WEREWOLF IN LOVE WITH THE MOON

Capítulo 7

Nada, gente bonita, ¡que disfruten el cap de hoy!

Capítulo 7

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Stilinski levantó el rostro, apoyándose cómodamente de largo sobre el cuerpo de su novio, apoyando su mentón en la red conformada por sus propias manos enlazadas, mirando desde un poco más arriba al moreno, sabiendo que ni su peso ni sus codos lo dañan.

― ¿De qué conocen tus padres a Deaton?

― No me dieron detalles, Stiles.

― ¿Y no preguntaste? ― La mirada del lobo le dio la respuesta. ― No eres muy curioso, Derek. ― Gimió con aire caprichoso, a lo que su moreno novio primero sonrió, acariciándole una mejilla y deleitándose el amanecer con un beso profundo.

Hale suspiró con entusiasmo, más como el jadeo profundo de su lobo interior deseando más que un simple beso, pero que Stilinski no le permitió explorar cuando insistió en el motivo por el que tenía que reunirse con el veterinario y emisario. No es que no sea curioso, es solo que a medida que fue creciendo, también fue comprendiendo que había cosas que no debía preguntar. Sus padres eran comprensivos, amorosos, protectores; pero también muy firmes y claros con los límites.

― Lo sabrás cuando se lo diga.

― ¿Puedo ir? ¿Puedo escuchar? ― Preguntó, con ojos brillantes y obvio entusiasmo.

― Estás involucrado, Stiles. La razón por la que vamos a ver a Deaton es porque mis padres piensan que te puede orientar.

― Bueno, sabemos que es emisario retirado, aunque nunca supe de qué manad... ¡No me digas! ¿¡Era de la manada Hale!?

El moreno asintió, logrando que su novio se inquietara más, movido por su curiosidad y el tornado de preguntas que seguro se estaban arremolinando en su pensamiento.

― Vamos, sabrás algunos detalles cuando hablemos con él.

― ¿Algunos?

― Estoy seguro de que hablar con Deaton solo incrementará tus dudas, Stiles.

― Tienes razón. Pero, Derek, ¿por qué no mencionaste antes que lo conocías?

― Yo no lo conozco, fue emisario de la manada Hale cuando Laura nació, pero pronto dejó Nueva York, no supe de su relación con mi familia hasta el día que le dije a mis padres que vendría contigo a Beacon Hills.

― Oh. Tus padres son tan misteriosos. Es como si cada día podrían salir con alguna nueva sorpresa.

― Va con la responsabilidad de ser los alfas de la manada más poderosa de una ciudad como Nueva York. Créeme, a nosotros también nos sorprenden a menudo.

Stilinski asintió, honestamente con sus pensamientos volando ya, generando teorías y todo. Hale pudo oler sus emociones con facilidad, por lo que para distraerlo, comenzó a besar el níveo cuello del castaño, aprovechando la ocasión para lamer los lunares ahí. El castaño jadeó interesado con el trato matutino.

― Oh dios, Derek, más vale que no me vayas a dejar a medias ahora, estoy seguro de que papá ya se fue a trabajar y la casa es nuestra.

El lloriqueo del agente federal se le antojó adorable al moreno. Visto que la noche anterior ha sido justo el lobo quien ha dejado todo en solo besos y nada más, argumentando con aire maduro que no podían tener sexo en casa de su suegro como si fueran un par de adolescentes hormonados que no le temen a nada.

― Eres un pervertido, Stiles, ¿sabías?

― Cállate. En mi defensa, es tu culpa por ser tan ardiente~. ― Gimió áspero. ― Y por estar toqueteándome el trasero como lo estás haciendo, lobo lascivo.