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— ¡Mami! ¡Mami! — le llamo su hija con su típica voz chillona, al bajar su vista dejo de lado sus pensamientos y recuerdos que monotamente siempre estaban presentes.

— Mi Alicia, perdona estaba distraída ¿qué es lo que decías? — preguntó esperando con una sonrisa tierna dedicada a su niña.

— .... Nada mami — Paro algo triste, su madre estaba en la Luna así que era obvió que no le haría caso o al menos no ahora — Sabes, estas muy cansada mejor ve a dormir. — sugirió la pequeña con su sonrisa resplandeciente como siempre lo hacía.

— ¿Y tú que harás mientras yo hago eso? — preguntó curiosa la madre pues amaba que su hija sea tan empatía con todos y con todo, una niña muy buena y cariñosa a su parecer — ¡Ah! ¿Cariño ya cenaste? — Recordó de pronto, pues al estar todo el día fuera de su casa, que más parecía una mansión, trabajaba en la administración de sus hoteles y casi nunca estaba en un solo lugar no tenía tiempo de siquiera desayunar con la pequeña rubia. Ser dueña de una línea completa de hoteles era un trabajo complicado y más aún si querías que tus clientes tuvieran su mejor estadía.

— Si pero los de la limpieza se fueron antes y por eso se olvidaron de lavar los platos así que yo lo haré, no te preocupes mami — aclaró la pequeña esperando a que su madre se fuera a descansar.

— Mi niña, sabes que no tienes que hacer eso yo puedo ir y hacerlo.

— Pero yo quiero mamá, tú estás muy cansada después de ir a trabajar. Déjame hacer esto por ti ¿siiiii? — Insistió la pequeña rubia con una carita de cachorro. Era técnicamente imposible que Charlotte se resistiera a su niña, así que lo único que pudo hacer fue asentir con calma ante la petición de la infante .

— Esta bien, pero luego de que termines te vas a la cama y te me duermes ¿entendido? — pidió pellizcando las mejillas rosadas de su primogénita.

— Si, eso haré — respondió muy feliz a su madre, igual se lo iban a compensar cuando los tres fueran al parque de diversiones mañana y así volvió al sofá para terminar de ver su animación.

Siendo que después la omega mayor fue subiendo las escaleras para dirigirse a su habitación matrimonial que compartía con su esposo a quien tendría que confrontar como todas las noches desde hacía ya 6 años..... Esa sería otra larga noche.

Mientras la rubia iba subiendo las escaleras frotando su cien de lo cansada y estresada que estaba sin darse cuenta ya se encontraba en los pasillos dirigidos a los dormitorios, mientras caminaba volteó su mirada para observaba las pinturas familiares que estaban en la pared de este lugar, y si, aún estando en pleno siglo 21 tenían pinturas hechas a mano pero ¿Por qué no sé tomaban fotos como todos en la actualidad? Porque simplemente era un pequeño capricho de "su" alfa ya que a él no le gustaba tomarse fotos por lo que optaron por pinturas. Por un corto momento la omega se detuvo para observar una en particular una pintura específicamente que fue pintada para conmemorar el día de su boda, la rubia estaba vestida de blanco con su hermoso vestido y su esposo estaba con un esmoquin negro con una corbata roja, se veía tan atractivo pero la que resaltaba más era su niña cuando era más pequeña en esos momentos.

Al verla instantáneamente se le salió una sonrisa pero fue arruinada por un pequeño recuerdo. Este vino hacía ella como un balde de agua fría pensando en el encuentro con su ex novia unas horas antes de la boda.

FLASH BACK:

— ¿Es esto lo que realmente quieres? —  preguntó una chica de su misma edad con piel morena, cabello plateado, ciega de un ojo además de ser de la casta "alfas".

"No Todo Puede Ser Tuyo" Alastor X Ángel (Omegaverse) RadioDustDonde viven las historias. Descúbrelo ahora