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Seokjin siempre había tenido una buena relación con sus padres, estos habían sido una fuente inagotable de experiencias y buenos consejos para el futuro. Buenos padres crían buenos hijos decía su abuela todo el tiempo, por eso, mientras su padre se paseaba por la habitación de hotel hablando por teléfono con su asistente en Alemania, Seokjin se encontraba un poco más  nervioso.

Su madre estaba a su lado acariciando su mano con todo el amor que una madre puede entregar.

Él era el regalón de la casa, era, y a pesar de su edad, mimado por sus padres y hermano y Seokjin amaba la sensación de ser el más joven en algún lugar.

—¿Amaneciste bien hoy? —su madre tenía ojos de preocupación —tu padre estaba como loco, pensó que la empresa te había obligado a presentarte el otro día sin medir tu estado de salud.

—Yo no le dije a nadie como me sentía mamá, no es culpa de ellos.

—Es lo que le dije, pero este Kim es terco. Como todos ustedes.

Seokjin sonrió extrañando el ambiente familiar. Amaba las reuniones con sus tíos y primos, por obvias razones los últimos años había perdido todo eso por seguir su carrera de Idol.

—Ya estoy bien mamá, solo fue una irresponsabilidad de mi parte no comer adecuadamente —el azabache apretó la mano de su madre y la miró —hay algo que tengo que contarte —habló bajito.

—Claro cariño.

Seokjin respiró un poco más tranquilo y volvió su mirada hasta su padre que aún hablaba por teléfono moviéndose por todo el lugar.

Taehyung se había ido minutos después de que sus  padres hubieran llegado, tan nervioso que hasta un florero botó sin querer mientras hacía reverencias al despedirse.

—¿Como está el abuelo?

—Muy bien, dice que quiere verte antes de que entres al servicio —su madre quitó una pelusa de la manga del pijama de su hijo —te quiere dar consejos, ya sabes como es.

—Si, lo sé —Jin sonrió —serán dos largos años.

—Creo que podría ser una buena experiencia, podrás conocer otras personas, hacer algo más normal… Incluso esta vida tan ajetreada que llevas se vería beneficiada.

—Si, puede ser —Jin estuvo de acuerdo y es que él tenía un acuerdo con sus padres sobre su carrera en el área de entretenimiento.

Luego de 10 años él renunciaría a su agencia y se dedicaría a lo que él quisiera. Él había aceptado muchos años atrás por que jamás se imaginó que su grupo musical se convertiría en una de las bandas más influyentes del mundo entero, que su fama sería tan grande como para recibir premios importantísimos y que serían fuente de inspiración para tantos artistas y fanáticos.

Quedaban tres años para cumplir su carrera en la empresa y dos de esos lo pasaría en el ejército.

Seokjin suspiró bajito, él quería actuar. Quería un papel, cualquiera sea, pero cada año pasaba y él no podía aceptar ninguna oferta a pesar de las miles y miles de solicitudes que llegaban cada día a su agencia.

—¿Te estás arrepintiendo, cariño?

—No —dijo enseguida —solo que ahora es más complicado.

—Ya veo —Sunwon se enderezó en la cama y suspiró —luego podemos pasar a ese tema, por mientras deja que tu madre te cuide ¿Si?

Seokjin sonrió cerrando sus ojos levemente.

—Gracias por venir enseguida, no sabía lo mucho que quería verlos hasta que los vi.

—Eres nuestro bebé, por supuesto que vendríamos, de hecho tu hermano dejó todo listo en el restaurante y también viene a verte.

I HATE YOU SEOKJIN ✓ <Jintae> (Finalizado)Where stories live. Discover now