Tele-artistas

El gran día

Mucho más arriba, en el Reino de las Nubes, Valeria y Henry estaban preparados para el espectáculo. El club cada vez se veía más lleno, y el vocerío de la muchedumbre comenzaba a ser cada vez más fuerte. Finn y Jake se encargaban de servir bebidas en la barra del club. Mia asomó la cabeza por un instante: era la primera vez que observaba a tanta gente ansiosa por escucharlos.

- ¿Estás seguro de actuar conmigo, Henry? Hay mucha gente...

- La verdad es que estoy un poco nervioso. ¿Puedo dejarte las primeras a ti y cuando me vea capaz salir a tu lado?

- Como quieras. – Respondió Valeria. – Puedes ocuparte del equipo de música mientas tanto.

Y así fue como lo hicieron. Faltaba ya poco para comenzar el show. Y al marcar el reloj las once y media de la noche, las luces se apagaron y dieron paso al gran espectáculo. Valeria saludó a su público, a la vez que comenzaba la primera canción.

- Me vienes a buscar, ahora sí me vas a encontrar. Mí, me, conmigo, lo que te digo, sola sin nadie más. Esta es la situación, no me des una explicación. En la baraja la reina soy yo. Pero yo he estado notando que estabas imaginando que yo bailaba pa' ti ná mas. No, de ti yo ya no quiero ná. Yo ya no quiero ná. – Cantaba Valeria, dejándose llevar por la música, olvidando las miradas de los habitantes de Ooo.

Todos bailaban al ritmo de la música. Saltaban, brincaban, en resumen, disfrutaban. Aquella canción que ellos no conocían les daba energía y felicidad.

- Esto ya no es normal, si me insistes te voy a dar. Tu medicina no es adictiva, es pecado mortal. Fuiste mi perdición, la serpiente ya me engañó. Esa manzana ya la he probao' yo. Yo sola con ella jugando. Que yo no te estoy provocando. Y tú te estás equivocando. Ya no soy tu nena, muchacho...

Henry observaba a Valeria. No podía parar de sonreír. Jamás había sentido tanta emoción y a la vez tanta adrenalina corriendo por sus venas.

- Por la noche no todo es real. Ten cuidado con la oscuridad. Si yo bailo no es pa' ti ná mas. No, de ti yo ya no quiero ná. Yo ya no quiero ná...

La canción estaba terminando. Finn y Jake bailaban desde la barra, al ritmo que servían bebidas a los espectadores, quienes también bailaban durante su espera.

Tantas emociones a la vez habían dejado a Valeria agotada. Y Henry lo sabía bien. Por eso, decidió poner una electrónica mientras ella se recuperaba. Al reconocer la canción, Valeria volvió la cabeza hacia Henry, quien le hizo un gesto para que se acercase al equipo.

- Descansa. – Le dijo Henry. - ¿Qué tal tu primer contacto?

- Oh, Henry, no tengo palabras para explicarlo. He sentido miedo, felicidad, energía corriendo por mis venas. Quería llorar, saltar, reír... Estoy deseando que lo compruebes tú personalmente.

- Valeria, sé que esto te parecerá raro en mí, pero quiero hacer una locura... - Dijo el muchacho, mientras preparaba la próxima canción.

Valeria se dio cuenta en seguida de las intenciones de Henry. Dirigió su mirada hacia él. Él sonrió.

Es ahora o nunca, antes de queme arrepienta. – Concluyó, mientras se colocaba el micrófono y se acercaba alpúblico.