Liberty University (l.s) | TERMINADA

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Louis siempre se consideró un omega regular. Siempre con notas regulares, amigos regulares, experiencias regulares y vida regular.

Solo había algo en su vida que no era regular para nada y eso era su vida amorosa. Nunca se había atrevido a enamorarse de un alfa, pues pensaba que algunos podían llegar a ser unos patanes. Sin embargo, hubo un alfa en especial que sin duda alguna le robó el corazón con solo una mirada.

Harry Styles.

Ese era el nombre más perfecto que Louis había escuchado. Todo en Harry era perfecto; sus rizos, sus ojos verdes, su altura, su sonrisa, su voz... TODO.

Louis no podía evitar suspirar por él cada vez que lo veía. Imaginaba escenarios donde él y Harry vivían felices, con tres hijos y un perro llamado Max.

Solo había un pequeño inconveniente en su plan de vida perfecto: Nunca había hablado con Harry directamente. Louis no dudaba que Harry era una excelente persona, pues ya conocía lo suficiente de él para poder llamarse a si mismo un acosador, pero necesitaba que Harry lo conociera a él si quería que su plan para casarse con él funcionara.

En un buen día, Louis estaba observando a Harry desde su casillero cuando un alfa muy grande llegó junto a él.

-¿Puedo ayudarte en algo? -le preguntó Louis confundido.

-No lo sé- le respondió, acercándose a él peligrosamente- ¿puedes?

Louis rodó los ojos. A esto era lo que se refería cuando decía que los alfas podían ser asquerosos. La razón por la cual Louis se mantuvo atrapado entre los brazos de ese chico y los casilleros era que tenía la esperanza de que su Harry se daría cuenta de que estaba en peligro e iría a protegerlo.

Esperó unos 10 segundos, mirándolo fijamente para que volteara y fuera a ayudarle pero nunca lo hizo. Louis suspiró "supongo que tendré que hacerlo por mi mismo" pensó, rodando los ojos.

Louis tomó uno de los brazos del chico y lo empezó a presionar y a retorcer hasta que el brazo llegó hasta la espalda del chico. Él solo pudo retorcerse del dolor sin saber que hacer y entonces Louis le dio una patada en la parte interior de la rodilla, para que cayera arrodillado y con un gran dolor en su brazo derecho.

Él había recibido clases de defensa personal gracias a su madre, pero eso no importaba, pues Louis seguía decepcionado de que esa no había sido la excusa para conocer a Harry por fin.

Se alejó del cuerpo del muchacho, tomó un libro de su casillero y se fue sin decir nada más. Estaba tan concentrado en quejarse mentalmente porque Harry no se había fijado en él que no se diocuenta que cuando se estaba defendiendo, un par de ojos verdes se posaron en él, junto a muchos otros ojos que miraban con atención la escena.

Cuando Louis se fue por el pasillo, no se pudo dar cuenta como Harry lo seguía con la mirada.

~

-Louis, todo el mundo está hablando de lo que hiciste en el pasillo esta mañana- le dijo su mejor amigo, Niall.

-Al menos tú lo notaste- dijo Louis, rodando los ojos mientras se sentaba con su almuerzo en las manos.

-A veces no te entiendo, amigo- le respondió el rubio mientras tomaba un pedazo de su sandwich.

-Niall, creo que nunca llamaré la atención de Harry. Mírame, ya en dos semanas me graduaré y nunca me atreví a cruzar palabra con él- suspiró

-¿Sabes lo que pienso, amigo? Ve y háblale. Por favor, como tú lo dijiste; estaremos aquí solo dos semanas y luego cada quien toma su camino. Si no te acercas a hablarle a Harry ahora ¿cuándo?- le dijo, casi sin respirar- Además ¿cuantas probabilidades hay de que Harry se acerque a ti a hablarte?