cuando vio que esté vomitaba babosas.

Harry les dijo que debían llevarlo con Hagrid lo más pronto posible, tomaron al pelirrojo y salieron de allí. Pero Draco tomo el brazo de Alaska para detenerla, esta ya harta de los comportamientos de Malfoy le lanzo un puñetazo en su mejilla.

— Idiota! — Dijo para ir junto a su amigo quien la necesitaba.










[...]









Hagrid fue de mucha ayuda, Ron ya se encontraba bien y bastante alegre al saber que Alaska había cobrado venganza por ello.

— Estoy segura que me castigarán — Dijo Alaska volviendo a la sala común.

— No lo creo ya lo hubiesen hecho si es que Draco les dijo algo al respecto — Menciono Ron.

Cuando estaba apunto de ir a su habitación, Dean se acercó a ella para avisarle que el profesor Snape la llamaba. Alaska suspiro cansada y sabía que la castigarian, se despido del par y fue hacia el profesor Severus.

— Señorita Potter, sigame — Dijo Snape.

Mientras caminaban hacia su aula, Snape le menciono que el capitán del equipo de Slytherin le aviso lo sucedido con Malfoy ya que Draco no lo hizo por esa razón deberá ayudar a ordenar su salón antes de la cena.

— Está bien profesor — Dijo Alaska.

Sabía que era lo correcto y no se arrepentía por haber golpeado a Draco así que no protesto. Mientras Snape se concentraba en algunos cuadernillos de otros alumnos, Alaska comenzó a limpiar el salón.

— Y pensé que los de quinto eran más ordenados — Menciono al ver todas las cosas desordenadas —. Son un caos.

— Menos platica y más limpieza, Potter — Dijo Snape.

— Lo siento — Murmuró.

Limpio los estantes y calderos, ordeno las sillas y mesas. Por último guardo los libros por orden alfabético como Snape los tenía pero cuando tomo uno de esos libros le trajo curiosidad y comenzó a ver las páginas para corroborar si eran interesantes como la portada lo hacía ver.

— Hazlo otra vez....ven conmigo — Su piel se erizo por completo al oír la voz de Voldemort —. Ya no hay tiempo, ven conmigo.

No supo cuando pero dejo caer los libros que estaban en sus brazos y retrocedió aterrorizada. Su respiración se agitó y su cuerpo a temblar.

— Sígueme....

Cuando oyó eso último su cuerpo se desplomó en el suelo al sentir mucho miedo. Snape la vió desde que los libros cayeron pero se mantuvo sentado allí hasta que la niña cayó al suelo, cuando lo hizo estaba entre la espada y la pared al querer ir o no ir ayudarla.
Pero oyó que alguien venía así que se levantó de inmediato y actuó como si estuviese preocupado por ella.

— Te unirás a mí, tarde o temprano Potter — Hablo Voldemort.

Alaska despertó aturdida aún en la sala de Slytherin, Snape había tomado su cuerpo y la veía expectante esperando su reacción.

— Que pasó?

— Lo mismo me pregunto señorita Potter — Dijo Snape.

Alaska trago en seco y se levantó de golpe, pidió al profesor dejarla ir y a pesar que esté lo dudo un poco acabo aceptando. La niña salió corriendo pero para su sorpresa todo el mundo estaba en los pasillos, se escabulló entre la multitud y vio el mensaje escrito de sangre y Harry muy cerca.
El niño al verla expreso preocupación y ella igual, sabía de quién provenía ese mensaje y ya temian por la vida de ambos.

Los cuatro niños debieron quedarse a explicarle a Dumbledore y a los profesores lo sucedido, Snape estaba culpando sin pruebas a Harry pero los tres niños que estuvieron en ese momento se defendieron sin problema.
Alaska permanecía callada ya que sabía el porque de ese mensaje y parecía cada vez más asustada.

— Son inocentes Severus no tienes pruebas para culparlos, ahora niños vuelvan a su sala a descansar — Dijo el director —. Deben tener mucho cuidado.

Alaska le dio una corta mirada a Snape y fue detrás de sus dos amigos y hermano.

Harry les hablo sobre lo que había oído y su hermana sintió tristeza por él, era un niño bueno para que le sucedieran tales cosas.

— También oí voces y me desmaye — Dijo Alaska haciendo que los tres la mirarán.

𝐇𝐄𝐈𝐑𝐄𝐒𝐒 |𝐎𝐥𝐢𝐯𝐞𝐫 𝐖𝐨𝐨𝐝|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora