- El único plan que tenemos es que Venks que vean, Venks que se convierta en polvo, de acuerdo?- Todos asintieron respondiendole a Yoongi.
Eunji iba junto a Hoseok sobre el gran ave que él había creado mientras que los demás iban por tierra. Eunji se sentía feliz, poder ser parte de todo eso la hacia sentir bien e importante, no como antes.
- Te haz salido con la tuya, no?- Pregunto Hoseok volteándose a ver a Eunji.
- No es la primera vez- Levantó los hombros aún con una sonrisa.
- Bien, debes estar atenta, de acuerdo?- Asintió la chica- Es muy probable que de todos modos ayudemos de cerca, de esa forma, tendrás un mejor control con el arco.
-Esta bien- Soltó un suspiro la rubia.
Llegaron donde aproximadamente unas 50 Venks se reunían, se escuchaban sus voces rasposas y malévolas, las que provocaban una sensación de incomodidad a los chicos. La rubia comenzó a disparar las flechas de cristal que Jungkook había creado hacia las criaturas verdes. Muchas comenzaron a desaparecer y los chicos ya se encontraban cansados por el esfuerzo y la energía que estaban poniendo en la lucha.
- Nam hyung!- Grito Jungkook al ver que una criatura iba a atacar al moreno por la espalda.
Sin previo aviso, el castaño empujó a esa Venks y está cayó encima de él. Comenzaron a forcejear y la criatura verde se apoderó del cuello del chico. Esta comenzó a ahogarlo y Jungkook comenzó a desesperarse intentando zafarse hasta que volvió a recuperar ese aire y luego percatarse de ese característico polvo brillante.
Fue Eunji quién lo salvó desde lejos.
Sonrió al verla mientras tosía aún recuperando oxígeno.
El día anterior, cuando llegó a casa con ese aspecto se sintió fatal al mostrarse de esa forma a Eunji, había pasado por su mente no volver a casa esa noche, no quería preocuparla, pero al final, sabía que haría mal, sabía que sería peor y si ella le había prometido contarle sus preocupaciones, lo mínimo que debía hacer era confiar en ella también.
Por otro lado, Eunji sintió un sudor frío en su frente cuando había visto a su chico ahí siendo agredido por esa cosa. ¿Que pasaba si nadie lo veía? ¿Hubiera logrado zafarse? No quería pensar en eso, estaba feliz de haberlo ayudado.
Cada vez quedaban menos y eso solo les causaba alivio. El cansancio los estaba colapsando, sobretodo a Jungkook quien había sido el más afectado, debido a esa Venks que atacó su cuello.
Yoongi fue quien elimino a la última Venks con una ráfaga de fuego. Solo se escuchaban las respiraciones de los seis chicos que estaban en tierra. Mientras tanto recuperaban el aliento, Jimin apagaba los pequeños restos de fuego que el pálido había dejado. Una vez llegaron Eunji y Hoseok al suelo, el chico deshizo a su ave.
- Es normal aún escuchar sus asquerosos ruidos?- Pregunto Jin con la mirada perdida en un punto que solo el conocía.
- También los escucho aún- Dijo Taehyung incómodo- Definitivamente tendré pesadillas hoy.
- Al fin acabamos con ellas- Suspiro Namjoon- Eso significa que ahora pueden casarse sin problemas.
Eunji y Jungkook se vieron mientras sonreían levemente, aunque a la chica se le habían calentado las mejillas.
- Qué creen que vendrá ahora?- Pregunto Jimin sentándose en el suelo.
- Ya nada es seguro, Jimin- Volvió a hablar Namjoon mientras desordenada el cabello rubio del chico con cariño.
Los ocho chicos emprendieron el viaje de vuelta al pueblo, el cual aún estaban con las protecciones que Eunji había hecho. Al deshacerlas, muchas personas afectadas por ver oscuridad nuevamente salieron de sus casas. Namjoon, con voz de trueno, les explico lo sucedido, al oírlo, todos se sintieron más tranquilos y como ya era costumbre, les agradecían a los chicos por su trabajo.
Jungkook a lo lejos, veía a Eunji como era abrazada por una abuelita y la chica respondía el gesto con una bella sonrisa. Esa era la forma en cómo quería que la recibieran la primera vez que vino, pero por obvias razones, no fue posible.
Nuevamente estaba el pueblo a salvo y todo gracias a esos ocho chicos.
[...]
- A si que estuviste sola con Minhyuk en casa- Suspiró intentando no mostrarse molesto el castaño- Que bien.
- Hey, el pobre estaba aterrado, no entendía que sucedía- Contestó Eunji viéndolo mientras caminaban por la ciudad de noche, ese había sido uno de los ejercicios que el menor de los Kim le había dicho que hiciera y con lo impaciente que es la chica, quiso empezar enseguida- Además, no paraba de decirme que me sentara y que me quedara tranquila.
- Bien, un punto para él- Sonrió irónicamente.
- No crees que sería buena idea que él te revisara eso?- Pregunto Eunji poniéndose en frente de Jungkook tocando aquellas marcas rojas que él tenía en su cuello.
- Estoy de maravilla, no quiero que nadie me toque, odio a los enfermeros- Dijo aún molesto- De hecho, desde ahora en adelante, solo te atenderán enfermeras.
- Por qué?
- Muchos chicos te veían de una forma que no me gustaba hoy- Hizo un puchero causando ternura en la rubia.
- Tu no te quedas atrás, diablos, viste a esa chica pelirroja que no paraba de mirarte, incluso fue hasta ti y te abrazo!- Se cruzó de brazos mostrando su molestia- No eres el único molesto.
- Bien, lamentablemente, he estado reflexionando mucho con respecto a esto, porque sabrás tú qué Minhyuk te ha tenido en la mira desde que te vio, a si que pensé en que es algo inevitable no verte- Se encogió de hombros mientras ponía sus manos el la cintura de Eunji y ella tomaba sus mejillas- Si no estuvieras destinada a mi, tal vez si te miraría de la misma forma.
- Te amo, Jeon Jungkook- Dijo la chica viendo aquellos ojos que tanto adoraba.
- También yo, Eunji- Besó su frente para luego apoderarse de sus rosados labios.
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