CAPITULO 6

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Elioth

¿Vale la pena hacer algo? Extraño a Amaia, si pero hace años la perdí, hace años que la saqué de mi vida. Me siento devastado, con tristeza Amaia Petrov siempre estará en mi corazón. Vengar su muerte no me traerá de vuelta ni estará conmigo, hace años me cansé de luchar por algo que sería imposible para mí.

Salí de la cárcel por un propósito cuidar de la pandilla del norte y creo que debería hacerlo. Estamos todo en la cena, observo a Ryan y a mis hermanos, suspiro, pienso varias veces en las palabras que escupiré, decido hacerlo, decido soltarlo sin importar las consecuencias.

Me eligieron para ser líder de la pandilla del norte – suelto y saco una gran bocanada de aire de mi sistema, nadie dice ninguna palabra ni siquiera Ryan.

¿No dirán nada? – pregunto confundido.

¿Quieres que te felicite? – pregunta serio Ryan mientras come su comida, miro a mi padre.

Iré mañana hacia el norte, tengo que cumplir con mi palabra y nadie lo impedirá - menciono y me levanto de la mesa.

No vayas al Norte hijo, quédate conmigo pequeño. Necesito a mi hijo - súplica mi madre y me doy vuelta para mirarla, me acerco a ella, tomo su mano.

Es mejor que me vaya mamá - admito pero ella me mira con tristeza.

Sabes que este no es mi lugar por ahora, necesito hacer esto por mi amigo - continúo y ella asiente con lágrimas.

Vendré a visitarte mamá - hablo.

Por lo menos quédate una semana por aquí - me insiste.

Está bien mamá, me quedaré contigo una semana - manifiesto con una sonrisa ¿Cómo decirle que no a la mujer que me dió la vida? Ella es todo para mí. Escucho mi teléfono celular es desconocido, atiendo el número.

Jefe - dice un hombre.

Quien habla? - pregunto confuso

Soy su nueva mano derecha, miembro de la pandilla del norte - menciona el hombre.

Cómo te llamas? - pregunto interesado mientras hago una seña a mamá quien asiente al instante y de retira del pasillo.

Soy Merlin - se presenta.

Iré en una semana para allá - informo,se queda en silencio.

Espero que nos conozcamos pronto jefe - dice y cuelga. Suspiro.

¿Traicionaras a tu familia? - pregunta Ryan y me doy la vuelta.

No los traicionaré, estoy haciendo un favor a un amigo. Yo no quiero ser jefe, nunca he sido - hablo encogiéndome los hombros.

Siempre seré de la pandilla del sur y lo sabes - declaro. Ryan me mira con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

Entonces porque irás? - pregunta.

Porque debo mucho a un amigo mío que me pidió que haga esto. Estaré por tres años ahí, después lo dejaré - digo decidido y mi hermano solo asiente.

Una semana después...

Esta semana pasó muy rápido hasta a mí, me impresionó, Ryan y Aiza nos contaron la noticia de que serían padres de dos mellizos, me alegra por ellos pero al observar el rostro de su mujer me hizo cambiar de opinión. Aiza no es para mi hermano y tengo que probar eso también, investigaré a Aiza, no confío en ella.

Día siguiente.

Mis ojos me molestan por la ventana abierta, abajo se escucha un caos. Me levanto, me cepillo los dientes, me pongo una remera y me dirijo hasta las escaleras para bajarme a la cocina.

Buenos días – saludo mientras bostezo.

Buenos días hijo - saluda mi madre que toma su rico café con una sonrisa, observo a mi padre que está leyendo el periódico, mis hermanos hablan entre ellos. Me siento incómodo, no me siento como si ellos fueran mi familia, me sumerjo en mis pensamientos; pienso en la chica que me encontré ayer ¿Quien será?

Hijo - me llama mi madre que enseguida presto atención

¿Qué pasa? - pregunto

No has tocado tu desayuno ¿estás bien? - menciona. Suspiro.

No tengo hambre, permiso - hablo y me levanto de la mesa.

Hoy es el día que me tengo que marchar, tengo que irme al Norte.

***

CONTINUARÁ...

EL PASADO PERDIDO (#2 H.R) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora